Otros mitos escolares

Enrique José Milani

En nota anterior nos hemos referido a prácticas erróneas que tienen lugar en la enseñanza-aprendizaje de la lengua oral y escrita. Hablábamos de mitos, es decir, creencias erradas, en lo que atañe a nuestro tema, respecto de convenciones a la hora de emplear palabras y signos en la expresión lingüística. Hacíamos hincapié en que debe decirse “letra de imprenta”; en que tanto las mayúsculas en letra cursiva como las de imprenta también llevan tilde, si correspondiere. Asimismo aclaramos que “letra manuscrita”, es decir, escrita a mano, no se opone a “ cursiva ni de imprenta”; que los nombres de los días de la semana y meses se escriben comúnmente con minúscula, excepto en fechas memorables; que cuando se cortan palabras al final de renglón, se coloca guión menor en medio del renglón (y no se repite al comenzar el siguiente); y que el vocativo va siempre entre comas.

A continuación seguiremos señalando mitos áulicos:

1.No corresponde colocarles puntos a las íes y jotas mayúsculas, tanto cursivas como de imprenta: Israel, Jesús, Junio, Julio, etc.

2. Cuando al final del renglón deba cortarse una palabra, se recomienda no partir sílabas o grupos consonánticos, ni dejar vocales solas ni al final ni al comienzo de renglón. No debe hacerse: o-céano, a-teo, e-rror, úre-a, etére-o.

3. En la escritura, la “x” acompaña siempre a la vocal siguiente: e-xa-lum-no, he-xa-sí-la-ba, e-xa-ge-rar. En caso que se encontrara con una consonante, entonces forma sílaba con la vocal precedente: ex-tem-po-rá-ne-o, ex-ce-len-te, ex-tra-ño.

4. Si se tratare de “cc”, se reparte una para cada sílaba: ac-ción, direc-ción, contrac-ción.

5. En las voces con “h” intermedia , ésta no debe quedar al final de línea, sino pasar a la siguiente: des-hora, in-hábil, des-honesto, des-huesar, ex-hibir, ex-hausto.

6. La vibrante múltiple “rr” no puede separarse, por lo tanto acompaña a la vocal siguiente: ca-rreta, co-rrea, aco-rralar, ga-rrote.

7. Al cortar una palabra al final del renglón, cada sílaba conserva las consonantes que le corresponden: trans-por-tar, ex-po-ner-se, cual-quie-ra, e-xa-brup-to (dicho o ademán inconveniente e inesperado; en cambio la frase “ex abrupto”: de repente, de improviso: Molestó mucho su exabrupto. Y ex abrupto, comenzó a insultar a los presentes).

8. A propósito del prefijo “ex-” y según la flamante edición de “Ortografía básica de la lengua española”, debe unirse a la base léxica si afecta a una sola palabra: exprofesor, exmarido, exministro, exconvicto, pero se empleará separado si afecta a una frase o compuesto léxico: ex vicepresidente de la Nación, ex fiscal general, ex editorial Abril, ex Hospital Universitario Central.

Quedan aún más mitos por esclarecer, a los que nos dedicaremos próximamente.