Por iniciativa del embajador Alfredo Morelli

Proponen a los recuperadores de basura para premio internacional

El trabajo de Dignidad y Vida Sana en el nuevo relleno sanitario fue conocido por una nota de El Litoral. Hubo una reunión con funcionarios locales para proyectar la producción de energías alternativas.

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Visita. El embajador y un representante de Enarsa, sentados en primera fila, conocieron la nueva planta. Foto: Mauricio Garín

De la Redacción de El Litoral

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Gracias a una nota de El Litoral, el embajador Alfredo Morelli conoció el trabajo de la asociación Dignidad y Vida Sana. Esta institución reúne a 110 familias que viven de la venta del papel, cartones, vidrios y plásticos, que recuperan de la basura en la planta de residuos. “Me pareció un proyecto muy interesante. Por eso pensé en postularlo para un premio que se da todos los años, en el Foro Económico Mundial, cercano a los dos millones de dólares. Me gustaría que tengan un reconocimiento internacional para que les sea más fácil hacer su trabajo”, explicó Morelli, director de temas Energéticos y Tecnológicos del Ministerio de Relaciones Exteriores de la Nación.

La presidente de la asociación, Josefina Moralez, se mostró satisfecha con la visita y respecto a la posibilidad de participar del premio internacional, dijo: “Aunque no lleguemos a ganar, lo importante es que nuestro trabajo va a ser conocido”. En este sentido comentó que están pensando en armar una página web para darle más difusión a la institución.

La semana pasada, Morelli estuvo en Santa Fe y se reunió con funcionarios municipales, provinciales y nacionales, representantes de la UNL y UTN, la fundación Epyca, Dignidad y Vida Sana, Red Escuela Productiva y el ingeniero Gustavo Seisdedos de Enarsa.

Mercedes Gagneten, de la fundación Epyca -que hace cinco años trabaja junto a Dignidad y Vida Sana-, rescató que este encuentro “posibilitó la visibilización de Dignidad y Vida Sana a nivel internacional; la articulación entre el municipio, la provincia, las universidades y las organizaciones; el compromiso de la UNL y UTN para formular los proyectos (Ver dato); y la posibilidad que brindó la Embajada de obtener recursos económicos para estos proyectos”.

Luego de la reunión, realizaron una recorrida por la planta nueva, donde alumnos de la UNL dieron una clase pública.

Energías alternativas

El ingeniero Seisdedos, a cargo de Energías Renovables de Enarsa, participó de la visita a la ciudad. “El embajador Morelli vio la posibilidad de producir energía a través de los residuos y me convocó para dar una mano con nuevas tecnologías, accesos a créditos, tendencias y ver qué se puede mejorar”, detalló, al tiempo que expresó su beneplácito por el trabajo que se está realizando en la nueva planta de residuos. “Quedé impactado y tengo una gran felicidad por todo lo realizado a nivel institucional y como grupo local”.

Además de obtener biogás de los residuos orgánicos, el representante de Enarsa aseguró que en la planta podría concretarse una experiencia novedosa en la Argentina, a partir del tratamiento de algunos plásticos. “Estamos promoviendo el desarrollo de una planta piloto para cracking térmico (sin catalizadores) de ciertos plásticos abundantes en los residuos municipales. El producto obtenido es una especie de petróleo sintético. A través de un fraccionamiento adecuado, se pueden obtener diversos hidrocarburos sintéticos para su comercialización”, detalló. La materia prima de este proceso está compuesta por plásticos “no clorados”, que son reducidos a escamas e ingresados al reactor. “Luego del proceso térmico se obtiene un líquido amarillo, que se fracciona en diferentes compuestos comercializables. Son tecnologías nóveles, que no hay en la Argentina, pero que tienen muy buena perspectiva”, señaló Seisdedos.

 

A futuro

Éstos son algunos de los proyectos planteados para los cuales el embajador se comprometió a conseguir recursos económicos: capacitación productiva, fabricación de cestos de basura, compostaje, huerta, fabricación de biodigestores, captación de biogás para uso semindustrial, reducción del consumo de energía, aprovechamiento solar, uso del plástico con valor agregado.