Dicen los que saben. Jóvenes profesionales aconsejan

El combustible para una máquina de alto rendimiento

Para dar lo mejor de sí, un deportista de alto rendimiento o uno amateur, para no desgastar la preciosa máquina que es su organismo, debe darle los cuidados necesarios y la alimentación específica pertinente. Agustina Tolosa Müller, licenciada en Nutrición, nos cuenta cómo lograr una adecuada alimentación para deportistas profesionales o amateurs.

Agustina Tolosa Müller

Lic. en Nutrición (Mat. Prov.876)

Una alimentación saludable es indispensable para mejorar y/o mantener el estado de salud, evitando diversas enfermedades y para lograr enfrentar las múltiples actividades de la vida moderna. Sin embargo, es especialmente importante para deportistas profesionales y de elite, como también para quienes desarrollan alguna actividad física de forma amateur o como pasatiempo. La alimentación saludable permite optimizar el rendimiento deportivo, al disminuir la fatiga muscular, acelerar la recuperación entre cada sesión de entrenamiento o competencia, disminuir la incidencia de lesiones o favorecer su recuperación, mejorar la composición corporal reduciendo la masa grasa y aumentando la masa muscular, entre otras. Los atletas mal alimentados son incapaces de desarrollar por completo su potencial deportivo, independientemente de la genética, preparación física y del grado de entrenamiento.

Los deportistas profesionales deben seguir un plan de alimentación adecuado a sus características personales como edad, sexo, peso, talla, composición corporal, al tipo de deporte que realicen y a la duración, frecuencia e intensidad del entrenamiento. Se debe controlar la calidad y cantidad de los alimentos que se ingieren, con el fin de que el aporte de energía y nutrientes (hidratos de carbono, proteínas, grasas, vitaminas, minerales y agua) compense el desgaste físico propio del deporte. Cuando los atletas no logran cubrir sus demandas nutricionales pueden presentar disminución del peso corporal, pérdida de masa muscular, fatiga crónica, incapacidad para adaptarse al programa de entrenamiento y bajo rendimiento en las competencias.

Lograr un alto rendimiento deportivo sólo es posible mediante una correcta planificación de la ingesta de alimentos y líquidos antes, durante y después del ejercicio físico.

Una correcta hidratación antes, durante y después de la competencia, es de vital importancia para lograr un alto rendimiento deportivo, ya que los líquidos regulan la temperatura corporal, evitan el desarrollo de problemas médicos y reestablecen las pérdidas por sudoración, respiración y orina. Es recomendable consumir agua, jugos de frutas diluidos adicionados con azúcar y sodio, bebidas deportivas u otros productos comerciales de rehidratación (sales, geles). Los deportistas deben comenzar a ingerir líquidos antes de percibir la sensación de sed, ya que ésta aparece posteriormente a las necesidades reales.

Es importante destacar que “Un deportista mal alimentado y deshidratado parte en desventaja respecto de otro con un estado nutricional óptimo”.