San Jerónimo Norte y su apuesta al medio ambiente

En los últimos meses, la comuna avanzó en las obras de modernización en la planta de tratamientos de residuos, lo que le permitió obtener valor agregado donde otros ven un problema. También se comenzó con el reciclado de vidrio, cartón y plástico.

José Zenclussen

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Conscientes de los graves problemas que provocan los basurales a cielo abierto a la tierra, agua, aire, animales y a las personas, la comuna de San Jerónimo Norte priorizó este año la optimización y modernización de su planta de tratamiento de residuos. Desgastada por el uso de casi dos décadas, los equipos y la estructura fueron restaurados para mejorar la eficiencia en el trabajo de selección y terminación del producto.

Raúl Jullier, presidente comunal de la localidad, manifestó que en agosto María Laura Vogt -ex alumna de la Escuela Educación Técnica Nº 696-, Técnica Procesadora de Industrias de Alimentos presentó un proyecto sobre las mejoras que se podían llevar adelante en la planta de tratamientos de residuos, donde con la basura se obtiene el compos. “El proyecto establecía una serie de mejoras en la parte edilicia como en el sector de producción. Con su incorporación, establecimos un seguimiento diario y un mayor control del PH”.

Jullier agregó que la profesional no sólo se encarga de las tareas de control, sino también de la capacitación del personal.

“En estos momentos, estamos reacondicionando las instalaciones para mejorar la calidad de trabajo de los empleados y modernizar los equipos de la planta. Se cambió la instalación eléctrica, los pisos que estaban destruidos por el ácido de la basura, se compraron mesas nuevas de acero inoxidable, cinta transportadora y el molinillo de molienda”, expresó el titular de la comuna local.

En tanto, dentro del proyecto está contemplada la construcción de un galpón para guardar los residuos inorgánicos. “De esta forma, vamos a evitar la quema de basura a cielo abierto. Tenemos conocimiento de las nuevas normativas que comenzarán a regir en los próximos meses y es por ello que queremos adecuarnos cuanto antes. Además, con estos cambios, buscamos que se procese todo orgánico e inorgánico incorporando la selección de residuos inorgánicos como papeles, cartón, nylon, envases plásticos, latas y vidrios”, destacó Jullier.

A futuro

Por su parte, Vogt remarcó que también se está trabajando en la recuperación y reciclaje de pilas. “Sobre este tema estamos hablando con una empresa radicada en San Lorenzo, donde se van a depositar finalmente las pilas. Es una erogación muy importante, pero evitamos el problema de la contaminación”.

En este aspecto, se realizó una campaña junto con el Club de Leones para mejorar el medio ambiente.

“En un futuro tenemos pensado empezar a trabajar en el tema de biodiésel, esto demuestra nuestro interés y compromiso con este sector. Hoy la planta cuenta con cuatro empleados, pero ante la posibilidad de hacer horario corrido y el crecimiento de la cantidad de basura que genera el pueblo, estamos estudiando la posibilidad de ampliar el plantel”, manifestó Jullier.

En este sentido, a través de fondos del Programa Municipal de Inversiones (Promudi), la comuna tiene previsto adquirir un camión con compactador nuevo, para mejorar y ampliar la capacidad de carga.

María Laura Vogt comentó que todas la pilas de residuos están numeradas y controladas para llevar a cabo la molienda y el compost de mejor calidad. Foto: José Vittori

Maquinarias

Jullier expresó que este año, el objetivo principal fue dotar de nuevas maquinarias y herramientas a la repartición comunal.

El presidente comunal agregó que estas incorporaciones se lograron gracias al cumplimiento de los contribuyentes. “Se compraron dos tractores con recursos propios y del plan de obras menores y adquisición de maquinarias y rodados con una inversión de 234 mil pesos”. Además, se adquirieron una desmalezadora, un camión con un equipo de riego. “El crecimiento del pueblo requiere más demanda de limpieza y con una barredora no se llegaba, es por ello, que compramos una nueva máquina para mejorar este servicio”, amplió el funcionario.

