APERTURA DEL AÑO LEGISLATIVO

Militantes opositores recibieron con

insultos a Bonfatti y a su gabinete

Pertenecen a 100 % Santafesino, la Corriente Clasista y Combativa, e Inundados Nunca Más. Como es costumbre en los mandatarios socialistas, el gobernador llegó y se fue caminando a Casa de Gobierno.

Mario Cáffaro

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Desde el 1º de mayo de 2008, el gobernador de la provincia llega a la Legislatura caminando con su gabinete desde la Casa de Gobierno. Antonio Bonfatti repitió la costumbre puesta en práctica por su antecesor, Hermes Binner, y junto a su esposa y su equipo recorrió los 500 metros que separan a los edificios de ambos poderes para pronunciar el mensaje de apertura del año legislativo.

En esta ocasión, lo recibieron con insultos y silbidos tres sectores movilizados con ese propósito. Los primeros en llegar fueron del partido 100 % Santafesino que orienta el diputado nacional Oscar Martínez. “No al impuestazo, no al pacto” decían las pancartas y otras representaban un billete con la cara del gobernador y la frase “letras de cancelaciones de la fiesta socialista y senadores justicialistas”. Ya durante el fin de semana en la zona aledaña a la Legislatura fueron colocados carteles y banderas contra la reforma de impuestos.

Minutos antes de la llegada de Bonfatti, y portando largas banderas y con mucha presencia de chicos, la Corriente Clasista y Combativa dijo presente en la plaza, acompañado de agrupaciones de afectados por la inundación de 2003 identificados con carteles. El grupo estaba desde temprano en la plaza 25 de Mayo, y para tener mayor presencia mediática optó por acercarse a la Legislatura donde además levantaron una carpa y varias mujeres se dispusieron a preparar un locro. Las banderas reclamaban “vivienda digna para todos” y “alimentos para los chicos”.

Bonfatti y su gabinete llegaron acompañados por unos pocos jóvenes con banderas identificatorias del partido Pares que tiene como referentes a los diputados Antonio Riestra (nacional) y Verónica Benas (provincia). No se vieron banderas socialistas ni radicales, los socios principales del Frente Progresista. En el camino estuvieron los insultos que se unificaban entre los tres sectores y sólo separados de los funcionarios de un pequeño cordón policial.

Ya en la explanada, los jefes de bloque del Senado esperaron a Bonfatti y lo acompañaron al recinto de la Cámara de Diputados para reanudar la Asamblea Legislativa constituida para escuchar el mensaje del gobernador.

Poco a poco se apagó el color

En el recinto de Diputados y a diferencia de otros años, varias sillas quedaron vacías por invitados que no estuvieron en el acto. En las barras, asesores y funcionarios de segunda línea del gabinete provincial y en la pantalla instalada en el recinto del Senado, algunos periodistas y asesores se dieron cita para seguir el discurso de 75 minutos.

Con Bonfatti ya en el edificio, los simpatizantes de 100% Santafesino se retiraron y dejaron la plaza de la Legislatura únicamente para la Corriente Clasista y Combativa y los menores utilizaron parte de la playa de estacionamiento para armar un picado de fútbol sólo interrumpido cuando uno de ellos fue atropellado en avenida General López, cuando quiso buscar la pelota que cruzaba la calle. Una ambulancia debió trasladarlo hasta el Hospital de Niños y cuando se fue el vehículo, se reanudó el juego.

El gobernador se retiró en forma inmediata de la Legislatura tras los saludos de rigor, mientras los legisladores oficialistas ponderaban el mensaje y los opositores lo cuestionaban en lo que es ya un clásico de todos los 1º de mayo. Cuando dejó la plaza, quedaban apenas una docena de militantes y las cocineras apuraban el fuego para dar el toque final al locro.

Hermes Binner fue uno de los últimos en retirarse acompañado por legisladores y dirigentes socialistas y pasó -indiferente- ante la olla de la CCC. Faltaban minutos para las 13. En la vereda de 4 de Enero, el diputado Omar Perotti prolongaba una larga conversación con su ex compañero de fórmula, Carlos Bermúdez, y en el despacho del presidente de la Cámara de Diputados, Luis Rubeo, se iniciaba una reunión con jefes de bloques de diputados y senadores justicialistas para repasar los temas de agenda de la semana legislativa. Empezó el período ordinario, el primero con dos Cámaras justicialistas y un Ejecutivo socialista.

