Postergación, sólo para los más afectados por los cortes
La EPE no sube las tarifas a quienes sufrieron apagones
Como en 2010, además del resarcimiento automático previsto por la EPE, el gobernador Antonio Bonfatti decidió posponer el aumento a quienes sufrieron tres apagones de tres o más horas.
Compensación económica para los que peor la pasaron. El 4 de enero hubo protestas de los comerciantes locales que perdieron su mercadería.
Foto: Mauricio Garín
De la Redacción de El Litoral
El gobierno santafesino decidió “de manera excepcional” postergar el aumento de tarifas de la Empresa Provincial de la Energía a quienes soportaron lo peor de la crisis del servicio en lo que va del verano.
Se trata de una medida que alcanza sólo a quienes durante tres oportunidades sufrieron cortes de más de tres horas, tal como describe la resolución Nº133/10 de la EPE que creó el Régimen de Bonificación por Energía no Abastecida, un sistema que de manera automática se aplica ante los apagones que sean atribuibles a la responsabilidad de la compañía, no de factores externos (como los de carácter meteorológico o la falta de energía eléctrica en el nivel mayorista).
Un parte de prensa oficial dice que la EPE pospone el aumento tarifario para clientes que “tuvieron cortes prolongados del servicio”.
Agrega que el Directorio de la Empresa Provincial de Energía resolvió postergar por 30 días la aplicación de la actualización tarifaria prevista para los consumos de diciembre, “para aquellos clientes que sufrieron en ese mes y en el corriente 3 o más cortes, durante más de 3 horas cada uno, y para quienes hayan sufrido uno mayor a las 8 horas de duración”.
“La decisión asumida pretende contemplar la situación de estos clientes durante las últimas jornadas de condiciones climáticas extremas”, dice el gobierno santafesino.
Sostiene que “el criterio adoptado para identificar los clientes alcanzados para este beneficio es el mismo que rige en el Régimen de Bonificación por Energía no Abastecida, previsto en la Resolución Nº133, de abril de 2010. Abarca a clientes bimestrales entre los cuales se encuentran: residenciales, comercios y otros”.
Por lo tanto, “quienes estén contemplados por la situación prevista en dicha normativa recibirán en las próximas facturas la Bonificación por Energía no Abastecida; y, por única vez, también les será descontado el incremento tarifario vigente”.
La aplicación del beneficio “es automática y no es necesario que el cliente lo tramite, puesto que la EPE detecta los casos correspondientes a través de su sistema de registros de interrupciones del servicio”.
La decisión del gobierno provincial fue asumida por el titular del Poder Ejecutivo, en una reunión, en Rosario, con autoridades de la EPE y funcionarios provinciales.
Entre otros participaron de ese encuentro el ministro de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente, Antonio Ciancio; el secretario de Servicios Públicos, Alejandro Boggiano, y el presidente del Directorio de la Empresa Provincial de la Energía, Daniel Cantalejo.
Resolución
La diputada Silvia De Cesaris, presidenta del bloque Producción y Trabajo, exigió que el Poder Ejecutivo cumpla con la resolución 133-1011 de 2010 de la EPE que aprueba una Bonificación por Energía no Abastecida. Dicha bonificación es automática y debe ser aplicada, ya que la empresa es la responsable de los cortes del suministro.
Recordó que la resolución fue una decisión del ministro de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente, Antonio Ciancio, y lleva la firma del titular de la EPE, Daniel Cantalejo.
“Los clientes que hayan padecido la situación descripta no deben realizar ningún trámite; la bonificación les debe llegar en la factura siguiente y es automática”, aclaró la legisladora.
/// EL DATO
¿A cuántos se compensa?
La duda no tiene -por ahora- una respuesta: no se sabe cuántos son los clientes de la Empresa Provincial de la Energía que, por haber sufrido tres cortes de tres o más horas cada uno, recibirán una compensación en su próxima factura. Al cierre de esta edición, no existía oficialmente la información solicitada por El Litoral, respecto de dos números que son clave para medir el impacto de la medida que ayer tomó la compañía estatal, a las 17 horas, en la ciudad de Rosario, y muy al calor del estado de ánimo de aquella urbe.
Cabe suponer que esas cifras o una estimación muy cercana es conocida por la conducción de la EPE, ya que todos los días se cuenta con información detallada del funcionamiento de las instalaciones de media tensión que alimentan la red de baja tensión, o domiciliaria.
/// análisis
Los límites de la red
Luis Rodrigo
La EPE tiene un método para saber cuántas horas, en un período determinado, un usuario no ha contado con energía eléctrica. Consiste en revisar el funcionamiento de sus equipos (las líneas, los transformadores y los centros de distribución) en media tensión, es decir, aquellas instalaciones que alimentan las redes de baja tensión (tal como llega, a los domicilios, la energía).
A diario hay un informe con esas cifras. El dato es conocido porque ha servido para construir mapas respecto de los kilovatios consumidos y los efectivamente facturados, para detectar enganchados.
La forma de saber cuánto ha sufrido los cortes cada cliente es segura respecto de los “falsos positivos”. En otras palabras, si alguien está en esa lista es porque sin dudas careció de luz eléctrica tres veces en el bimestre, durante tres o más horas en cada oportunidad.
Pero el método no contempla todas las situaciones, tiene límites. Los mismos que, en baja tensión muestra la red. En síntesis, puede haber usuarios que hayan pasado tres apagones de tres horas o más que no figuren en los registros de la EPE, si en los tres casos las fallas ocurrieron en las instalaciones de baja tensión (sobre los últimos cables antes del medidor).
Aunque la empresa no lo diga es muy probable que al abastecer a 935.000 clientes en toda la provincia de Santa Fe, esas situaciones injustas ocurran. Las sufrirán aquellos que con frecuencia durante diciembre dijeron “qué raro, somos los únicos que no tienen luz en el barrio”.
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