La lucha ahora es por el “Pase libre”

Brasil: marcha atrás en aumento de tarifas

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Los manifestantes continuaron con las protestas en las calles de las principales ciudades brasileñas, a pesar de que se anunciaron reducciones en los pasajes de autobús. Foto: Agencia EFE

 

Redacción de El Litoral

Agencias EFE/DPA

Los activistas que promovieron sendas protestas en Sao Paulo y Río de Janeiro lograron su primer triunfo al anunciar las autoridades la suspensión del aumento de las tarifa del transporte público en atención a sus demandas.

Sin embargo, los activistas advirtieron que si bien reconocen una “primera victoria”, no están conformes con la forma en la que será compensado el aumento.

En Sao Paulo, el Movimiento Pase Libre, impulsor de las protestas que dieron inicio a la ola de manifestaciones que se propagó a lo largo y ancho de Brasil, ya anunció que las marchas se mantendrán.

También aclaró que la lucha a partir de ahora será por el “Pase Libre”, es decir, por transporte público gratuito.

“La idea de suprimir el aumento no era para alterar nada, ni para sacar dinero de la salud y la educación. Lo que tiene que haber es una disminución de los lucros de los empresarios del transporte”, dijo un representante del grupo, Paulo Bernardo.

El estudiante se refiere a las explicaciones brindadas por el alcalde de Sao Paulo, Fernando Haddad, y el gobernador, Geraldo Alckmin, cuando anunciaron que el transporte público en la capital paulista volverá a costar tres reales (1,40 dólares) tal como había quedado establecido tras el aumento.

“Vamos a tener que cortar inversiones porque las empresas no tienen cómo asumir los gastos de la suspensión del aumento”, dijo Alckmin, quien destacó que la gobernación paulista le dará “prioridad máxima” a la cuestión del transporte público.

A su turno, Haddad dijo que la población será informada sobre los impactos de la reducción de la tarifa. “Vamos a tener que explicar este gasto para la población de la ciudad”, dijo el alcalde.

Reajustes costosos

Lo mismo ocurre en Río de Janeiro. Según indicó el representante del movimiento carioca, Tadeu Lemos, la reducción de tarifas fue “una victoria”, pero ésta no le pone un punto final a las reivindicaciones populares.

Explicó que el grupo es consciente de que la forma como fueron suspendidos los reajustes resultará sumamente costosa a los cofres públicos de los municipios, y perjudicará inversiones en otras áreas como salud y educación.

Al igual que las autoridades paulistas, el gobernador de Río, Sergio Cabral, y el alcalde carioca Eduardo Paes, ambos del Partido del Movimiento Democrático Brasileño, dijeron que la reducción de la tarifa del transporte público le costará 200 millones de reales al año (cerca de 93,4 millones de dólares) a los cofres públicos.

“Esos 200 millones tendrán que ser costeados por el Poder Público. Costear con esos recursos significa, con las responsabilidades que tenemos, con las restricciones presupuestarias que todos los gobiernos provinciales tenemos, significa, sí, una elección de prioridades. Por tanto, serán obviamente 200 millones menos a ser invertidos en otras áreas en otras áreas de la alcaldía”, dijo el alcalde.

Otras ciudades también anunciaron rebajas en las tarifas de transporte público, entre ellas Niteroi, Porto Alegre, Pernambuco, Recife, Joao Pessoa, Cuiabá, Pelotas, Montes Claros y Foz do Iguazú.

Lo que hay que saber

  • Más de un millón: El movimiento “Tarifa Cero” llevó a millares de personas da la calle en 40 ciudades y 11 capitales de Brasil. Río y Sao Paulo llegaron a convocar las protestas más expresivas, contando con 100.000 y 65.000 manifestantes, respectivamente.
  • Saqueos y represión: En muchas de las manifestaciones se registraron tumultos y actos de vandalismo protagonizados por grupos minoritarios, y en algunos casos hubo represión policial y duros enfrentamientos.
  • El eje del conflicto: Este movimiento social lucha por un transporte público gratis en Brasil. Lleva ocho años luchando por la “tarifa cero” o “pase libre”. Además se quejan de que el Gobierno no invierte en transporte, dejando a la población desasistida. Además hay varios movimientos en Brasil que también se quejan de la falta de inversión en hospitales, colegios y universidades. Sin embargo, el gobierno de Brasil ha invertido miles de millones de reales en estadios de fútbol para el Mundial de 2014 dejando de invertir en lo que realmente el pueblo necesita.
  • La más cara: Brasil tiene la tarifa de transporte público más cara del mundo, pues se necesitan cerca de 13 minutos de trabajo para pagar un billete de autobús.
  • Medio masivo: La mayor parte de la clase media brasileña no sólo toma un autobús o un único metro diario, sino que la media está en más de cuatro viajes al día por persona. Incluso hay personas que se levantan a las tres de la madrugada para poder llegar a las ocho a su trabajo en una ciudad como Sao Paulo.
  • Distribución cuestionada: Además del tema del precio del transporte, los diversos grupos que participan de las protestas critican los gastos que el gobierno está realizando para organizar el Mundial de 2014 y la Copa Confederaciones en desmedro de más recursos para salud, vivienda y educación, se manifiestan contra la corrupción y exigen mejoras en los servicios públicos, entre otras demandas.
  • Sao Paulo y Río de Janeiro, las dos mayores ciudades de Brasil, cedieron a la presión de las mayores protestas en dos décadas y bajaron el precio del transporte público. Sin embargo, para hoy están previstas nuevas movilizaciones.