Silencio

Mary Barcelo, autora de “Veinte poemas de amor”

(Edición de autor).

¡Silencio! Hay un silencio / agudo en nuestro / encuentro / y una quietud de / rosas en las manos / yo quisiera romper / este silencio y / acariciarte acariciarte / con las manos / y refugiarme en tu / pecho enamorado.// Pero en nuestro encuentro / todo es silencio.// Déjalo así. ¡Ay, no me / digas nada! / tus manos tienen cosas / para darme y son tus / caricias ¡la belleza / el amor! mi sueño / y mi tibieza / y es tu boca la que / tiene presa.// Son tus manos pétalos / de rosas a la vez que / al sol es y mi tibieza / son tus manos / las que me tienen / presa.

Madre de Guadalupe

Carlos Grande.

L.E. 6.300.768.

El martillo rompió tu rostro / y tus manos de verdad sagrada.../ Tu corona se hizo polvo entre los pastos / del infinito dolor que te pegaba.// Tú... Suprema de las Angustias Humanas / que frente a la cruz en silencio entregabas / la pureza de tu Hijo que limpiaba / nuestras culpas mundanas.// Tú... que rogando por pecados y bajezas / a tu Hijo implorabas sin condena /... Cuando el último pedazo de tu yeso / no fue más que polvo entre la tierra.// Ante el dolor crucificado, pediste por nosotros / Hijo, no saben lo que hacen / Déjame que como polvo vuelva / a entrar en los hogares de este pueblo / para decirles de tu amor, de tu esperanza / que el mundo sin Cristo es imposible / que tu perdón a quien me daña alcanza.// Y en blanca tiza se hizo cielo / y está en aquella nube blanca / para regar de maternal amor el alma / de esta Santa Fe sin odios ni venganzas / Señora de la luz Guadalupana.