La presidenta en Puerto San Martín
Otro acto que desató polémica
Cristina vino para apoyar la candidatura de Agustín Rossi y volvió a chocar con el gobernador Hermes Binner, que fue criticado por la mandataria y silbado por la tribuna kirchnerista.
“Argentina creció 9,2 por ciento el año pasado, el NEA y el NOA crecieron por encima de la media nacional. ¿Cómo es posible que Santa Fe haya crecido por debajo de ese nivel?”, dijo la mandataria.
Foto: Información Pública
Germán de los Santos
Corresponsalía Rosario
En los últimos 30 días la presidenta Cristina Fernández de Kirchner visitó dos veces el sur de la provincia, y cada vez que apoyó un pie en suelo santafesino decidió chocar con el gobernador Hermes Binner. El primer capítulo de la disputa en medio de la campaña electoral se empezó a escribir el 20 de junio pasado, cuando el mandatario provincial decidió anular su discurso tras ser silbado por las agrupaciones kirchneristas que se habían movilizado al Monumento a la Bandera. Desde el Frente para la Victoria plantearon que Binner había forzado su rol para victimizarse.
Ayer a la tarde se escribió un nuevo capítulo en esta obra de enredos. En un acto en Puerto General San Martín, donde la presidenta puso la piedra fundamental para la construcción de una segunda planta de biodiésel de la Corporación América, que pertenece al empresario Eduardo Eurnekian, la presidenta volvió a sembrar la discordia con la administración de Hermes Binner, quien competirá en las primarias nacionales del 14 de agosto como candidato del Frente Amplio Progresista. Pero más allá de que el actual gobernador santafesino sea oponente de Cristina Fernández en el comicio presidencial, la jefa de Estado apuntó sus críticas a la gestión del Frente Progresista en la provincia para intentar apuntalar al candidato a gobernador de Santa Fe para Todos, Agustín Rossi.
“Argentina creció 9,2 por ciento el año pasado, el NEA y el NOA crecieron por encima de la media nacional. ¿Cómo es posible que Santa Fe haya crecido por debajo de ese nivel?”, se preguntó en voz alta la presidenta y reiteró otro interrogante que generó una sonrisa en el rostro del jefe de bancada kirchnerista, quien estaba sentado en la punta de la mesa: “¿Por qué no va a poder levantar más puntos y sumarse a este crecimiento?”, sostuvo en alusión a las elecciones a gobernador del próximo domingo.
Crecimiento y desarrollo
Cristina aterrizó con el helicóptero presidencial en el predio de la firma, acompañada de los ministros de Planificación Federal, Julio De Vido; de Trabajo, Carlos Tomada, y de Industria, Débora Giorgi. La esperaban los representantes de la firma, entre ellos Eduardo Eurnekian, Rossi, el intendente de Puerto General San Martín Carlos De Grandis y la comitiva encabezada por el gobernador santafesino y los titulares de las carteras de Producción, Juan José Bertero, y de Aguas y Servicios Públicos, Antonio Ciancio.
El discurso de Cristina giró en torno al crecimiento del país a partir del ciclo que se inició tras la llegada de Néstor Kirchner a la presidencia. Como acostumbra, la mandataria derramó cifras sobre el desempeño económico del país.
“Queremos un desarrollo que implique valor agregado”, dijo, y destacó que en 2010 se alcanzó un crecimiento del 9 por ciento, con un promedio en los últimos años de 7,6: “Crecimos 80 por ciento del PBI en estos ocho años con políticas que muchas veces no fueron entendidas y duramente criticadas”.
Luego felicitó a Eurnekian, titular de la Corporación América, por “creer en el país y en sus posibilidades; y por alcanzar con esfuerzo e imaginación, los objetivos planteados para el crecimiento de la Nación”.
Cristina advirtió que la soja utilizada en la producción de biodiésel genera más empleo y valor agregado que aquella que se “mete en un camión y se envía al puerto”.
“Nuestras medidas son acusadas de proteccionistas pero en otros países y con otros nombres hacen lo mismo”, recordó, y destacó que el proyecto que estaba en marcha en Puerto General San Martín “se financia en 148 millones de pesos con el Fondo del Bicentenario, como parte de todos los recursos que se han inyectado al mercado interno”.
Primero por Twitter
Binner prefirió no confrontar durante el acto con la presidenta, aunque unas horas después dio su opinión sobre lo sucedido. “Transformar en acto electoral la inauguración de una empresa privada, es una oportunidad perdida de respetarnos entre los argentinos”, se quejó, a través de su cuenta en Twitter.
Pocas horas antes, el mandatario había reactivado su cuenta en esa red social para anticiparse con una ironía: “Bienvenida la presidenta Cristina Fernández. Que vuelva muchas veces a la provincia a inaugurar obras construidas por los santafesinos”.
En otro tono, durante el acto reiteró que Santa Fe es la provincia que más recursos fiscales aporta a la Nación. Pero la nueva -y reiterada- polémica no había hecho más que comenzar.