“La duermevela. Momento soñado”, dirigida por Rubén von der Thüsen.

Cuack! sueña en la Marechal

De la redacción de El Litoral

Un intrigante viaje al inconsciente de un hombre será el centro de la escena en la sala Marechal del Teatro Municipal 1º de Mayo. Es que allí el Grupo Cuack! presentará “La duermevela. Momento soñado”, una obra escrita por Rubén von der Thüsen y Federico Kessler. La puesta cuenta con las actuaciones de María Soledad Almirón, José Luís Díaz, Mariela Flores y Kessler y la dirección de Von Der Thüsen. La función de estreno será hoy, a las 22.

Las entradas están disponibles en la boletería del Teatro; el costo de las generales es de 25 pesos, en tanto que para jubilados, estudiantes, empleados municipales, afiliados a Luz y Fuerza y miembros de la AATM y Aammav, el valor es de 15 pesos. Vale destacar que la obra continuará su temporada los viernes 13, 20 y 27 de mayo. La obra ganó el Concurso de Coproducciones en Artes Escénicas 2011 del Ministerio de Innovación y Cultura de la Provincia. Además cuenta con el apoyo de la Municipalidad de Santa Fe y de la Asociación Cultural Israelita Argentina I. L. Peretz.

Onírico

“La duermevela. Momento soñado” centra su relato en un hombre, extranjero de sí mismo, que ingresa al mundo de su propio inconsciente ataviado con galas de príncipe. Tres bailarinas clásicas devenidas en clowns, escapadas de “El lago de los cisnes” ya hace largo tiempo, habitan el espacio. Son los sueños de un hombre obsesionado con la pérdida de las dos mujeres más importantes de su vida. Es el intrincado y “rizomático” camino de los sueños hacia la muerte o el despertar.

Según sus hacedores, desde el texto se plantea una metateatralidad que es explotada y potenciada por la puesta en escena. Tres personajes que habitan los sueños, componen, construyen, materializan a estas mujeres de su vida y a un maestro de ceremonias que nos guía por el mundo onírico del protagonista, conduciéndolo por el intrincado y rizomático espacio de los sueños o la narcosis hacia el momento del despertar.

Los actores aportan a la construcción de este dispositivo con la aplicación de distintas técnicas escénicas, cruzándolas, mixturándolas, mestizándolas. Cabe destacar que durante el proceso el equipo actoral ha trabajado en distintas formas de expresión que han aportado tanto a la totalidad como a su crecimiento individual.

El transcurrir de la obra se hilvana en una sucesión de escenas, presentaciones, representaciones y coreografías que arrastran al protagonista a un final abierto, posibilitador del surgimiento de las aportaciones individuales del público.

Este trabajo se enmarca en lo que Patrice Pavis denomina como Teatro Experimental, con marcados rasgos de Postmodernidad. El texto y la puesta se presentan intertextuales con otros lenguajes expresivos. La relectura de una textualidad clásica como es “El lago de los Cisnes” “nos insta a descubrir sentidos que hasta el momento fueron negados o escondidos esperando ser develados. Optamos por la deconstrucción de la puesta moderna, pero mantenemos formas de procedimiento de la misma”.“Encontramos que nuestro trabajo tiene una marcada continuidad estética con el Teatro del Absurdo y a su vez se nos devela ecléctico, contradictorio, mezclando la estética de lo feo con lo bello y siendo plural en las decisiones espectaculares. Los actores de este proyecto somos personas preparadas en el arte de la actuación y hemos indagado en distintos tratamientos estilísticos. Trabajamos investigando técnicas fusionadas, utilizando algo de la danza, la expresión corporal, las técnicas del clown, el mimo y la improvisación, rasgos éstos que se encuadran en las necesidades que plantea esta puesta en escena de características postmodernas, experimentales”.

En equipo

La obra del Grupo Cuack! es protagonizada por María Soledad Almirón, José Luis Díaz, Mariela Flores y Federico Kessler. El diseño coreográfico es de María Lorena Almirón. El diseño de vestuario y maquillaje está a cargo de Osvaldo Pettinari. La realización de trastos y utilería es obra de José Luís Díaz. La selección musical pertenece a Rubén von der Thüsen y la edición y compaginación es de Bruno Rosado. Los asistentes técnicos y de escena son Milagros Berli y Sebastián Zunino. La dramaturgia es un trabajo conjunto de Von Der Thüsen y Kessler. El diseño de programas es de Cecilia Luna y la fotografía de Martín Bayo. El diseño de luces es obra de Sergio Robinet y Von Der Thüsen y la dirección general de este último.