Entre irregularidad y lesiones

Saltos poco convincentes

Los Wallabies vencieron a Rusia y clasificaron, pero dependen del resultado de Irlanda con Italia para saber la posición definitiva.

César Miño

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Con una actuación que marcó diferencias notorias entre la primera y segunda etapa, Australia derrotó esta madrugada (hora argentina) a Rusia por 68 a 22, asegurándose el pasaporte a los cuartos de final de la VII Rugby World Cup, más allá de que para conocer si lo hará desde el primero o segundo puesto del Grupo C, deberá aguardar lo que ocurra en el atrayente duelo que irlandeses e italianos protagonizarán a las 4.30 de mañana en Dunedin.

Partiendo de la base de que a priori se trataba de un choque sin equivalencias, es oportuno hacer referencia al buen primer tiempo de los Wallabies, que tras acomodarse de algunas imperfecciones, desandaron un contundente arsenal de incursiones ofensivas que devinieron en seis conquistas, de las cuales cuatro fueron consecutivas.

Como contrapartida, los rusos aprovecharon un desacierto aussie que deparó en el ensayo que permitió que el primer tiempo concluyera 47 a 5 en favor del bicampeón mundial.

El complemento arrancó con lluvia y un tempranero try australiano, lo que permitía imaginar un marcador estrepitoso para Los Osos, debutantes absolutos en estas lides, que sin dudas se van con la frente muy alta.

Sin embargo, desconcentraciones, malas decisiones y una especie de creciente desconcierto, provocó una notoria merma en el funcionamiento australiano, sumiendo al partido -largamente definido- en una sucesión de equívocos y movimientos aletargados.

Como si esto fuese poco, una nueva lesión se sumó a las huestes de Robbie Deans: la del winger Drew Mitchell, quien deberá esperar por estudios de alta complejidad para conocer sus chances de estar en la próxima instancia.

Justamente, la increíble cantidad de lesionados llevó hoy al entrenador neozelandés que conduce al elenco aussie, a colocar al octavo Radike Samo como winger en el cotejo de hoy, que más allá de haber sido un mero trámite, volvió a entregar una imagen poco propicia para una potencia semejante.

/// SÍNTESIS

Australia 68

Rusia 22

Estadio: Trafalgar Park de Nelson.

Referee: el neozelandés Bryce Lawrence.

Jueces de Touch: los irlandeses George Clancy y Simon McDowell.

TMO: el sudafricano Shaun Veldsman.

Australia: James Slipper (Tatafu Polota Nau), Stephen Moore (Saia Fainga’a) y Sekove Kepu; James Horwill (capitán) y Nathan Sharpe; Scott Higginbotham (Salesi Ma’afu), David Pocock (Rocky Elsom) y Ben McCalman (Rob Simmons); Luke Burgess y Quade Cooper; Drew Mitchell (Nick Phipps), Berrick Barnes, Adam Ashley-Cooper, Radike Samo y James O’Connor.

Head Coach: Robbie Deans.

Rusia: Sergey Popov, Vladislav Korshunov e Ivan Prishchepenko; Alexander Voytov y Adam Byrnes; Artem Fatakhov, Vyacheslav Grachev y Victor Gresev; Alexander Yanyushkin y Yury Kushnarev; Vladimir Ostroushko, Alexey Makovetskiy, Andrey Kuzin, Denis Simplikevich y Vasily Artemyev.

Relevos: Evgeny Matveev, Vladimir Botvinnikov, Alexey Travkin, Andrey Garbuzov, Alexander Shakirov, Konstantin Rachkov y Mikhail Babaev.

Head Coach: Nikolay Nerush.

Tantos australianos: dos tries de Barnes, Mitchell y Pocock; uno de McCalman, Moore, Ashley-Cooper y Ma’afu; más nueve goals de O’Connor.

Tantos rusos: tries de Ostroushko, Simplikevich y Rachkov; más dos goals y un drop de Rachkov.