Un pueblo que espera

Florencia y el dilema de la dulcería

José Zenclussen

[email protected]

Los cerca de 8 mil habitantes que tiene Florencia esperan con ansias una pronta solución al conflicto que traería consigo la reapertura de la dulcería, aportando trabajo genuino a los pobladores de esta laboriosa población del departamento General Obligado, ubicada en el extremo noreste de la provincia, cerca del límite con Chaco.

El problema radica en que el grupo de productores vinculados con la Cooperativa Agrícola Ganadera Dos Provincias Ltda. solicita que sean ellos -o sea productores locales- quienes reactiven la industria cerrada desde 2003, mientras que desde la comuna -cuando el dominio de inmueble y las maquinarias estén a su nombre- pretenden realizar un llamado a concurso público para que toda entidad -privada o no- que esté interesada pueda presentar sus ofertas.

En diálogo con El Litoral, Daniel Speranza secretario de la ex Cooperativa Cartal, manifestó que hubo un compromiso de palabra de parte de la comuna, que en el momento que los pequeños productores de Florencia se volvieran a organizar se les daría la dulcera en comodato. “A partir de ese compromiso se crea la Cooperativa Agrícola Ganadera Dos Provincias Ltda. a la que se sumaron productores minifundistas. Aún estamos a la espera del llamado para acordar un trabajo conjunto en pos de reactivar el desarrollo industrial de Florencia y de poner en marcha la dulcería”.

Escrituración

Speranza agregó que “si bien es cierto que es necesaria nuestra firma para completar el trámite de escrituración del inmueble a favor de la comuna, dicho trámite se reanudó e impulsó, desde principios del 2010, por el grupo de productores que actualmente están vinculados con la Cooperativa Agrícola Ganadera Dos Provincias Ltda. No vamos a firmar una escritura si él opta por traer un empresario de afuera para hacer funcionar la industria y no darle la posibilidad a los productores de Florencia, él esta faltando a la palabra. Dicho compromiso hacía referencia a la oportuna reactivación de la fábrica por una organización local, sobre todo si ésta consideraba a los productores más vulnerables y sus familias”, apuntó.

Por otra parte, Speranza aseguró que se busca que la primera posibilidad de reactivación recaiga en los productores de la localidad y después en inversores de afuera. “Tenemos un proyecto armado para reactivar la industria, sólo necesitamos el apoyo para que los pequeños productores puedan darle valor agregado a su producción de batata. No entendemos por qué se obstaculiza desde la comuna el crecimiento de la industria y el progreso de Florencia; es una lástima, este pueblo es humilde y nos damos el gusto de tener una industria parada”.

Además desde la Cooperativa Dos Provincias, manifestaron su preocupación por la falta de compromiso por parte del gobierno provincial y del Ministerio de la Producción a los reclamos planteados por la entidad.

El principio del conflicto

Rubén Quaín, presidente comunal de Florencia, aseguró que se trabaja para reactivar la fuente laboral. Durante un extenso diálogo con El Litoral afirmó que el dilema comienza con la llegada a la comuna de fondos provenientes de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN), para hacer una fábrica de dulces.

“Estos fondos se entregaron en forma de crédito a 10 años sin interés, para poder reorientar el dinero para la zona, una vez que la ex Cooperativa Cartal los devolviera. Contra ese préstamo hicimos -para garantizar que la plata quede en el pueblo- una hipoteca del inmueble y una prenda por las maquinarias a favor de la comuna, ante la eventualidad de que la Cooperativa quebrara y así poder salvar la fábrica”, indicó.

Quaín agregó que cuando quiebra la cooperativa, se embargan y van a remate los inmuebles de la misma, entre ellos los galpones de trabajo (reciclado de algodón) y las oficinas. En su momento para poder recuperar la fábrica, de común acuerdo con el directorio, se realizó un traspaso a nombre de la comuna, pero ya estaban inhibidos y no se pudo hacer.

“Quedaba como solución hacer un juicio de ejecución de la hipoteca y de la prenda, nos pusimos de acuerdo con realizar el juicio y en el transcurso del mismo reconocían la deuda y traspasaban la fábrica a nombre de la comuna. El problema fue que cada vez que el juez ordenaba hacer el traspaso a nombre de la comuna, la Afip volvía a interponer un embrago y así pasaron los años de idas y vueltas”, dijo.

El titular de la comuna de Florencia indicó que cuando culminaron estos contratiempos -con erogaciones realizadas por la comuna-, llegó la orden judicial de que se traspase la fábrica a nombre de la comuna. “Ya firmamos el 28 de febrero esa transferencia y ahora esperamos que se firme”.

Quaín manifestó que cuando esté el dominio del inmueble a nombre de la comuna, se llamará a concurso público para que toda entidad o privado que esté interesado en invertir y poner en funcionamiento la empresa haga una oferta razonable. “Vamos a llamar a todos los interesados, ellos -por la Cooperativa Agrícola Ganadera Dos Provincias Ltda.- no están excluidos o discriminados. No vamos a cometer el error de poner este capital en manos de personas que quieran sacar otro rédito”, advirtió.