Lo declaró “santafesino notable”
Reconocimiento de la Cámara de Diputados a Mosset Iturraspe
El doctor Jorge Mosset Iturraspe recibe la distinción de la Cámara de Diputados. Los diputados Luis Mauri, Eduardo Di Pollina y Mario Lacava y la vicegobernadora Griselda Tessio, en la nota gráfica.
Foto: Gentileza Cámara de Diputados/D. Dapari
La distinción le fue entregada al jurista en el marco de una sesión especial con presencia de hombres del Derecho, autoridades universitarias y familiares. Fue levantada la reunión extraordinaria por falta de quórum.
Mario Cáffaro
Sin quórum en las comisiones, sin acuerdos políticos y con escasas posibilidades de reunir el número mínimo de legisladores para sesionar, la Cámara de Diputados levantó al mediodía la sesión convocada para ayer pero realizó el reconocimiento al doctor Jorge Mosset Iturraspe como ‘santafesino notable’ por su destacado aporte académico y jurídico. “Es una feliz coincidencia que hagamos la primera sesión con la obra de Guillermo Roux ‘la Constitución guía al pueblo’ con el reconocimiento a alguien que se destacó por trabajar a favor del derecho”, señaló Luis Alberto Mauri (PDP), gestor del homenaje al jurista santafesino, que ha logrado reconocimientos en gran parte del mundo de habla hispana.
Una veintena de legisladores, la vicegobernadora Griselda Tessio; los decanos de las dos facultades de Derecho de la ciudad, José Manuel Benvenutti (UNL) y Zully Degano (UCSF); el presidente del Colegio de Abogados de Santa Fe, Salvador Aiello; jueces y camaristas; autoridades de la Universidad Nacional del Litoral y de la facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales así como familiares y amigos estuvieron en el recinto.
“Me siento conmovido. Nací en una familia política y de políticos, mi padre fue tres veces diputado nacional. He creído en la nobleza y jerarquía de la función política que no es otra cosa que la búsqueda del bien común, la lucha por una sociedad civil más justa y por la vigencia de las instituciones de la República”, dijo -visiblemente emocionado- Mosset Iturraspe a la hora de agradecer el reconocimiento.
“Se equivocan quienes denostan a los políticos qué sería de nosotros si no tuviéramos hombres que se dedican a la política. La dedicación a la política es el abandono de las cosas propias, es estar permanentemente con la obsesión del bien común, de las instituciones, del bien de la República. Estoy en un recinto donde hubiera soñado algún día estar. Hice mis inicios en la política pero no llegué a estar porque me absorbió el derecho, la enseñanza, la abogacía y casi cincuenta años en los que me dediqué a escribir todos los días de mi vida”, resaltó.
El derecho para una sociedad más justa
En la apertura de la reunión, se leyeron parte de los antecedentes de Mosett Iturraspe, autor de más de 80 libros jurídicos, participante en más de 600 conferencias, profesor titular de ‘Obligaciones’ y ‘Contratos’ en las facultades de Derecho de la UNL y la UBA, pero además docente en decenas de facultades de América. Ex conjuez de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, ex decano de la facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales de la UNL y padre de seis hijos y abuelo de 18 nietos como se hizo notar. “Han sido pocos los que con real enjundia han escrito más de 80 libros en el campo del derecho y es por eso que este constituye un acto de verdadera y estricta justicia”, señaló Mauri.
“Su fecundo trabajo en favor de un mejor servicio de justicia y de una superior calidad de vida de los ciudadanos para que por la vía del derecho pudieran aspirar a vivir en una sociedad más justa y más equitativa, constituye el imperativo categórico de su obra”, acotó el demoprogresista. Valoró que como docente “nunca se preocupó de formar seguidores, sino de formar nuevos pensadores que permitan darnos un mejor derecho y un mejor destino como sociedad civil”.
Como contribución al derecho, dijo que “nos llevó a aplicar con dignidad un derecho pensado para todos, mucho más reflexivo, mucho más dinámico y más solidario convencido que si nos recostamos en los pliegues de la justicia y la equidad, poco quedará para el conflicto social”.
Mauri, por último, lo definió luego como “un espejo donde mirarse, porque en él podemos ver el coraje de sus propias convicciones, la rara humildad de cambiar cuando el devenir histórico marca modificaciones políticas, sociales y económicas insoslayables que afectan hasta principios generales del derecho. Siempre nos ha mostrado que no existen conflictos entre lo viejo y lo nuevo, sino que el conflicto se produce entre lo falso y lo verdadero”.
