Era una leyenda de la danza

Falleció Roland Petit

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Con los grandes. Petit creó junto a Picasso, Orson Welles, Jean Cocteau, Rudolf Nureyev y Pink Floyd, entre otros.

Foto: EFE

De la redacción de El Litoral

El bailarín y coreógrafo Roland Petit, fallecido ayer en Ginebra a los 87 años, reunió en su creación artística elementos fundamentales de la danza moderna y los llevó desde los teatros más importantes del mundo al cine de Hollywood.

A sus 87 años, el coreógrafo tenía previstas nuevas representaciones de sus ballets más conocidos en teatros de todo el mundo y el coliseo de París incluso comenzó la temporada 2010-2011 con algunos de sus esenciales: “Le Rendez-Vous”, “Le Loup” y “Le Jeune Homme et la Mort”.

Hasta llegar a ésta, su última temporada, Petit recorrió un largo camino artístico, que lo hizo entrar en contacto, trabajar y crear con nombres fundamentales de diversos ámbitos de la creación, como Pablo Picasso, Orson Welles, Jean Cocteau, Yves Saint-Laurent, Rudolf Nureyev y Pink Floyd.

Sus primeras coreografías las creó para las “Soirées de la Danse“ en el Théâtre Sarah Bernhardt y, con ayuda de su padre, creó un año después de abandonar la Ópera de París los “Ballets des Champs-Élysées”.

Allí, creó “Les Forains”, “Le Rendez-Vous” y “Le Jeune Homme et la Mort”, ballets en los que unió su nombre a los de escritores como Boris Kochno, Jacques Prévert, o Jean Cocteau; artistas como Christian Bérard, Pablo Picasso, Brassaï y Georges Wackhevitch y compositores como Henri Sauguet y Joseph Kosma. Sólo tres años después, fundó el Ballet de Paris-Roland Petit, que bailaba en el Théâtre Marigny de la capital francesa, donde creó “Les Demoiselles de la nuit” para una de las divas del ballet Margot Fonteyn.

Y un año más tarde explota en Londres la sensualidad de su “Carmen”, uno de sus grandes éxitos, por cuya coreografía se le conoce en todo el mundo y que protagonizó su mujer, Renée Jeanmaire (Zizi).

En la capital británica el nombre de Petit se une al de Orson Welles, con quien colabora en “The Lady in the Ice” (1953), preludio de una carrera internacional que lo lleva a la meca del cine.