Nunca se vivió lo que pasó ayer en la cancha

Colón no debe jugar contra Colón

  • Ni bien el equipo pisó la cancha fue insultado con cantitos y banderas, bajando una silbatina permanente cuando determinados jugadores tomaban contacto con la pelota. Increíble.
Colón no debe jugar contra Colón

“Decí que está Gigliotti”Con este perfecto cabezazo del 1 a 1 llegó a 21 y con el de penal que marcaría después (2-2) elevó su cuenta a 22 goles con la camiseta de Colón en menos de un año cuando llegó para reemplazar a Fuertes. De los 22 goles que tiene, apenas 3 los hizo desde el punto penal, algo que agranda su mérito. La gente lo adora. Foto: Pablo Aguirre

 

Darío Pignata

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El ejercicio de molestar la memoria de viejos socios sabaleros y algunos colegas de muchos años llegó a la misma conclusión: lo que pasó ayer en Colón no se vivió nunca. En lo particular, tengo algo en claro: los actores directos —dirigentes, jugadores, entrenadores y parte de la gente— debieran preocuparse y ocuparse para que no se vuelva a repetir. Al fin de cuentas a esta historia se llega por la falta de resultados y en definitiva lo que menos importó ayer fue el resultado (2-2) ante Rafaela.

Si Colón, en el corto plazo, sigue jugando contra Colón, a la vuelta de la esquina aparecerán problemas que desde el ‘95 para acá quedaron archivados cuando Gambier acertó el penal contra Labarre. En el fútbol argentino, un club se puede “morir” de distintas maneras: en un solo año como lo hizo Unión o en cuotas como River o —seguramente— Independiente. Por eso, después de lo de ayer uno pide coherencia, grandeza y capacidad de reacción. Porque lo que pasó ayer no puede ser tomado como “una puteada más de cancha”. Lo que pasó ayer entre la gente, el equipo y los dirigentes debe ser anotado como el tema más urgente a resolver de cara a futuro.

De todo lo que vi y escuché en la tarde gris del Cementerio me quedo con tres frases:

* “Reconozco que hemos cometido errores, y trajimos a jugadores que no estuvieron a la altura de la circunstancias”. (Rubén Moncagatta)

* “La gente no me importa, le doy poca importancia”. (Diego Pozo)

* “Puede ser que se necesite algún cambio. Quizás haya jugadores que, incluyéndome a mí, tengamos un ciclo cumplido en Colón”. (Sebastián Prediger)

“Nosotros alentamos pero ustedes nos cagaron” fue el aperitivo de bienvenida cuando las once camisetas pisaron la hierba después de perder el clásico con Unión descendido y sin ganar de local por más de un año. Lo único que anotamos en ese primer tiempo fueron las estrofas remixadas de la Marcha de la Bronca: “El Negro va a salir campeón... el Negro va a salir campeón... el día que se vayan todos... los hijos de p... de la comisión”, el tradicional “Andate Lerche, la p... que te parió”, “Y pongan huevo...” y el amenazante “Me parece que el Negro no quiere ganar, tiene ganas de cobrar”.

Esta vez sí, por primera vez, no hubo divisiones en Colón: cantó la gente en las tribunas, los socios en las plateas y cantó la barra. Entonces, por más que las estadísticas indican en el fixture que Colón en la fecha 17 jugó contra Rafaela, la realidad es que Colón ayer jugó contra Colón. Y esto es algo que no debe volver a pasar.

Lerche no fue a la cancha porque cuando Colón estaba jugando, él estaba volando encabezando la delegación de la Selección Argentina que viajó a Ecuador. Esta bronca viene de antes: lo que en cualquier club sería orgullo —ver a su presidente en los primeros planos del fútbol argentino—, en Colón es una carga. Muchos hubieran preferido que ayer priorizara Colón antes que la Selección y coincido en que la situación lo justificaba ampliamente, porque el domingo pasado no se perdió un partido más. Lo que no entiendo es la postura de aquellos que por un lado piden que Lerche abra el juego y por el otro se golpean el pecho porque no estaba ayer en la cancha: ¿en qué quedamos?

