Tendencias para brillar

El momento de la recepción culmina una etapa de esfuerzos y dedicación en el estudio, donde los festejos son bien merecidos. Aquí, las principales tendencias de las pasarelas para que las graduadas se inspiren en el diseño de sus vestidos y sean las grandes protagonistas de una noche especial.

TEXTOS. REVISTA NOSOTROS.

vestidos

Las colecciones de alta costura de los grandes diseñadores se caracterizan por presentar vestidos largos, aunque en estos últimos tiempos la tendencia está cambiando.

A la hora de escoger un vestido para la graduación, el corto es tal vez la mejor opción, por denotar más frescura y acentuar el aspecto jovial de quienes lo lucen.

En las pasarelas se pudo apreciar una amplia variedad de modelos y géneros, lo que da muchas opciones para escoger y combinar, según los gustos personales y lo que mejor se adapte a la silueta.

Algo que caracteriza a la mayoría de los diseños es el realce de la figura. Vestidos al cuerpo y otros entallados con más amplitud y movimiento en las faldas, marcando la cintura con cintos finitos que contrastan con el color de la tela.

A los escotes clásicos como palabra de honor, corazón o espejo, se suman los asimétricos que dejan un hombro descubierto o los grandes escotes en la espalda que aportan más sofisticación y seducción.

Este año se apuesta a un revival de la moda de las grandes divas, volviendo a las décadas de los ‘50 y ‘60. Vestidos tipo Jackie, o inspirados en el vestuario de grandes íconos de la moda como Grace Kelly o Audrey Hepburn.

También se presentan las manguitas cortas tipo japonesas, con apliques de encaje o volados.

Como ya lo sabemos, en la moda todo vuelve, se transforma y se reinventa.

TEXTURAS Y PRINTS

La gasa, etérea y traslúcida, es uno de los principales géneros utilizados: drapeada, en capas asimétricas, aplicada en volados, bordada.

El guipure, con su versatilidad, se impone con fuerza, dando un toque tanto romántico como sexy.

Los pailettes y bordados en lentejuelas y pedrería siempre encuentran su espacio, y si se utilizan con criterio pueden adaptarse a la edad de las graduadas.

Los estampados o prints le suman a la tela una presencia especial. Florales, tropicales, batik, a rayas o animal print, son una buena opción para desestructurar un modelo clásico y hacerlo más juvenil.

Se usa la combinación y superposición de estampas, pero hay que ser cuidadosos a la hora de su elección y aplicación sobre el modelo elegido, para no recargar, quitarle clase o convertirlo en un atuendo demasiado informal para la ocasión.

UNA AMPLIA PALETA

El color nude y el blanco son parte de la gama más elegante.

El blanco es un básico que no claudica jamás. Para una recepción, un vestido corto en este color puede reemplazar al clásico y siempre vigente little black dress, constituyendo una prenda que nos cansaremos de usar en incontables oportunidades, más allá del fin específico para el que haya sido confeccionado.

Igualmente, las jóvenes y adolescentes suelen animarse a más, eligiendo colores más fuertes como protagonistas de su look, que marquen su presencia y las diferencien del resto de las agasajadas.

Los tonos confite (amarillo claro, celeste, rosa, verde claro) se vieron en muchas colecciones.

Las combinaciones ganadoras de esta temporada son el naranja y el fucsia, con alto impacto, y el azul con el verde, para un aspecto lleno de frescura que remite al mar.

Colores vivos como el azul francia, coral y verde lima aparecen con fuerza y toda su vitalidad.

El rojo es otro clásico que siempre encontrará cabida en fiestas de gala.

El amarillo representa toda la energía y luminosidad del sol, un color con mucha personalidad para las que se atrevan a destacarse.

Las jóvenes suelen animarse a más, eligiendo colores más fuertes que marquen su presencia y las diferencien del resto de las agasajadas.