Amenazas para la agricultura
Plagas contra una correcta rotación
El autor señala que las pérdidas que generan loros y palomas son un serio impedimento para cumplir los mandatos de la sustentabilidad. También advierte que tanto funcionarios como productores deben tomar conciencia y encarar un plan de control.
Impacto considerable. A la izquiera, una torta de girasol en óptimas condiciones. Las dos imágenes restantes reflejan el daño de los loros, que pueden modificar sustancialmente la ecuación económica para el productor. Fotos: Norberto Lavatiatta.
Ing. Agr. Norberto Lavatiatta
Matr. Prof. 1-0513
Cuando se nos pide desde el punto de vista productivo que se mantengan un plan de rotaciones, hay que analizar hasta que punto es lo se puede lograr en forma sustentable. Hay lugares de la Provincia y del País en los que ciertos cultivos no se pueden sembrar debido al ataque de palomas y loros.
Generalmente las palomas atacan en el primer estadio de vida de la planta “comiendose” el cotiledón dejando los lotes con un bajo stand de plantas que en los mejores casos se debe resembrar o normalmente debemos dejar el cultivo con pocas plantas siendo este muy difícil para controlar malezas.
En caso del loro ataca a comienzos del estado reproductivo y los daños son muy elevados, en lotes evaluados en el centro norte de la provincia hubo casos de hasta un 40 % de daño.
Si tomamos una merma promedio del 15 % al precio que esta ahora el girasol y con un promedio de producción de 22qq/has nos da una perdida de $ 500 por hectárea sembrada, una cifra muy alta que pierde el productor y el estado.
En estos años vimos como los ataques aumentaron y mucha gente optó por hacer soja para evitar estas perdidas dejando a este y otros cultivos de lado.
También sabemos que los controles y algunas multas llegan estos no son suficientes y debe haber un plan para bajar la población de loros y palomas. Estado (nacional, provincia y comunas) y productores deben concientizarse que el problema es de todos y se deben realizar la labores pertinentes.
