Vuelven los recuerdos de la inundación de 2007

San Jerónimo Norte vive su peor momento

La localidad del departamento Las Colonias es una de las más afectadas por el temporal que viene afectando a la zona desde el fin de semana, dejando calles anegadas y campos inundados. Pilar, Humboldt, Las Tunas, San Jerónimo del Sauce y Santa María padecen los mismos problemas.

José Zenclussen

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Gran parte del departamento Las Colonias vuelve a padecer cinco años después la misma catástrofe hídrica que afectara tanto a la zona urbana como rural, dejando pérdidas millonarias. El titular de la comuna, Raúl Jullier, manifestó que la situación es muy preocupante y peor que días anteriores, luego de que en las últimas 24 horas cayeran 130 milímetros. “Estamos muy desanimados por todo lo que está pasando, no dormimos en oda la noche. Buscamos por todos los medios conseguir una nueva bomba para sacar el agua. Ayer nos había prometido desde el gobierno provincial un equipo, pero fue enviada a Rosario tras el temporal”.

Desde la comuna ya tienen preparada una institución de la localidad que funcionaría como centro de evacuados, pero hasta el momento no tuvo que ser utilizado.

Por otra parte Jullier mostró su molestia -que es compartida por vecinos de la localidad- por la falta de respuestas del gobierno provincial ante la terrible situación por la que atraviesa la zona. “El único funcionario que estuvo ayer fue Walter Albornoz de Dirección de Protección Civil. Del resto ni noticias, no apareció ningún ministro, ni siquiera tuvimos un llamado del gobernador para ver cómo estábamos, la situación es muy compleja y amerita otro tipo de tratamientos”.

En este sentido el presidente comunal agregó que preocupa la falta de decisiones y el tiempo que tarda la provincia en dar una respuesta. “Ni siquiera tengo un llamado del Ministro de la producción -Carlos Fascendini-, que es un hombre de la zona para ver si necesitábamos algo, estamos necesitando una mano muy importante. Parecería que acá no pasa nada, las zonas más productivas del departamentos Las Colonias están bajo agua y nadie hace nada. Creen que en dos días sale el sol y se termina todo, pero las pérdidas millonarias que estamos sufriendo, parece que nadie las tiene en cuenta”.

La autovía, un tapón

El presidente comunal de San Jerónimo del Sauce, Daniel Ríos, manifestó su preocupación por las lluvias de las últimas horas que empeoraron la situación de la localidad. La zona de la cañada -oeste del pueblo- está completamente desbordada y se agrava con la llegada de una masa importante de agua que baja desde Pilar y Santa María, provocando que el desborde del agua en ese sector llegara al centro del pueblo.

“En la mañana del miércoles estuvieron funcionarios de Defensa Civil y del comité de Cuenca observando los problemas por los que estamos atravesando, no sólo en la parte rural sino también en el sector urbano. En horas del mediodía con una retroexcavadora comenzamos a desviar por un canal lateral el agua que hoy está ingresando al pueblo”.

Ríos agregó que el gran problema que sufre el pueblo -y gran parte de la zona- se debe a las falta de obras adecuadas y complementarias en el sector de la autovía 19. “La dificultad más grande es la retención de agua que existe en el sector oeste, donde la autovía nos hace de dique de contención. Una masa impresionante de agua tiene que salir por dos puentes, uno de 20 metros y otro de 6, es muy grave. Hay que ser claros en este aspecto, durante la construcción de la autovía no se tuvo la menor previsión de obras complementarias para desviar el agua y hoy funciona como dique de contención”.

Otro de los problemas que afecta a San Jerónimo del Sauce sobre el lado sur de la localidad, es una cuneta de 10 metros de ancho -que debe escurrir el agua que

Los tambos de la zona son los más afectados por el temporal. Las pérdidas ya son comparables con la catástrofe de 2007. Además ya se perdieron gran cantidad de hectáreas de soja, maíz y sorgo. Foto: José Zenclussen

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No pasa. En el sector sur de San Jerónimo del Sauce hay apenas un tubo de 80 centímetros para sacar el agua de una cuneta de 10 metros de ancho. El agua se desborda e ingresa a la localidad.

