Balance de 60 días de gestión

“Endeudar la provincia para pagar sueldos sería el peor error que podría cometer”

El gobernador, Antonio Bonfatti, dice que en los primeros 60 días de gestión lo más inesperado fue la caída de la recaudación. Ratificó que en los temas importantes sólo avanzará si hay consenso.

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Bonfatti descartó que vaya a declarar la emergencia de la seguridad pública en algunos distritos. “¿En qué cambia eso?”, interrogó. Foto: Luis Cetraro

 

Gabriel Rossini

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Pasados sesenta días de haber asumido el cargo, el gobernador de la provincia, Antonio Bonfatti, dice que la provincia está en marcha, defiende su idea de actualizar los impuestos, siempre por consenso, y le manda un mensaje a quienes lo critican: “Falta mucho para las próximas elecciones...”

— ¿Que balance hace de los dos primeros meses de gestión?

— Que el gobierno está en marcha. Indudablemente hay una continuidad con la gestión anterior, no somos ajenos en la administración del Estado. Lo inesperado fue la recaudación de los meses de diciembre y enero. Veníamos con un crecimiento sostenido y hubo una caída de la coparticipación nacional. En todos los distritos fue igual, como consecuencia del cierre de importaciones y la no liquidación del IVA de importaciones, lo que esperamos ir recuperando en los próximos meses.

— Hay dos o tres temas que provocaron las quejas de la gente, como los cortes de energía eléctrica y la inseguridad. ¿Qué análisis hace puntualmente de estos dos temas?

— Respecto al tema de la EPE, a esto lo hemos aprendido con los técnicos, la empresa tiene un aspecto que es la transformación de la energía y otro que tiene que ver con la media y baja tensión. Los cuatro primeros años hemos abordado las inversiones en transformación, incrementamos los parques en más de un 60 %. En el tema de media tensión hay cables subterráneos en Santa Fe y Rosario -alrededor de 2.000 kilómetros- de casi 80 años de antigüedad. Y esto requiere para cambiarlos no solamente dinero sino tiempo.

El tema de la seguridad lo estamos abordando con mucho éxito en Santa Fe -al menos hasta ahora-, y en Rosario hemos tenido complicaciones en tres o cuatro barrios, donde hemos puesto el acento incrementado las patrullas, el personal, estamos interactuando con el Poder Judicial. Y amerita una convocatoria los primeros días de marzo con todos los integrantes de la sociedad, para que cada cual asuma su responsabilidad. La nuestra es la Policía, el Poder Judicial tendrá la suya, las organizaciones de la sociedad civil la suya. Todos tenemos algo que ver con el tema, que tiene que ver con valores, contención de la juventud.

— En Rosario le están pidiendo que declare la emergencia de la seguridad pública.

— ¿En qué cambia eso? O mejor: ¿vamos a cambiar la realidad con una declaración de emergencia? No tiene ningún sentido. Si me dijera que declarando la emergencia tendríamos más herramientas, que me indiquen cuáles son las más que tendríamos... Es política.

— Un tema del que se habla todos los días es el de las finanzas de la provincia. Usted ha dicho que va a mandar una actualización de los impuestos inmobiliario urbano y rural. También se habla de una reforma con equidad. Concretamente: ¿en qué está pensando cuando habla de reforma tributaria?

— Indudablemente hay una gran regresión en el sistema que aún no hemos podido modificar. Creo que la calidad de los impuestos en el país -y por correlato en Santa Fe- es totalmente injusta desde hace muchísimas décadas, producto de que el que más tiene menos paga en forma proporcional. Desde hace 8 años la provincia viene perdiendo autonomía fiscal, porque sus ingresos vienen decreciendo relativamente. Por eso la administración de Binner envió una reforma tributaria en tres oportunidades; porque se veía que cada día teníamos menor autonomía. Entonces, cuando la Nación estornuda, como en diciembre y enero, a nosotros nos agarra una neumonía, porque estamos tan dependientes que corremos riesgos. Por eso tuvimos que posponer uno o dos días con respecto al quinto día hábil del pago de los salarios.

— Da la sensación de que nadie va a discutir demasiado una actualización del inmobiliario urbano y rural -más allá de alguna situación puntual. Sí el tema de ingresos brutos porque además de fiscal, tiene el trasfondo de una discusión ideológica. ¿Usted lo ve así? ¿Va a insistir en una reforma tributaria similar a la de Binner?

—Vamos a insistir en una actualización de recursos de la provincia donde tengamos consenso previo.

— ¿Ha tenido críticas del justicialismo respecto al déficit de la provincia?

— Si en 8 años no hay modificación de tributos e ingresos de la provincia y en el mismo lapso de tiempo se han incrementado para bien de los trabajadores el ingreso por salarios, el precio del combustible, de los medicamentos, de todos los insumos, en algún momento tiene un cuello de botella. Y esto es lo que está ocurriendo. Pero a esto lo venimos advirtiendo desde hace años.

— ¿Considera un error el eslogan de Obeid de “Sin aumentar ningún impuesto”?

— No tengo la menor duda, porque no existe Estado sin impuestos. Entonces cuando los ingresos padecen un atraso, actualizarlos de golpe significan un rechazo. Pero no hay sociedad en el mundo que pueda satisfacer sus necesidades sin impuestos.

