Estrategia segura
Combinar para asegurar
La elección de la fecha de siembra en el cultivo de maíz es una práctica de manejo que afecta la producción y calidad del forraje producido porque modifica las condiciones ambientales en las que crece el cultivo. El trabajo realizado por el INTA Rafaela demuestra los distintos comportamientos.
Ings. Agrs. Romero, L. y Mattera, J.
El objetivo de este trabajo fue analizar el comportamiento de distintos híbridos en dos épocas de siembra comúnmente utilizadas en la región. Una vez más en la zona, queda claro que el comportamiento climático es muy variable y que sembrar en dos épocas es una buena medida para tratar de asegurar la disponibilidad de forraje.
Los híbridos se sembraron sobre un suelo Argiudol típico serie Rafaela el 19/10/2010 para la época temprana y el 14/12/2010 para la época tardía. Se utilizaron parcelas de cuatro surcos a 0,52 m entre hileras de seis metros de largo y cuatro repeticiones por cultivar. La densidad fue de cinco semillas por metro lineal de surco. Se fertilizó a la siembra con 50 kg de N/ha con urea. Para el control de las malezas se utilizó atrazina a razón de 4lt/ha. Se aplicó Clorpirifos para el control de cogollera.
Los híbridos en la época de siembra temprana fueron cortados entre el 05/02/2011 y el 21/02/2011 y los híbridos sembrados en la época tardía fueron cortados entre el 18/03/2011 y el 04/04/2011. Al momento de corte se determinaron las siguientes variables: altura de la planta, producción de materia verde (sobre 4 m. lineales de los dos surcos centrales por tratamiento y repetición), porcentaje de materia seca (dos plantas por tratamiento y repetición), producción de materia seca (Kg MS/ha), composición de la planta (tallo, hoja y espiga) sobre base seca (dos plantas por tratamiento y repetición), y la composición de la espiga (chala, marlo y grano) sobre base seca. Se calculó la relación grano/planta como el porcentaje de grano sobre la producción de materia seca. Calidad de la planta entera: porcentaje de proteína bruta (PB), fibra detergente neutro (FDN) y fibra detergente ácida (FDA) sobre muestras de dos repeticiones.
Los resultados fueron analizados mediante análisis de la varianza y se compararon las medias por DGC (a=0,05). Como se detectaron interacciones significativas para la mayor parte de las variables se compararon los híbridos dentro de cada fecha de siembra.
Las lluvias ocurridas entre octubre a diciembre fueron inferiores a la serie histórica, esta situación se revirtió en los meses enero y febrero, mientras que en marzo y abril volvieron a estar debajo del promedio (Cuadro 1).
Forma y contenido
La altura de los híbridos en la época temprana fue en promedio de 165 cm, El más alto fue DK 910 (173 cm) (Cuadro 2). En la época tardía, en promedio los materiales fueron más altos (203 cm). El SRM 565 alcanzó el mayor valor (226 cm). En la época temprana, los materiales destacados por su alta producción fueron DK 910 y DUO 565HXRR2 con niveles entre 16000 y 17500 kgMS/ha. En cambio en la fecha tardía, los materiales más productivos fueron DUO 560 HX, APACHE y ZEA 3265 alcanzando entre 19000 y 21000 kgMS/ha. El promedio de producción de materia seca de todos los híbridos evaluados fue mayor en la época tardía que en la temprana (18043 kgMS vs. 14120 kg MS), asociado a una mayor abundancia de precipitaciones hacia el verano. El porcentaje de materia seca fue similar entre los híbridos en ambas épocas de siembra. En relación con la composición morfológica del forraje, en la época temprana SRM 565 tuvo el mayor porcentaje de espigas (53 %) y el menor porcentaje de tallo (29 %). En cambio, la relación grano-planta fue similar entre los híbridos. En la época tardía, los híbridos Apache, DUO 565 HXRR2, y DK Feed RR2 presentaron mayores valores de porcentaje de espiga, entre 63 y 64 %, y menores de tallo, entre 22 y 24 %. Tampoco en esta época se hallaron diferencias significativas en la relación grano-planta entre híbridos. El porcentaje de espigas y la relación grano-planta en la época tardía fueron en promedio mayores que en la época temprana.
Valor nutritivo.
El contenido de proteína bruta del forraje (PB) fue similar entre híbridos en la época de siembra temprana (desde 5,4 a 6,9%). En la época de siembra tardía, también fue similar el porcentaje de PB entre híbridos, variando de 5,7 a 8,5 %. Sin embargo, en esta época, los híbridos DUO 560 HX y DK Feed RR2 presentaron niveles de PB significativamente menores. De todas formas, el contenido de PB en el forraje de maíz es un nutriente deficitario, que requiere ser complementado con una fuente de proteína adicional, por lo que tiene una importancia secundaria en la comparación del valor nutritivo entre híbridos.
Por otra parte, el contenido de fibra detergente neutro (FDN) tiene mayor importancia, ya que un menor contenido está relacionado con un mayor consumo animal. En la época temprana SRM 565 y LT624 MGRR2 tuvieron los menores valores (42,2 y 43,6 % de FDN, respectivamente). En la época tardía se destacaron ZEA 3265, SRM 565, DK Feed RR2 y LT 624 MGRR2, con valores entre 40 y 45 % de FDN.
En cuanto al contenido de fibra detergente ácido, relacionado negativamente con la digestibilidad del forraje, no se hallaron diferencias entre híbridos en la primera época (24,7 % promedio de FDA). En la época tardía, el promedio se halló en 23 % de FDA, diferenciándose sólo DK 910, con un contenido significativamente mayor (29,2 %).
Derribando mitos. Contra la creencia que los maíces tempraneros rinden más, el trabajo arrojó resultados interesantes.
Foto: Archivo
Mejor más de una
A diferencia de lo ocurrido en la campaña 2009/2010 los maíces sembrados en la época tardía fueron más productivos que los sembrados en la época temprana. Los tardíos presentaron un mejor contenido de espigas y relación grano/planta, y desde el punto de vista de la calidad, en esta época los híbridos mostraron un menor contenido de FDN y FDA. Como en la campaña anterior, se puso de manifiesto el distinto comportamiento de los materiales según la fecha de siembra, tanto en producción de materia seca como en la calidad del forraje. Estos resultados indican que en las condiciones de Rafaela es importante tener en cuenta el diferente comportamiento climático que se presenta entre años, que hace que no se pueda estar seguro de disponer de todo el forraje necesario en una sola fecha de siembra. La combinación de dos fechas asegura la disponibilidad, teniendo presente que el comportamiento de los híbridos utilizados cambiará según la época de implantación y que la aplicación de toda la tecnología disponible es lo que permitirá lograr el máximo rendimiento y calidad de la materia seca.