Foto: Juan Manuel Fernández

Complicaciones

En la localidad de Franck la situación es estable en el ejido urbano, sin calles anegadas. En cambio el sector rural del distrito está muy afectado, donde por estas horas autoridades comunales y productores están trabajando para drenar el agua en el mayor tiempo posible. “Para drenar el agua de la localidad se trabaja con las dos bombas existentes ubicadas en el reservorio las cuales están funcionado correctamente. Debido a la cantidad de agua que se acumula en los campos y a los efectos de prevenir que esa masa de agua ingrese a la localidad, estamos coordinando distintos trabajos que permitan drenar con mayor rapidez el agua que se acumula en la zona rural”, explicó Omar Mierke, titular de la comuna local.

La situación en la localidad de Las Tunas es similar al resto de las poblaciones de la región. El agua ocupaba gran parte de la zona urbana del pueblo, principalmente el sector de la plaza principal, y toda la zona rural provocando enormes problemas a los tambos del distrito. Ayer se colocó una bomba en el ingreso este del pueblo para desagotar la zona más afectada. En tanto en la zona rural de San Wendelino y Pujato Norte la situación es sumamente crítica.

Por su parte en la ciudad de San Carlos Centro, las viviendas de la zona cercana a la Avenida Scalabrini Ortiz fueron las más afectadas por el temporal. Además Bomberos Voluntarios trabajaban ayer con bombas en la intersección de las calles San Luis y Saavedra, para desagotar toda esa zona. En Humboldt y Pilar las complicaciones continuaban luego de las últimas lluvias de la madrugada.

El problema más importante que sufre San Jerónimo del Sauce -y gran parte de la zona- se debe a la falta de obras adecuadas y complementarias en el sector de la autovía 19. Los puentes resultan insuficientes para drenar el agua que llega de cuencas arriba. Foto: Juan Manuel Fernández

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llega desde el cruce de San Jerónimo Norte-, hoy desbordada, que debe pasar por un tuvo de apenas 80 centímetros. “Semejante cantidad de agua no escurre como debería hacerlo, en algunos lugares ni siquiera pasa. Esta es otra de las dificultades que estamos atravesando, lamentablemente esto rebasa y vuelca todo ese agua para el pueblo”.

En este sentido, el funcionario indicó que el martes tuvieron que salir a asistir a familias con bolsas de arena para que el agua no les ingrese a sus viviendas. “Estamos rodeados de agua, hasta que no se normalicen la limpieza y profundización de los canales laterales vamos a tener que convivir mucho tiempo con el problema de que el agua ingrese al pueblo”.

Por último, Ríos expresó que no solo hay preocupación en el sector rural sino también en el área urbana de la localidad donde uno existe el temor que la autovía cause un perjuicio mayor que el que hoy están atravesando. “Deberíamos rever la parte de ingeniería hidráulica. Si hoy con 300 milímetros tenemos semejante problema, no me quiero imaginar lo que vamos a sufrir si llueven 700 milímetros como en 2007”, puntualizó.

Santa María Norte

En diálogo con El Litoral Víctor Amherdt, presidente comunal de Santa María Norte, aseguró que desde el martes todo el distrito se encuentra inundado. “El panorama es muy complicado, los campos están con mucha agua, los caminos son intransitables y los canales y cunetas totalmente desbordados. La zona de tambos está muy complicada, hubo gente que tuvo que llevar las vacas hacia tambos de la zona que se encontraban en mejores condiciones porque en algunas viviendas ya ingresaba el agua. La gente que tuvo que abandonar sus viviendas se autoevacuaron en domicilios de familiares”, explicó. En relación a las pérdidas en el sector productivo sostuvo que la situación es similar a las de 2007, a pesar de que en aquella oportunidad había mucha más agua. “El gran problema es que esto todavía no terminó, las alertas continúan y los pronósticos no son nada alentadores.

El sector lechero es quien más sufre esta problemática, ya estamos viendo una merma en la producción de leche”.