— El otro objetivo explicitado en su mensaje de asunción fue la reforma de la Constitución. ¿Hubo avances en este tema?

— Hemos charlado informalmente. Creo que éste es el año en el que podemos dialogar sobre la necesidad de reformar la Constitución de la provincia; no por vieja, sino porque 50 años atrás muchas de las cosas que hoy existen, como nuevos derechos o instituciones, no podían ser previstas.

— ¿Qué le dice la gente en la calle? ¿Qué reclamos le hacen y qué cosas le elogian?

— Veo a la gente entusiasmada. Valora la presencia de los funcionarios. Haber estado dos veces en el norte por la sequía, tratando de ayudar a paliar la situación fue valorado. Poder tener un diálogo con las instituciones, escucharnos. Me parece que es necesario. Porque en épocas de vacas gordas los problemas son más fáciles de resolver, pero en épocas de vacas flacas tenemos que encontrarnos, con más razón, para resolver los problemas, posponiendo las cosas que no son prioritarias. Y siempre de cara a la gente.

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— ¿Cómo califica su relación con la oposición?

— Muy buena. A todos los legisladores que han pedido audiencia, que no son pocos, los hemos recibido en la Casa de Gobierno . Con nadie he tenido un problemas hasta ahora y espero no tenerlo porque jerarquizo poder decir las cosas pero de frente, cara a cara y tratando siempre de resolver los problemas. Además, falta bastante para las próximas elecciones...

— Sciara no descartó endeudar a la provincia para pagar sueldos.

— Para pagar sueldos no. Sí para obras públicas. Lo primero sería el peor error que podría cometer cualquier gobierno. Si se endeuda para pagar sueldos, pierde totalmente su capacidad de poder administrar.

Relación con el gobierno nacional

El gobernador se reunió la semana que pasó con el vicepresidente Amado Boudou y el jefe de Gabinete, Juan Manuel Abal Medina, encuentro que, según explicó, estaba programado con el primero desde hacía tiempo y al que se sumó el segundo.

“Charlamos temas generales, de coyuntura, sobre la crisis internacional y la macroeconomía. Después conversamos sobre los puertos de Rosario y Santa Fe, donde ambas jurisdicciones (Nación y Provincia) tenemos la necesidad de licitaciones y de obras. Hablamos de cómo podemos organizarnos para avanzar coordinadamente”, informó.

“Después hablamos de un crédito del Banco Mundial por 54 millones de dólares para el acueducto cañero, proyecto que ya presentamos y en principio estaría aprobado por el Ministerio de Economía de la Nación, que tiene por objetivo quintuplicar la producción bajo riego artificial para poder impulsar la producción de biocombustibles; otro crédito también del Banco Mundial por 30 millones

de dólares para los denominados Contratos de Recuperación y Mantenimiento (Crema) de rutas provinciales, mallas 5, 6 y 7 (cada una abarca segmentos de diversas rutas); así como otro de 5 millones del BID para refacción y reconstrucción de muchos municipios y comunas que tienen sus edificios deteriorados”, explicó.

“Finalmente -continuó- hablamos de la situación de la Caja de Jubilaciones, donde acordamos sentarnos para conciliar los números -según los nuestros nos deben 1.262 millones de pesos al 31 de diciembre- y, a sugerencia del vicepresidente que conocía nuestras propuestas y nos pidió que lo compartiéramos con el ministro jefe de Gabinete- le expusimos nuestras propuestas y programas por el tema hábitat”.

— Siempre habló de obras. Nunca de algún otro tipo de asistencia.

— Siempre de obras...También se habló de la capacidad de endeudamiento que tiene la provincia habida cuenta de que Santa Fe no tiene créditos externos. Al no tener deuda, la provincia es pasible de recibir obras de magnitud y a largo plazo.

Emblemas

—Todos los gobernadores tienen dos o tres obras emblemáticas por realizar... ¿pensó en las suyas?

—Hay que terminar grandes obras de infraestructura como los cuatro acueductos en marcha, los hospitales de alta complejidad, el Cemafe, las licitaciones de los puertos, que hacen a la producción y a la inclusión social, hay escuelas y rutas en marcha, pequeñas y medianas obras en distintos lugares del territorio, que tienen que ver con plantas de ósmosis inversa, canales pluviales, los edificios de los tribunales de justicia...

Municipios y comunas

Sobre su relación con los municipios y comunas -que en los últimos tiempos han incrementado sus reclamos por asistencia financiera-, el gobernador dijo que éstos “padecen la misma realidad que nosotros. La Nación tiene un déficit fiscal de 35 mil millones de pesos. Eso permea a las provincias y desde allí a los municipios y comunas. Hablamos del déficit de la provincia, pero podríamos hablar del déficit de la Nación y de los municipios y comunas. Además de lo que va a impactar el aumento de salarios, que es necesario para que no pierdan poder adquisitivo los trabajadores. No tenemos que aprovechar esta circunstancia para ver cómo hacemos mella en el otro. Tenemos que afrontar estas realidades sea quien sea el que gobierne”.