Un club que merece una mayor consideración de los gobernantes...

Unión presente, el Estado ausente

Deportes amateurs, escuelas en sus distintos niveles, espectáculos de todo tipo, albergues para evacuados y cesión de sus instalaciones para la enseñanza de la educación física, entre otros aportes desinteresados a la sociedad, hacen que hoy, los sucesivos gobiernos estén en deuda con Unión.

Gastón Dubois

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Alguna vez, en tiempos de mi niñez, tuve la oportunidad de aprender en la vieja cancha de básquet que había en Unión la práctica del “ejercicio físico”. Práctica que, por suerte, no fue sólo mía. Todos mis compañeros de grado de la escuela Nº 9 J.J. Paso pudimos desarrollar en las instalaciones de Unión el aprendizaje de dicha actividad. También tuvimos la oportunidad de “mezclarnos” con chicos de otras escuelas (como ser la Beleno) y a partir de allí establecer lazos de amistad con algunos de ellos que me acompañan desde entonces.

Y es aquí donde le agradezco a Unión el simple (y complejo a la vez) hecho de haberme “socializado”. Sé, de muy buena fuente, que hasta el día de hoy varias escuelas siguen realizando la práctica de la (ahora) Educación Física, lo cual me lleva a reflexionar acerca de la función y compromiso social de Unión para con su comunidad.

¿Quién puede olvidarse de los famosos bailes y/o recitales y/o también espectáculos de toda clase que se hacían y se hacen hasta el día de hoy en Unión? Los bailes de carnaval, los recitales de figuras convocantes, las ferias o muestras de los artesanos, etc. nos dan una pequeña muestra del compromiso para con la cultura que tiene la institución. Compromiso que no es sólo con un aspecto de la sociedad, porque también Unión hizo una fuerte apuesta a la educación. ¿Acaso el Ipei no es un fuerte vínculo del club con la comunidad? Los tres niveles educativos están presentes en su escuela y forman parte ya del aprendizaje de los santafesinos.

Compromiso

Sin entrar en una polémica futbolera, es mi obligación decir que además Unión cedió, en momentos de crisis (provocados por la inundación), a la ciudad y a la provincia, las instalaciones del gimnasio cubierto Ángel Malvicino, para armar un centro de evacuados (tal vez el de mayor número de aquel entonces) para todos los santafesinos que así lo necesitaron. Y sin distinción de camisetas. No hubo jamás indicios de “sacarle el cuerpo” por parte de Unión a las necesidades de los santafesinos.

Tampoco faltó compromiso por parte de sus dirigentes, para poner a disposición inmediatamente todos sus recursos necesarios para algún fin que sea en beneficio de los que más lo necesitan. La Fundación Mateo Esquivo hoy es un gran ejemplo de lo que escribo, pero podría seguir enumerando y seguramente no me alcanzarían las páginas para contar la cantidad de situaciones en las cuales el club rojiblanco contiene en algún sentido a la sociedad.

Hoy, Unión reclama una ampliación y remodelación del estadio 15 de Abril. Desde el gobierno provincial hicieron oídos sordos al pedido de ayuda para la readecuación del estadio, según las necesidades del momento. Entiendo que nuestra provincia y nuestros gobernantes tengan otras prioridades, pero al menos deberían acompañar esta ilusión tatengue con una presencia más activa. Con mayor compromiso. Con alguna obra concreta. Que le devuelvan algo de lo mucho que Unión le dio a esta sociedad. Porque nunca sabemos cuándo la sociedad volverá a necesitar de Unión, pero de lo que sí estamos seguros es de que Unión, como siempre, va a volver a “ponerle el cuerpo” a la ciudad.

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