En un fútbol donde todos lloran, Colón fue perjudicado por fallos puntuales en el clásico, lo que terminó con el mejor árbitro y candidato al Mundial de Brasil “parado” desde AFA en esta fecha. A la gente —fieles de un club popular como pocos— le hubiera gustado escuchar al presidente decir a los cuatro vientos lo que le dijo a Grondona por celular: “Delfino nos cagó contra Unión”.

Pedirle a Lerche que vaya contra el sistema es como pedirle a Maradona que no hable. Va contra su propia naturaleza. Si Lerche llegó dónde llegó es por su capacidad para escalar y por los beneficios del sistema. Nadie muerde la mano del amo.

Presidente ausente, vicepresidente admitiendo errores en el manejo del fútbol, jugadores cuestionados por el campeonato del mundo, profesionales admitiendo ciclos terminados, otros profesionales dándole la espalda a la gente y plateístas discutiendo entre sí. Y la gente, insultando (jugadores y dirigentes) y cuestionando (Morant) a todos por igual. El combo, claro está, es letal.

Pasó lo que tenía que pasar después del papelón del clásico. Ya está. Claro que de ahora en más Colón no puede jugar más contra Colón. Hay que preocuparse pero también ocuparse. Los que no tengan ganas de jugar que se vayan. Los que no tengan ganas de cumplir sus funciones en directiva que se vayan. La Pertenencia duerme en un eslogan electoral. Me parece que a varios Colón les quedó demasiado grande. Las elecciones están lejos. Los dirigentes deben provocar un cambio en serio ya mismo. No hay señales de que “lo mejor está por venir”. Si no hay grandeza y humildad, todo lo que vendrá será peor.


síntesis

COLÓN 2

RAFAELA 2

Colón: Diego Pozo; Luis Castillo, Gerardo Alcoba, Maximiliano Pellegrino, Bruno Urribarri; Gabriel Graciani, Sebastián Prediger, Hernán Bernardello, Martín Luque; Lucas Mugni y Emanuel Gigliotti.

DT: Pablo Morant.

Atlético: Guillermo Sara; Cristian Vella, Oscar Carniello, Eduardo Domínguez, Cristian Machin; Sebastián Carrera, Walter Serrano, Matías Fissore, Rodrigo Depetris; Federico González y Diego Vera.

DT: Jorge Burruchaga.

Goles en el segundo tiempo: 5 min Vera (AR), 11 min Gigliotti (C), 26 min González (AR), 39 min Gigliotti (C), de penal.

Cambios en el segundo tiempo: en el inicio Rubén Ramírez por Mugni (C), 21 min Iván Moreno y Fabianesi por Castillo (C) y Juan Eluchans por Depetris (AR), 27 min Marcos Fernández por Prediger (C), 32 min Alexis Niz por González (AR), 41 min Jonathan López por Fissore (AR).

Árbitro: Darío Herrera. Estadio: Colón.

En cifras

17

puntos sobre 33 en juego son los que sumó morant. l El Flaco asumió hace 11 partidos y recogió el 51 por ciento de los puntos. Tuvo buenos pasajes, sobre todo en el arranque cuando logró 13 puntos sobre 15. Entró en altibajos y perdió el clásico. Quiere quedarse y para los dirigentes era una buena opción. También la gente lo había apoyado. En el final se hará un balance pero perdió terreno.

Colón no debe jugar contra Colón

Estaba prohibido perder

Colón pisó la cancha y fue insultado, con silbidos, cantitos y banderas después de perder el clásico con Unión descendido, algo que la gente no le perdonó a este grupo. Esta vez, además, cayeron en la “volteada” los dirigentes y no sólo el presidente Lerche. Tampoco hay demasiada conformidad en la gente para que siga Morant a pesar de sus buenos números en once partidos. Además, Prediger, Pozo y Mugni fueron los más silbados cuando tocaban la pelota. Así, es imposible ganar. Foto: Pablo Aguirre

Se acordaron de Germán

El efecto clásico

Colón no debe jugar contra Colón

A los hinchas y socios sabaleros no les alcanzó la gestión de Lerche con Julio Humberto Grondona para que Germán Delfino, el mejor árbitro del fútbol argentino y firme candidato a dirigir el Mundial de Brasil 2014, termine “parado” en esta fecha por los errores en el clásico. Por eso, colgaron esta bandera en la platea este para que la viera todo el mundo. En la cancha y por tele.

Foto: Pablo Aguirre