Barrio Candioti

Muerte natural

Redacción de El Litoral

Ayer a la tarde, una profesora de educación física fue encontrada muerta, con una herida en la cabeza, en su casa de calle Necochea al 3000.

El macabro hallazgo corrió por cuenta de una amiga que alarmada por la falta de respuesta a sus llamados telefónicos abrió la puerta con la ayuda de una vecina de barrio Candioti.

El cuerpo sin vida de Bettina Pampinela (48) yacía en una de las dependencias, de bruces y en medio de un charco de sangre. El aviso a la Seccional 3a. fue inmediato.

Los agentes llegaron al lugar seguidos por personal de Homicidios y peritos de la policía científica. Pero el diagnóstico preliminar desmintió lo que el cuadro sugería.

La mujer yacía muerta en medio de un charco de sangre por una herida que había sufrido en la cabeza al caer pesadamente víctima de un accidente cerebro vascular.

Pampinela quien debía presentarse a trabajar en un establecimiento educativo de nuestro medio había pedido a su amiga que la llamara por teléfono porque temía no despertarse a tiempo.

Al referido diagnóstico se agrega que ni en el cuerpo de la víctima ni en la escena los peritos encontraron signos de violencia y todo en la casa de calle Necochea estaba en orden. Cabe agregar que todas las puertas estaban cerradas por dentro.

De modo que la muerte que en un primer momento se presentó como un posible caso de homicidio devino en accidente cerebral, según el primer diagnóstico trazado por el médico policial.