Gatillo fácil
Reciben a los padres de Rotella
Télam
El ministro de Justicia y Seguridad bonaerense, Ricardo Casal, recibió a los padres de Lucas Rotella, el joven que fue asesinado por un policía en la ciudad bonaerense de Baradero, y se comprometió a acompañarlos y seguir de cerca el avance de la causa judicial.
El funcionario se reunió con Olga y Miguel Rotella, a quienes informó sobre las acciones en las que se está trabajando luego de ocurrido el asesinato, el 12 de este mes.
En ese sentido, se decidió la instalación en Baradero de una oficina dependiente del Centro de Protección a los Derechos de las Víctimas (CPV) y de una fiscalía descentralizada para abordar directamente los casos de mayor gravedad.
Además, el titular de la cartera de Justicia y Seguridad convocó a los familiares a trabajar en conjunto en la búsqueda de soluciones para restaurar la relación de la comunidad con las instituciones.
“Es importante trabajar junto con los vecinos de Baradero para reconciliar a los jóvenes con las instituciones de seguridad y buscar respuestas coordinadas para la superación de conflictos que puedan presentarse”, indicó Casal, según un comunicado de prensa.
El crimen de Rotella (19) ocurrió cuando el joven y dos amigos se encontraban en inmediaciones de la plaza Colón, en pleno centro de Baradero.
Según la investigación, dos efectivos descendieron de una patrulla e impartieron la voz de alto a los jóvenes cuando comenzaban a abandonar el lugar, estando Rotella a bordo de un ciclomotor.
En ese momento, uno de los jóvenes fue demorado por uno de los efectivos y llevado a la seccional mientras que Rotella recibió tres escopetazos por la espalda y resultó gravemente herido, a pesar de lo cual alcanzó a llegar a su casa, donde le contó lo sucedido a su padre.
La víctima fue trasladada al hospital local y murió a la tarde, cuando estaba por ser derivado en un helicóptero sanitario a un centro asistencial de mayor complejidad, en General Pacheco.
Por el hecho, se encuentra detenido el policía Gonzalo Kapp (28), a quien el fiscal de la causa, Marcelo Manso, le imputó el delito de “homicidio calificado”.
