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Volver al mar

Un grupo de operarios de un astillero de Kesennuma, en Japón, se apresta a devolver al mar un pesquero que el terremoto y posterior tsunami del 11 de marzo pasado puso en tierra firme. La catástrofe que asoló la costa nororiental nipona dejó como trágico saldo 15.547 muertos y 5.344 desaparecidos, la mayoría de ellos en la prefectura de Miyagi, según informó la Agencia Policial Nacional Japonesa. Además, el gobierno de Tokio condicionó hoy la apertura de las plantas nucleares paralizadas en el país a la previa realización de pruebas para comprobar si pueden resistir otra catástrofe, cuando se cumplen cuatro meses del sísmo que desató el segundo accidente más grave de la era atómica. Las pruebas de resistencia, que permitirán calibrar la fortaleza de las centrales ante desastres naturales de gran magnitud y sopesar sus puntos débiles, se realizarán teniendo en cuenta las normas propuestas por la Unión Europea, Foto: Agencia EFE