Corresponsalía Esperanza

De la redacción de El Litoral

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El guardafauna Juan Martín Mastropaolo denunció que el operativo de control de plagas concretado en el Balneario Municipal de Esperanza se realizó con productos fosforados de alta peligrosidad.

A estas declaraciones, se sumó un grupo de 40 vecinos que se movilizó al balneario para reclamar por lo realizado que, para ellos, resulta de gran riesgo para la comunidad.

Al acercarse al lugar, los vecinos se encontraron con un portón con custodia policial y con la presencia de referentes de la Dirección Municipal de Tránsito. También estaba Darío Vogt, representante de Saneamiento Ambiental del Municipio.

El guardafauna Juan Martín Mastropaolo brindó explicaciones sobre “lo peligroso que resulta el método empleado, es decir, el uso de fosforados en un espacio público”.

Para Mastropaolo, “no se trata de un procedimiento selectivo sino que mueren cardenales, calandrias y todo pájaro que hubiera en el lugar”. En tanto, sostuvo que “tiraron un fosforado que está prohibido desde hace 50 años y puede matar a cualquier tipo de animal. Es una cadena de muerte porque los loros moribundos vuelan varios kilómetros y terminan muriendo en el patio de un vecino, se los come un perro y automáticamente se muere el perro, y así sucede con otros animales”, remarcó el guardafauna.

Por su parte, Darío Vogt, en el lugar dialogó con los presentes a quienes les explicó el método empleado y se comprometió a suministrar datos del fosforado utilizado.

Al respecto, Vogt defendió el operativo, acción que no convenció a los manifestantes que seguirán con su reclamo ante las autoridades provinciales.

Información oficial

El debate se desató entre algunos vecinos ni bien se informó por medio de un comunicado oficial que “la Municipalidad de Esperanza en cumplimiento de lo dispuesto en la Ley Prov. Nº 12.923/08 del Ministerio de la Producción y siendo objeto de la presente ley la preservación de la producción vegetal a través de la utilización racional de técnicas, métodos, recursos y mecanismos, que propendan a la correcta práctica de protección vegetal preservando la salud humana y los recursos vegetales, el Municipio realizará a partir del día 22 de octubre y hasta el día 27 inclusive tareas de control de cotorras en el predio del Balneario Municipal. Por tal motivo, durante el período mencionado dicho predio permanecerá cerrado para el ingreso al público”.

Paralelamente, otra comunicación precisó que “la Secretaría de Servicios Públicos de la Municipalidad de Esperanza informa que, en virtud de las tareas de control de plagas que se realizan en el predio del Balneario Camping Municipal en cumplimiento de lo dispuesto en la Ley Prov. Nº 12.923/08 del Ministerio de la Producción y que hubieran sido previstos desde el día 22 hasta el sábado 27 de octubre -período durante el cual dicho predio permanecerá cerrado para el ingreso al público-, y que en función además de haberse realizado determinadas obras (por ejemplo, el amuramiento con encofrado de un portón de ingreso) las instalaciones continuarán cerradas para el ingreso al público durante el próximo fin de semana”.

 

Explicación de la provincia

Ante la polémica que se desató a raíz del control de plagas -específicamente de cotorras- en el balneario municipal de Esperanza, desde el Ministerio de la Producción de Santa Fe explicaron que “si bien en la localidad se está utilizando un método letal -como se ha usado en otras ciudades o pueblos-, este Ministerio no proveyó los productos, ni instó o intimó a las autoridades del lugar a realizar dichas acciones”.

Las medidas de control de plagas buscan evitar el daño que estos animales pueden hacer como destruir cultivos de granos, sorgos, maíz, frutales; o transmitir enfermedades, como la psitacosis -enfermedad infecciosa de loros, papagayos, etc., producida por un parásito intracelular obligado del grupo de los clamydiales, transmisible al hombre en el que determina cuadros pulmonares de carácter bronconeumónico-, que pueden ser mortales para lo humanos.

En la provincia rige una ley de control de plagas, la Nº 12.923, que reemplaza a la antigua ley 4.390 que era del año 1930, donde las cotorras están declaradas plagas de la agricultura. El control de las mismas está a cargo de empresas, cuyos integrantes fueron capacitados por la provincia para llevar adelante este trabajo.