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Las aventuras de Sónoman

Sónoman es el hombre sonido, dueño del Poder-Músico-Mental, cuyas modificaciones en su estructura molecular le permiten desmaterializarse y convertirse en sonido, o bien concentrarse y sonorizar su energía para emitirla en forma de ultrasonidos. Ligado a este mundo a través del Profesor Zork, Sónoman es la encarnación de un superpoder en lucha contra el mal.

Sónoman es la creación de Oswal (Osvaldo Walter Viola), dibujante de larga trayectoria en el género de la historieta en la Argentina. En 1966, cuando le pidieron un personaje para la revista infantil Anteojito, dio vida a este personaje singular. Su publicación se prolongó por diez años, hasta 1975. Ahora Ediciones De La Flor ha editado una primera recopilación de esas aventuras en Sónoman, el hombre del Poder-Músico-Mental.

Sónoman, cuya fuerza de impacto es comparable a la embestida de tres rinocerontes, puede transformarse en sonido. Cuando Sónoman se sonoriza puede viajar por el interior de una pared, atravesar líquidos o masas gaseosas, o recorrer sitios impenetrables y peligrosos. Cristalinos arpegios son el anuncio de que Sónoman ha llegado, y luego, entre brillantes estallidos musicales, emerge otra vez visible en su forma humana.

Consecuente con esta conformación genética, la historieta abunda en cuadros casi abstractos, durante las transformaciones, desplazamientos y ataques de Sónoman.

En esta edición se pueden leer las historietas: “¡Nos invaden” (tercera aventura de la serie, publicada en 1967 en Anteojito, y retocada en 1983); “Los nuevos poderes” (cuarta de la serie, también de 1967), “Bienvenido a Pelania” (décima aventura vivida por el hombre-sonido, de 1968), el todo introducido por una presentación del personaje que realiza el profesor Zork, realizada originalmente en 1993.

Como expresa el mismo Oswal: “Es ardua la tarea de determinar el principio de las cosas ya que siempre las anteceden misteriosas y silenciosas gestaciones. Sónoman se publicó por primera vez el 15 de diciembre de 1966, pero ¿cuándo comenzó la movilización que llegó a ese resultado? Meses antes me di a la tarea de crearlo pero en realidad eso consistió en reunir los elementos que por años vagaron dispersos en mi imaginación. ¡Fantástica encrucijada de la creación! Luego, su publicación semanal se prolongó por diez años, cortos o largos según se vea, hasta llegar a su fin. Pero aquí también está la duda: ¿en verdad hay un final?”.