/// EL INVITADO

Cambiar la base forrajera

Fernando Canosa

Vice Presidente de AAPA (Asoc. Arg. de Producción Animal)

Estamos en una situación inédita en cuanto a las posibilidades. Llegó el momento soñado, hay un mundo que demanda alimentos en el cual la carne no está exenta, y un país como Argentina que tiene amplísimas posibilidades de ampliar su producción. Lamentablemente hay un conjunto de políticas públicas del 2006 para acá que conspiraron, que provocaron, junto a la sequía, esta pérdida de 10/12 millones de cabezas. Si el marco institucional fuese otro, el país podría seguir los pasos de Brasil y Uruguay, donde la carne fue el motor de crecimiento. Hay mucho por hacer dentro de la producción de carne.

Entre que yo tomo la decisión de empezar el negocio y luego llega mi producto a la góndola, pasan tres años. La previsibilidad y estabilidad es muy importante. Si eso estuviese funcionando medianamente bien, Argentina podría crecer mejorando su tasa de destete, que hoy está alrededor del 72% y podría llegar al 75/80%, y hacer recrías mucho más rápidas y tener más vacas.

La gran palanca del crecimiento es el pasto. En la producción agrícola hubo una gran revolución y en producción de pasto quienes lo hacen realizan esfuerzos. Tenemos genética de gran nivel en forrajeras. Tenemos la posibilidad de reemplazar gran partes de nuestros campos naturales improductivos o de baja producción por pasturas cultivadas de buena producción. El gran quid de la cuestión es cambiar nuestra base forrajera. Ahí está la base.

Estoy pensando más allá de la alfalfa, en inmensas extensiones de zonas semiáridas, campos de monte, naturales o mucho renoval que están con muy baja producción para incorporar pasto llorón o en el norte gatton panic; vamos a los bajos a poner agropiro o grama rodhes Es inmensa la capacidad de crecimiento y ahí es donde podríamos poner el foco. En la medida que haya comida, el resto viene solo. Si seguimos peleando con el faltante o la necesidad estamos mal. Parte de la pérdida del stock de Argentina fue por sequía. Condiciones de sequía e inundación van a convivir con nosotros por siempre y tenemos que estar preparados.

Fuente: Ondas de Campo