Militantes opositores recibieron con  insultos a Bonfatti y a su gabinete

Los manifestantes de tres corrientes se concentraron con pancartas y panfletos alegóricos. Foto: Luis Cetraro

Un discurso guiado por preguntas retóricas

L.R

El gobernador Antonio Bonfatti ordenó su discurso, que consumió más de una hora y cuarto, sobre tres ejes. Los mismos que anunció al asumir su cargo, el 11 de diciembre de 2011: “Territorio integrado, Calidad social y Economía para el desarrollo”.

Así, unas preguntas retóricas, del tipo “¿Cómo estamos avanzando hacia un Territorio integrado?” o “¿Cómo estamos construyendo Calidad social?”, guiaron las respuestas que -en algunos casos- también parecieron retóricas, porque abundaron las acciones de gobierno precedidas por expresiones que admiten que “continuamos con”, “sostenemos una política respecto de” o “seguimos con el cambio para...”.

No hubo grandes anuncios. O mejor, no había recursos como para que aparecieran grandes anuncios. Existió el compromiso de no perder las iniciativas en marcha, que servirán para “profundizar el cambio”, tal el norte de la actual gestión.

En rigor, para la ciudad de Santa Fe y su zona de influencia no hubo poco, si se compara con el resto de la provincia.

El gobernador confirmó que es una política de Estado el traslado del Puerto a aguas profundas, la transformación de la Ruta Provincial Nº 1 y también la creación de “un acuerdo público-privado para abordar definitivamente el Parque Comercial y Logístico del Área Metropolitana de Santa Fe, que concentrará en un único espacio las instalaciones, servicios y funciones que requieren las actividades del comercio mayorista, junto a servicios de transporte y logística”.

Superar las consignas

Bonfatti procuró que los tres ejes de su mensaje no fueran simples consignas. En unos casos, lo logró al citar iniciativas que pondrá en marcha o buscará poder llevar adelante, y en otros mostró como logros de gestión a tareas que desde hace años lleva adelante el Estado.

Un ejemplo es lo que Bonfatti espera poder hacer para que “los parques y áreas industriales ocupen en nuestra provincia un lugar central”. En este sentido, “estamos gestionando ante el Banco de la Nación Argentina un crédito por 150 millones de pesos a los efectos de constituir un fondo rotatorio que financie sus necesidades, facilitando la radicación de empresas en el territorio provincial”.

La abundancia de gerundios en lugar de verbos que anuncien que algo finalmente “se hará” habla de los límites, de las dificultades y de los recursos económicos escasos.

Con la misma vara, puede medirse otro anuncio que -en cambio- sí tiene más posibilidades de concretarse: “Nos proponemos -dijo el mandatario provincial- llegar con abastecimiento de agua a aquellas poblaciones no asistidas por Assa. Así como en los cuatro años pasados logramos que el 92 % de las 347 localidades que no están servidas por la empresa cuenten con cobertura en el servicio de agua, en este período alcanzaremos una cobertura del 100 % en dichas localidades”. El avance del plan para construir 4 acueductos ya comenzó con las primeras etapas, está en ejecución y hay altas chances de obtener un préstamo del Fondo Kuwaití, para ejecutar la segunda etapa del Acueducto Noreste 2.

Inseguridad

El capítulo referido a la inseguridad, una de las demandas sociales más fuertes, fue breve pero contó con un dato fuerte: el gobernador habló de que enfrenta un problema que requiere “más esfuerzos”. En especial, citó el caso del narcotráfico como causante de “inseguridad, violencia y desintegración social”.

“Todas las jurisdicciones y los poderes del Estado debemos aunar esfuerzos para combatirlo, no sólo en lo policial, sino también con relación a los negocios que se generan a partir del narcotráfico. Desde el gobierno provincial, enfrentaremos este flagelo con toda la decisión política, y poniendo a disposición los recursos técnicos, humanos y económicos que sean necesarios”, dijo Bonfatti.

Convocó a los legisladores y “a todos los sectores de nuestra provincia (a los poderes judiciales provincial y federal, a las fuerzas de seguridad, a los gobiernos locales, y a las organizaciones e instituciones de la sociedad civil) a trabajar para aunar esfuerzos por la seguridad y contra todas las formas de violencia”.

“Las bases de este acuerdo están siendo establecidas por medio de iniciativas como el Consejo Provincial de Seguridad, el trabajo conjunto de la provincia con los municipios de Rosario y Santa Fe, y el establecimiento de sinergias con la Nación, con cuyos representantes en materia de seguridad y justicia nos hemos reunido recientemente”, destacó.