Esta noche

Programa nacional para un aniversario

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Marcelo Valva, autor y director del “Lunario Santo” (sobre versos de José Pedroni) y Héctor Nardi, quien dirigirá la “Suite para la buena tierra”, de Miguel Ángel Inchausti y Félix Luna. Foto: Amancio Alem

El Coro de la Universidad Católica y el Coro Polifónico Provincial celebrarán sus 25 y 50 años, respectivamente, en el Teatro Municipal, con obras argentinas y entrada libre y gratuita.

 

Ignacio Andrés Amarillo

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Esta noche desde las 21, en el Teatro Municipal (San Martín 2020), se realizará un concierto homenaje celebratorio de las bodas de plata del Coro de la Universidad Católica de Santa Fe (fundado por su director actual, Héctor Ariel Nardi) y las bodas de oro del Coro Polifónico Provincial de Santa Fe (cuyo director fundacional fuera Francisco Maragno).

En la ocasión, el maestro Nardi dirigirá al organismo provincial en la “Suite para la buena tierra”, de Miguel Ángel Inchausti y Félix Luna. A continuación, ambos coros se unirán (junto con la Camerata Eleuthería) bajo la dirección del invitado Marcelo Valva para interpretar el “Lunario Santo”, que el propio Valva compuso sobre versos de José Pedroni. La entrada será libre y gratuita.

El Litoral dialogó con Nardi y Valva para conocer más sobre este encuentro.

—¿Cómo se decidió este programa?

Nardi: —A principios de año, la secretaria del Coro Polifónico (Mónica Salva) me habló y me dijo: “Este año cumplimos aniversario los dos coros; hagamos algo juntos”. Entonces comencé a pensar en hacer este concierto. Como con Marcelo habíamos conversado en alguno de los encuentros de talleres que hacíamos juntos, qué lindo sería hacer de nuevo el “Lunario Santo”. Entonces se me ocurrió hacerlo, y sumarle la “Suite para la buena tierra”, de Inchausti, que la hicimos el año pasado en Córdoba con un coro flamante que creó la Asociación de Directores de Coros, la Orquesta de Córdoba y solistas de allá.

Entonces quedó armado un programa de inspiración nacional: con la obra de Inchausti, creador de Los Arroyeños y otras tantas actividades de este excelente músico (que fue abogado, como Marcelo y yo; que fue catedrático y secretario de Cultura) que murió en 2008.

Poesía clara

—“Lunario Santo” está en “Gracia plena”.

Valva: —Sí, que es el primer libro. Yo me encuentro con Pedroni no a través de los libros, sino a través de las canciones que le había musicalizado César Isella, Damián Sánchez, etc. A Pedroni lo agarran en los ‘60, cuando empieza el género canción en la Argentina. Una vez le pregunté a Sánchez: “¿Cómo se te ocurrió musicalizar a Pedroni?”. Y me dijo: “En esa época del folclore estaba en pleno auge la poesía salteña, llena de imágenes, metáforas bastante complejas, muy lorquianas. Y cuando leí a Pedroni me pareció tan claro, tan simple, tan profundo: esto es lo que yo quiero”. Ahí empezó a hacer “La cuna de tu hijo”, “Mamá Angustia” y otras tantas bellezas.

Entonces tomo “Gracia plena” y encuentro esto que es en formato cantata: nueve números individuales pero que tenían una unidad común. En esa época se habían puesto de moda: estaba “Mujeres argentinas”, la “Cantata sudamericana”, que vinieron tras la “Misa criolla”; “Los caudillos”, esas obras conceptuales.

Nardi: —Oratorios folclóricos.

Valva: —Sí, en realidad fue un fenómeno en todas partes: de la misma época es “Viaje al centro de la Tierra” de Rick Wakeman, “Las siete esposas de Enrique VIII”. Yo recién empezaba en la música, empecé en el 78 ó 79, tenía 19 años. Decía: “Esto no lo voy a poder hacer nunca”. Y después un día encontré una edición rústica en Mar del Plata del “Lunario...” (el libro original de “Gracia plena” lo había perdido), en épocas en que Pedroni estaba en las listas negras y no se lo podía cantar, y salió la música mientras lo iba leyendo, después me la olvidé.

Pero vi que era posible, yo podría hacerlo. Con una premisa: mezclar música popular como la que estaba de moda en esa época, con líneas melódicas muy sencillas, pero con una orquesta atrás, con una idea de obra conceptual.

Como había poemas que no eran métricos, sino que eran casi prosa (como las lunas sexta y tercera), dije “acá pongo un recitador”. Así fueron quedando números para solistas, otras para coro y momentos para el recitador. Todo integrado con un sentido musical con lineas simples: música tonal, algún ritmo folclórico (como en la segunda, que es una zamba, aunque muy estilizada).

Todo eso tratando (siempre fue una obsesión mía) tratando de darle un ropaje sinfónico. En el 81 empecé a escribirla, se la cantamos con un grupo vocal que tenía a la esposa de Pedroni, que vivía en Esperanza: fue muy emotivo.

Después la dejé de hacer porque me metí en una estética un poco más compleja, contemporánea. Y mucho tiempo después me acordé del “Lunario...”, a insistencia de un amigo director. Lo hago en ese momento, a la gente le gustó mucho y quedó archivada, hasta que el año pasado empezamos a hablar con Héctor de hacerla, ya que va a ser estreno en Santa Fe (en el 85 se hizo en Gálvez, en un homenaje a Pedroni).

Orquesta y solistas

—¿Quiénes los van a acompañar?

Nardi: —La Camerata Eleuthería, conjunto joven que dirige normalmente Manuel Marina, integrante del Coro Polifónico y uno de sus continuistas.

—Dirigió la delegación de Santa Fe en Cosquín.

Valva: —Ellos hicieron el arreglo mío de “Mujeres argentinas”, antes lo hicieron acá.

Nardi: —Hay una estrecha relación de los protagonistas. El Coro Polifónico pone la mayoría de los solistas, hay uno solo de la Católica. Ellos son: María Alejandra Pistoni (mezzosoprano), Daniela Coria (mezzosoprano), Danilo Baldo (tenor) Fernando Morello (barítono), Gabriel Galdolfi del Coro de la Católica (tenor), Juan Caliva (guitarra) y Samuel Hillar (recitador). En la “Suite para la buena tierra” también hay solistas del Polifónico: Matías Bustafán tiene un importante rol como pianista; Mario Martínez en charango; Daniel Caronni en quena; Gonzalo Díaz (contratado) en percusión; y debería haber algún otro aerófono, pero serán suplantados por instrumentos de viento de la misma Eleuthería.