Mejoras. Las próximas obras que se están evaluando son la remodelación de Plaza Libertad, con nuevas veredas y luminarias. Foto: José Vittori

Recientemente la comuna adquirió dos terrenos para la construcción de 100 viviendas. Uno de ellos ubicado hacia al sur de la playa de estacionamiento de camiones. Foto: José Vittori

Obras. Solamente en 2010 la comuna pavimentó diez cuadras en la localidad. Este año continúan los trabajos en cuadras del sector sureste del pueblo.

Foto: José Vittori

Viviendas

Para paliar un problema que afecta a todo el país, la comuna comenzó con un plan de viviendas en lotes comunales y propios. “Hay cada vez más solicitudes de unidades habitacionales, la gente tiene interés porque es una importante posibilidad de acceder a la vivienda”.

Jullier agregó que recientemente la comuna adquirió dos terrenos para la construcción de 100 viviendas. “Uno de los terrenos está ubicado hacia el sur de la playa de estacionamiento de camiones y al este del club libertad. Tenemos más de 200 inscriptos los que nos muestra el problema habitacional que hoy sufre el país”.

En este sentido, el mandatario expresó que la idea de la comuna es recuperar parte de lo invertido en tierras para continuar haciendo viviendas. “Le llevamos este planteo a la Dirección de Vivienda y Urbanismo, sería importante que esto prospere para poder seguir invirtiendo en nuevos terrenos”, concluyó.

Raúl Jullier, desde 1999 como presidente comunal, expresó su satisfacción por transformar los residuos en productos aptos para la comercialización, favoreciendo la salud y el medioambiente. Foto: José Vittori

Comienzos de la Colonia

Luego de la fundación de Esperanza, muchas familias llegaron en forma ‘espontánea’ a tierras santafesinas. Como en esa Colonia ya estaban otorgadas todas las concesiones, el gobierno de Santa Fe estudió la posibilidad de afincar a esas familias en tierras fiscales. De esta forma, el 1º de agosto de 1857 creó una comisión de Inmigración, cuyo objetivo fue relacionarse con toda familia con ánimo colonizador y procurarle terrenos adecuados para la agricultura.

La comisión estuvo presidida por don Alvaro Alzogaray, acompañado por don Ricardo Foster y Luis Parma; la misma eligió un terreno al Norte de la ciudad de Santa Fe para la ubicación de dichas familias que no resultó apto para la colonización. En ese mismo año Ricardo Foster adquirió del gobierno de la provincia 4 leguas de tierras fiscales, al Oeste de las suyas, con el compromiso y obligación de ceder 50 concesiones de 20 cuadras cada una, para establecer allí colonos.

En octubre de 1857 la Comisión de Inmigración comunicó al gobierno el amojonamiento de las 50 concesiones del terreno de Foster. Las familias suizas que estaban en la ciudad de Santa Fe, no se animaron a trasladarse a ellas por temor al indio y al gaucho matrero, dada la cercanía con la reducción de San Jerónimo del Sauce.

Ante esta situación, Ricardo Foster se puso en contacto con Lorenzo Bodenmann, oriundo de Grengiols, Valais, y le propuso que viajara a Europa para buscar familias que quisieran poblar estas tierras. Bodenmann consiguió reunir 7 familias del Alto Valais con las que se embarcó en mayo de 1858, en el puerto de Génova. Llegaron a Buenos Aires a fines de julio, después de una travesía que duró 3 meses.

Llegados a la misma tomaron conocimiento de los riesgos que podían correr. Después de grandes esfuerzos Foster logró convencer a 5 de aquellas familias Blatter, Falchini, Perrig, Heimo y Hug- que, finalmente, decidieron trasladarse hacia el lugar elegido para su afincamiento. El día 15 de Agosto de 1858 llegaron al lugar conocido en la actualidad como los “Cuatro Montes” unos 4 mil metros al sur del actual emplazamiento.