Los vecinos lo querían linchar

Atropelló y mató a un niño de tres años

Télam

Un niño de 3 años murió luego de haber sido atropellado en la ciudad bonaerense de Cañuelas por una camioneta cuyo conductor casi es linchado por los vecinos, que lo corrieron hasta una casa donde se refugió, incendiaron un vehículo y atacaron a la policía.

Fuentes policiales aseguraron que el conductor de la camioneta terminó con una fractura en el brazo izquierdo y contusiones en distintas partes del cuerpo, mientras que cinco policías también resultaron heridos y debieron ser atendidos en el hospital local.

El accidente ocurrió cerca de las 21 de anoche, cuando un hombre se movilizaba solo a bordo de una camioneta Chevrolet Silverado por la calle Arono, entre Espinillo y Arrayanes, cuando atropelló a un niño de 3 años que en ese momento jugaba con otros chicos del barrio. El episodio se produjo a media cuadra de la Ruta Nacional 3, a la altura del kilómetro 54, en el barrio San Esteban, delante de otros vecinos que se hallaban en ese momento caminando por la cuadra.

Como consecuencia del impacto, el niño, identificado por la Policía como Juan Naranjo (3), quedó gravemente herido, por lo que los vecinos llamaron a una ambulancia que lo trasladó al hospital local, pero murió antes de que pudiera ser asistido.

Enardecidos

Ante ese panorama, los vecinos se enfurecieron con el conductor de la camioneta, llamado David Jorge Kadobel (55), a quien comenzaron a agredir a golpes.

El hombre salió corriendo y se refugió en una casa ubicada a unos 100 metros del lugar del accidente y a pocas cuadras de la vivienda en la que vivía el chico fallecido.

Los vecinos, al descubrir su escondite, comenzaron a reunirse frente a esa casa y arrojaron piedras y elementos contundentes, lo que motivó la intervención de la policía que debió efectuar disparos al aire con postas de goma y tuvo que llevarse con una fuerte custodia al conductor de la camioneta.

El hombre fue trasladado herido al hospital local, dijeron las fuentes. Luego, unos 150 vecinos se manifestaron en la Ruta 3 y cortaron el tránsito incendiando cubiertas.

Durante la protesta, los vecinos volcaron la camioneta que provocó el accidente y prendieron fuego otra camioneta perteneciente a la Guardia Urbana de la Municipalidad local, tras lo cual protagonizaron serios incidentes con la Policía. Fuentes policiales aseguraron que, como consecuencia de los incidentes, cinco efectivos resultaron con heridas de distinta consideración y debieron ser asistidos en el hospital local.

Los investigadores aseguraron que, por el hecho, el conductor de la camioneta quedó alojado en la comisaría local a la espera de ser indagado por la Justicia.