Media sanción, por unanimidad
Senadores autoriza a Bonfatti
a emitir letras por 556 millones
Se agregaron 100 millones para beneficiar a municipios y comunas. Y fue ampliado el plazo para la cancelación de las deudas. Diagnósticos diferentes para un mismo mal: el déficit.
Luis Rodrigo
Con diferencias de fondo en la argumentación, pero completas coincidencias en el texto sancionado, la Cámara de Senadores logró ayer la aprobación del proyecto de ley que autoriza al gobernador Antonio Bonfatti a emitir letras como medio de financiación, para el corto plazo y atender gastos corrientes.
La sesión de ayer mostró que política y medicina pueden parecerse: no pocas veces médicos de diferentes especialidades (y formación) proponen respuestas diametralmente diferentes a un mismo problema de salud.
Es común que ante un mal, los pacientes y sus familias queden expuestos a dudar entre seguir los consejos de los médicos cirujanos en favor de ir derecho al quirófano o seguir los tratamientos de fármacos y cambio de hábitos que prefieren los médicos clínicos.
En política también hay diferentes diagnósticos para un mismo problema.
Oficialistas y opositores coincidieron en la administración del remedio, pero polemizaron respecto de la gravedad de la enfermedad, y sobre todo del tratamiento adoptado.
Medicina e ideología
Mientras el peronismo pide el bisturí para el crecimiento del gasto del Estado, el Frente Progresista considera que las cuentas del Estado santafesino sólo requieren una dieta liviana. Endeudar a Santa Fe alarma a unos pero no desvela a otros.
Para los peronistas el problema no está en los recursos, sino en el gasto, y para los radicales y socialistas se trata apenas de una coyuntura de desfinanciación pasajera, que se supera con una medida común a la que toman -desde hace años- otros Estados provinciales.
A la hora de dar el parte médico, el PJ estuvo unido. Eligió términos de sentida gravedad, capaces de ser entendidos por cualquiera; mientras que desde el Frente Progresista, Cívico y Social prefirió un lenguaje mucho menos dramático.
Al debate de la Cámara de Senadores se lo puede leer como el producto de los roles que la ciudadanía ha dado a unos y otros. Pero más allá de los actos reflejo del oficialismo y de la oposición, hay un sustrato ideológico que también marca las posiciones.
Fue Alberto Crosetti (PJ-Belgrano) quien con más claridad y sinceridad habló sobre cuán caro fue para los 24 años del peronismo que gobernó Santa Fe con Reutemann y Obeid, la lucha contra el déficit fiscal. Tan caro que esa conducta de rigidez fiscal habilitó el discurso opositor sobre la “deuda social” que -subraya Crossetti-, tras cuatro años, no se ha saldado.
El justicialista no dudó en hablar de “una catástrofe” para el Estado santafesino: el gobierno de Hermes Binner.
Tratamiento
El justicialismo dejó en manos del médico de cabecera, el gobierno, la elección del tratamiento. No habrá cirugía sino una dieta pasajera, sin un cambio tan drástico de hábitos.
Para Hugo Marcucci (FPCyS-La Capital) la medida que ayer contó con media sanción debe interpretarse como una simple herramienta de financiación, que está lejos de constituir endeudamiento público. Recordó que el tema pudo formar parte de la Ley de Presupuesto y comentó que la deuda no se podrá extender más allá de noviembre de 2012.
Dijo que el financiamiento transitorio es bastante menor que el que toman por estos días otras provincias, como Córdoba (830 millones) y Buenos Aires (3.000 millones).
Marcucci elogió tanto la predisposición del PJ a facilitar que el oficialismo pueda dar al déficit el remedio elegido por la administración de Bonfatti. Y recordó que durante tres de los cuatro años de Hermes Binner se adoptó la medida que ahora agregó el PJ: que la provincia se haga cargo de lo que deberían aportar las administraciones de los pueblos y las ciudades santafesinas a la Ley de Financiamiento Educativo. (Este año se estima en 170 millones la suma de esos recursos).
Cirugía I
José Baucero (PJ-San Javier) dijo que el peronismo “apoya lo que pide el gobierno y presta su aprobación, pero nos queda un gran signo de interrogación”, por el remedio adoptado.
Pidió que se agreguen más medidas para contener el gasto del Estado y sostuvo que la provincia vive “una muy buena situación en cuanto al diálogo y la búsqueda del consenso” entre los partidos del gobierno y de la oposición.
Adelantó que el bloque que preside (que cuenta con 5 bancas del justicialismo) también está dispuesto “a debatir sobre la reforma tributaria o el aumento de impuestos” que remita el Ejecutivo a la Legislatura.
De la misma bancada, Alcides Calvo (PJ-Castellanos) sostuvo que el problema no está en la cantidad de recursos disponibles (exactamente a lo que apunta el gobierno) sino en el elevado y creciente nivel del gasto. Recordó que del tema se alertó al gobierno cuando se trató cada una de las leyes de Presupuesto. Aseguró que el gobierno tendrá problemas para pagar salarios si no adopta medidas más duras.
El senador del sector que responde al diputado nacional Omar Perotti condicionó la discusión de una reforma fiscal a que el gobierno “sincere las cuentas públicas”. El presidente de la Comisión de Presupuesto alertó: “El déficit de hoy es el doble del que tuvo 2011”.
Cirugía II
Rubén Pirola (PJ-Las Colonias) mostró algunos números. Recordó que el Presupuesto 2012 iba a ser superavitario, en 50 millones, pero terminó por revelarse deficitario en cuestión de días y la Legislatura debió autorizar una ampliación de partidas para cubrir el rojo.
El presidente de la Comisión de Economía dijo que los recursos que envía el gobierno central crecieron desde 2011 en un 32%. Como Calvo expresó: no es un problema de recursos. Pero fue más allá: “Más que de gasto es un problema de eficiencia: no se advierte que haya mejorado la seguridad, la salud y la educación”, reflexionó el senador del Frente para la Victoria (que preside Armando Traferri).
Habló de un “coctel explosivo”. Sostuvo que el gasto creció 23% y que la inversión en obras públicas (la cuenta de capital) bajó el 37%.
Dieta
Miguel Lifschitz (FPCyS-Rosario) esperó que se hablaran los justicialistas de sendos bloques y aseguró: “Hay que llevar tranquilidad a los señores senadores: el futuro de Santa Fe está en buenas manos”.
“No hay crisis en Santa Fe, como no hay crisis en la Argentina”, definió.
Tras elogiar la decisión del justicialismo de acompañar la aprobación de la ley de letras, agregó sobre las críticas del peronismo: “Están dramatizando por una medida de trámite”.
El socialista expresó que simplemente se trata de “una ayuda financiera para acomodar mejor las cargas” a lo largo del año. Subrayó que el aumento del gasto corriente tiene directa relación con la recuperación de los salarios de los empleados públicos, los docentes, los policías y otros trabajadores del Estado. Advirtió que gastar en el funcionamiento del Estado, en educación y seguridad “no es un gasto superfluo”.
“Todas las cifras que aquí se citaron son muy manejables”, respondió el ex intendente de Rosario.
