EN LA MORENO

Volar, el arte de Subcielo

Anoche el grupo presentó “El vuelo de Da Vinci” en el acto inaugural de La Moreno, sala de la emblemática Biblioteca Popular de Barrio Candioti. Allí vuelve a presentarse desde hoy y hasta el lunes, de la mano de Carolina Arias Heer, Federico Braj, Pablo Cuello y Joca Vergo.

Florencia Arri

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“Volar está en el mundo onírico de los seres humanos; la intención de volar, de despegar los pies del piso”. En el azul de sus ojos, las palabras de Pablo Cuello cobraron un brillo particular. Su afán de ganar el aire nació hace cuatro años, cuando “por curiosidad” participó de un casting del grupo Puja! con el que inició una nueva etapa en su vida: el teatro de altura, que lo redefinió “de actor a performer aéreo”. Desde esta óptica, Cuello volvió a Santa Fe para presentar Subcielo, el grupo que formó en España junto al coreógrafo brasileño Joca Vergo y otra santafesina, Carolina Arias Heer.

El desafío fue doble: anoche el grupo tuvo a su cargo la puesta con que se reinauguró La Moreno (Marcial Candioti 3341), la sala de la emblemática Biblioteca Popular de Barrio Candioti. Allí se mantiene en escena, en versión de sala, hasta el lunes. Titulada “El vuelo de Da Vinci”, puede verse desde las 22 desde esta noche hasta el domingo, y el lunes a las 20, donde promete sorprender no sobre las tablas sino en el aire.

La obra de danza aérea es una creación colectiva de Subcielo. En el portuñol que nace en labios de Joca Vergo, “es una puesta de teatro aéreo con coreografías, y todo lo que está coreografiado tiene influencia de la danza contemporánea. Nosotros venimos desde lo corporal hacia lo teatral y la obra se fue moviendo en esa dirección”. El fruto es un desafío escénico que atraviesa diferentes expresiones e integra experiencias en una puesta aérea con dirección artística y coreográfica de Joca Vergo y dirección general de Pablo Cuello, y asesoría escénica de Edgardo Dib. “El vuelo de Da Vinci” se completa con asistencia técnica de Federico Braj -quien tiene a su cargo la responsabilidad de elevar a los actores, en el sentido más literal del término- y la magia que recrean la voz en vivo de Cintia Bertolino y música de Franco Bongioanni.

Dejar el suelo

En escena, “El vuelo de Da Vinci” rescata la figura del artista como un apasionado por el fenómeno del vuelo. Da Vinci produjo investigaciones detalladas del vuelo de los pájaros que aplicó al desarrollo de prototipos y máquinas voladoras y desarrolló una serie de inventos para volar, desde alas hasta rodamientos. “Nosotros nos inspiramos en él como un personaje que, a la luz de la inspiración, desarrolla máquinas para volar: los dispositivos que utilizamos en escena, desde la tela al aro”, contó Cuello.

El espectáculo se estrenó hace meses en el Centro Cultural Las Cigarreras de Alicante, España, donde Subcielo trabaja como grupo residente. Allí lo presentaron con grandes grúas “en formato de calle, que también llevamos a dos festivales en Bilbao. Presentarla en Santa Fe fue todo un desafío porque requirió desarrollar esta puesta de sala -contó Joca-. Ahora estamos enamorados de la sala, porque sus dimensiones permiten crear otros momentos. La obra se vuelve más intensa, más compacta, tiene más fuerza y genera más asombro”.

De asombro, de límites y de sueños. De eso nutrieron “El vuelo de Da Vinci” quienes le dieron forma. La puesta “está asociada a la libertad desde el bailarín, que siempre trata de ser leve, siempre trata de ser más liviano y despegarse del piso”, expresó Pablo. Como performers, quienes integran Subcielo proponen “despegar los pies del piso y ser mucho más pájaros. Esto le da una dimensión especial al espectáculo y lo carga de una magia particular que no tiene edad -agregó el santafesino-. El arte aéreo nos conectó con un público que no elegimos y que resultó natural: los niños. Ellos tienen ese mundo mágico muchísimo más permeable, más a flor de piel para creerlo. Creen que realmente el actor está volando. No piensan cómo se colgó, si tiene un arnés o de qué modo deja el suelo; directamente lo cree”.

En la puesta “nos inspiramos en Da Vinci como un personaje que, a la luz de la inspiración, desarrolla máquinas para volar: los dispositivos que utilizamos en escena, desde la tela al aro”, contó Cuello. Foto: Gentileza producción

Reabrió “La Moreno”

Con la presencia del intendente José Corral, el secretario de Industrias Culturales del Ministerio de Innovación y Cultura de la provincia, Pedro Cantini, junto a otras autoridades, los responsables del proyecto (Francisco Priano y Javier Nogueras) y el actor Mauricio Dayub como visitante ilustre, se realizó anoche el corte de cintas que dejó inaugurada “La Moreno”, tal como reza el cartel que se eleva sobre su ingreso.

En la previa se realizó un espectáculo que sumó actores en altura, con la voz de Cintia Bertolino y un grupo integrado por los músicos de jazz Pedro Casís, Gonzalo Díaz, Sebastián López y Gonzalo Carmelé.

Tras la apertura, los presentes fueron invitados por el presentador del acto, Osvaldo “Coni” Cherep, a ingresar a conocer la sala, donde la Banda Sinfónica Ciudad de Santa Fe brindó un breve concierto dedicado a la música de películas y musicales, bajo la batuta del maestro Juan Domingo Rodríguez.

Numerosas personalidades de la cultura recorrieron las instalaciones y disfrutaron de los lisos que se ofrecían a los visitantes: Luis “Yiyo” Novara (secretario de Cultura de la UNL), Antonio Germano, Julio Beltzer, Carlos Falco, Conrado “Pipo” Licheri, Nilda Godoy, Ángel “Cacho” Hussein, entre otros, llenaron la calle y las butacas de este nuevo emprendimiento.