Bolivia

Evo investigará la violencia policial

b.jpg

Activistas continúan una vigilia en La Paz en apoyo a los indígenas bolivianos que rechazan la construcción de una carretera por un parque nacional.

Foto: EFE

De la Redacción de El Litoral

[email protected]

Telam

El presidente de Bolivia, Evo Morales, anunció que se investigará la violencia policial contra los indígenas que rechazan la construcción de una ruta en una reserva ecológica y decidió suspender la obra, pero dirigentes de la marcha afirmaron que continuarán con la protesta y el gabinete sufrió otras dos bajas.

Morales comunicó la suspensión de la carretera hasta que se pronuncie por su pertinencia o no la ciudadanía de los departamentos (provincias) Beni y Cochabamba en un referendo cuya convocatoria fue anticipada el domingo por el propio mandatario.

Poco después, el viceministro de Coordinación Gubernamental, Wilfredo Chávez, reveló que Morales ordenó que se investiguen los hechos de violencia ocurridos el domingo contra la marcha de los indígenas, “sin respetar privilegios y hasta que se establezca la verdad”.

Anoche, finalmente, el ministro de Gobierno, Sacha Llorenti, anunció que había presentado la renuncia al cargo y que Morales se la había aceptado.

Se sumó así a la salida del gobierno del viceministro del Interior, Marcos Farfán, que había dimitido más temprano, luego de que Llorenti lo responsabilizara por la represión policial del domingo, y a la “renuncia irrevocable” de la ministra de Defensa, Cecilia Chacón, presentada ayer en rechazo a esos episodios.

“Mientras (se realiza) este debate nacional y para que los departamentos decidan, queda suspendido el proyecto de carretera del Territorio Indígena del Parque Nacional Isiboro Sécure (Tipnis), y que sea lo que el pueblo decida y especialmente estos dos departamentos”, afirmó Morales en declaraciones efectuadas en el Palacio Quemado y recogidas por la agencia estatal ABI.

Pese a estos anuncios, a los que se agregó la promesa oficial de incorporar veedores de las Naciones Unidas en la investigación de lo ocurrido, el presidente de la Confederación Indígena del Oriente Boliviano (Cidob), Adolfo Chávez, anunció que reanudarán la marcha.

El titular de la Cidob, organización que encabeza la protesta, también anunció que se sumarán otros sectores a la marcha, según consignó la agencia noticiosa italiana ANSA.

Mientras tanto, la Central Obrera Boliviana (COB) ratificó la huelga nacional con movilización a la que convocó para hoy, en reclamo de la anulación del proyecto para la construcción de la ruta.

La crisis política a causa de la represión a la protesta indígena se reflejó primero en la renuncia de Farfán, quien tenía a cargo la policía y fue responsabilizado por Llorenti de haber ordenado la represión.

“Fue una decisión que se tomó en ese lugar (cerca de la marcha indígena); por el informe que tenemos lo ha tomado el viceministro Farfán a sugerencia de algunos mandos policiales, nosotros nos enteramos cuando ya estaba en curso el operativo”, afirmó Llorenti.