llegan cartas

Pedido de un ciudadano

Jorge Mántaras Cullen.

DNI. 6.214.031, ciudad.

Señores directores:

Como ciudadano común que soy -al igual que la mayoría de las personas en nuestro país- quisiera pedirles a los políticos de la oposición de nuestra patria que nos digan si están de acuerdo en lo siguiente:

¿Quieren un país republicano donde se respete la división de poderes?

¿Quieren que se aplique rigurosamente la ley de coparticipación federal?

¿Quieren un federalismo auténtico, que produzca el crecimiento del interior y consecuentemente terminar con la pobreza de las provincias y la creciente emigración a los cinturones de miseria de las grandes ciudades?

¿Quieren una política de Estado que construya una infraestructura productiva, desarrollando una red ferroviaria y portuaria para nuestras exportaciones, fundamentalmente del interior a los puertos y de allí a los mercados del mundo, en un momento de gran demanda de alimentos, que seguirá creciendo por el ascenso permanente de las clases bajas a clase media en países como China, India, Sudáfrica y Latinoamérica?

¿Quieren una política de Estado que construya e impulse la explotación de nuestras fuentes de energía, cada vez más escasas en nuestro país y cada vez más necesarias para el desarrollo industrial y comercial?

¿Quieren políticas de Estado que desarrollen las formidables posibilidades del turismo internacional, teniendo en cuenta la variedad y cantidad de bellezas naturales que tenemos?

¿Quieren implementar políticas de Estado que terminen de una vez con la inseguridad, con el narcotráfico y con la corrupción?

¿Quieren que la salud y la educación sea también una prioridad dentro de las políticas de estado?

Si están todos de acuerdo con estas preguntas que me atrevo a hacer en nombre de todos los argentinos que queremos lo mejor para la patria -sobre todo para la que vivirán hijos y nietos-; les pido por favor que se olviden de las cosas menos importantes que nos dividen, que dejen los personalismos que tanto daño hacen al país y recuerden que nuestra patria fue alguna vez líder de Sudamérica y figuraba entre las primeras del mundo cuando se formó, no con liderazgos personales, sino a través de una generación, tan recordada, pero lamentablemente poco imitada.