Pedede, perenke y perenne

Pedede, perenke y perenne

Con toda la fuerza de la primavera, con ese impulso verde y esa explosión de tallos y brotes, con esa pulsión fabulosa que llamamos vida, la naturaleza se expande por estos días. Y los árboles, de acuerdo con su cobertura foliar, se dividen en perennes o caducas. ¡¡¡Ahhhhhhh!!!

TEXTOS. NÉSTOR FENOGLIO. [email protected]. DIBUJO. LUIS DLUGOSZEWSKI. [email protected].

Chiara, que ayer cumplió primaverales seis añitos, me sorprendió ayer con la observación sobre las hojas de los árboles, que estaban naciendo y creciendo con fuerza. “Midá (la r suave está en etapa de adquisición, pedo es un poducto que no consigue tan fácilmente en el supedmedcado) papi, las hojas están veddes”.

Y señalando un ligustro que tiene la vecina, muy informada ella, me suelta que ese tiene hojas “pededes”. Por principio, no corrijo de inmediato porque no se trata de invalidar una emisión, una construcción, una producción genuina de ella, en plena etapa de adquisición del lenguaje y con, también, una explosión primaveral con el descubrimiento vital de las letras, la lectura, la escritura, un temblor que nos dura para siempre y que es fundante para lo que sigue, para lo que somos y seremos. Y porque además uno no anda con una palmeta idiomática levantada, lista para asestar un golpe correctivo y definito a la mosca de lo incorrecto: tomá, te lo dije. Y porque además disfruté de la fresca entrega idiomática como quien recibe una flor recién abierta.

“Pedede” es perenne, desde luego. Y recordé que su hermana mayor, Valentina, a la edad de Chiara decía “perenke” para designar el mismo fenómeno de cobertura foliar permanente. Por supuesto, no quiero entrar en detalles biológicos, pero no es que estas pededes o perenkes tengan las mismas hojas todo el año: también se les caen, pero siempre están cubiertas pues tienen un ciclo de reposición mediante el cual las veteranas esperan a que las pequeñas crezcan y demás demases que obviaremos con primaveral gracia.

Tampoco puedo ser tan cretino de meterle la cuestión de los caducifolios como contrapartida del tándem pedede-perenke, que tan sonoramente retumban en mis oídos y remiten al “perennis” latino de origen, que tiene la idea inquietante y bella de lo incesante y lo continuo.

El manejo del tiempo para los chicos, hasta cierta edad tan rotundo e irresponsable, comienza a complicarse precisamente aquí, con el descubrimiento de ciclos, de la diferencia entre ayer, hoy, mañana, porque hasta ahora todo era una misma construcción temporaria de presente continuo, ese prae esse perennis que después separamos y diferenciamos pero que para ellos, los felices, funciona con aquí y ahora, ya, sin otras complicaciones...

La primavera tiene esas propiedades también, la de sacar el seco y austero lenguaje invernal y reemplazarlo por “lenguaje florido”, del minimalismo al barroco sin escalas. Para muchos también es la estación del amor, por cuanto, a diferencia de las “pededes”, también aquí estallan y florecen los cuerpos que estuvieron retenidos y ocultos por el frío...

En fin, ya vieron que la mano viene complicada con este toco: en vez de salir uno mismo a retozar por la pradera, a recoger flores, me he detenido en este otoñal estado, viendo la perenne sucesión de caducas hojas, su renovación, su infatigable búsqueda del ciclo que las empuja hacia adelante, a completarse, a ser y a morir, una y otra vez.

En este caso -las hermanas se llevan seis años de diferencia-, el sonoro pedede de Chiara remitió como si se tratara de un exacto ciclo al perenke de Valentina y así estamos ahora, disfrutando del empuje de las rosas, del desmayado aroma de las madreselvas, de la irrupción violenta y fugaz de las azaleas, del reinado efímero de los jazmines, de la asonada de las fresias. Porque, claro, también dicen que la primavera es la estación de la poesía -y las otras tres, lo siento, son prosaicas- y porque mi hija pequeña vio hojas pededes donde antes su hermana había visto hojas perenkes y porque todo nace, todo crece, todo reverdece de modo pedede, perenke, perenne...