Esta mañana

Maradona despidió a su mamá

Télam

Síntomas de dolor y recogimiento quedaron en evidencia hoy en el traslado de los restos de “Doña Tota”, la madre de Diego Maradona, desde una casa velatoria de la ciudad de Buenos Aires hacia un cementerio privado de la zona de Bella Vista.

Minutos antes de las 9 partió el cortejo fúnebre. Los restos de Dalma Salvadora Franco (81 años) fueron conducidos desde el velatorio ubicado en la calle Tres Arroyos al 1500, en el límite entre Caballito Norte y La Paternal, hasta el denominado Cementerio Privado Jardín Bella Vista.

Maradona, quien arribó al país anoche en vuelo procedente de Dubai, permaneció prácticamente “encerrado” en la casa velatoria Tres Arroyos, durante las horas que pasó en la ciudad. De acuerdo con lo revelado por allegados a su entorno, el astro “no se despegó ni un minuto” del féretro con los restos de su madre, quien falleció el sábado último por la tarde, en la clínica Los Arcos, a causa de un cuadro de infección generalizada, provocado por insuficiencias renales y cardíacas.

Diego (vestido con un saco de color negro, corbata al tono, camisa blanca, anteojos oscuros) estuvo acompañado por su actual mujer, Verónica Ojeda. Pero también se observó muy diligente y activa a su ex esposa, Claudia Villafañe. Además del ex técnico del seleccionado argentino también estuvieron para darle el último adiós a su madre los ex jugadores Raúl y Hugo Maradona.

Las dos hijas del astro también se acercaron para despedir a su abuela. Pero una de ellas, Dalma, la mayor, no tuvo reparos en cuestionar el comportamiento de parte de la prensa en la cobertura y dijo a través de su cuenta de la red social Twitter: “Me gustaría que el periodismo guarde respeto para mi papá en un momento tan especial”.

Los restos de “Doña Tota” arribaron al cementerio privado de la zona de Bella Vista minutos antes de las 10. Con dos motociclistas de la Policía de la provincia de Buenos Aires actuando como cabezas, el cortejo fúnebre, integrado por no menos de 20 vehículos, atravesó rápidamente la puerta-tranquera del lugar, para evitar un eventual asedio de la prensa. En la intimidad se ofreció un servicio religioso para la familia y allegados.

Previamente, a la sala velatoria, se habían acercado muchos representantes del ámbito futbolero para entregarle el correspondiente pésame a Diego, entre ellos Palermo, Guillermo Barros Schelotto, Matías Almeyda y el tenista Juan Martín Del Potro.