Comienzan a reparar las defensas

• Se está cerrando la brecha en el terraplén cercano al rulo de la 168 y se rellenan cárcavas en la zona de la toma de agua, en el río Colastiné.

DE LA REDACCIÓN DE EL LITORAL

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Mientras la crecida del Iguazú y el Paraná ya empieza a bajar hacia Santa Fe, en los terraplenes del anillo de defensa de Colastiné, Rincón y La Guardia comenzaron las reparaciones y las tareas de mantenimiento, que se acelerarán la semana que viene, aseguran los funcionarios. En San José de Rincón se reunió la Junta de Protección Civil para analizar las medidas que hay que tomar para mitigar el impacto de la inundación.

Esta mañana, tres máquinas trabajaban en uno de los puntos que más preocupan: la brecha que se hizo en el terraplén cercano al rulo de la 168 y la Ruta 1, para construir una alcantarilla y un canal de desagüe de la nueva autovía de la Ruta 1.

Las motoniveladoras colocaban tierra y compactaban este nuevo tramo del terraplén. También deben elevarlo a la misma altura del anillo de defensa. “Nos preocupa este sector, porque no es lo mismo un terraplén consolidado de 20 años, que una reparación que se acaba de hacer”, advirtió Ricardo Jonas, de la vecinal Colastiné Norte, en diálogo con El Litoral.

En el tramo de la toma de agua y el final de calle Las Casuarinas, los operarios de la Municipalidad de Santa Fe también trabajaban para reparar y compactar el terraplén. En este sector hay un socavón que se está rellenando con tierra-cemento y bolsas de arena. Además, hay cárcavas importantes sobre la barranca de la toma de agua.

En Rincón, el presidente comunal Juan José Berón dijo que ya habló con el gobierno provincial para que se realicen las reparaciones en las defensas y contó que se está planificando la evacuación de unas 20/40 familias que viven fuera del anillo de defensas.

“Además se están preparando todas las estaciones de bombeo, y se analiza si es necesario reforzar alguna de ellas con grupos electrógenos”, aseguró Berón, en una entrevista con El Litoral, al terminar la Junta de Protección Civil de Rincón.

En Villa California, Roberto Romero, presidente de la vecinal del barrio, recordó que hace años que denuncian las dificultades de mantenimiento en las defensas. “Además de los problemas que mostró El Litoral, también vemos vulnerable el tramo que va de calle del Sol a Callejón Laborie, del lado de la laguna Setúbal. Nos parece que el nivel de coronamiento se erosionó y es más bajo que en el resto del anillo”, aseguró.

En Colastiné Norte, mañana a las 18, habrá una reunión en la sede de la vecinal para analizar la situación del barrio ante la crecida. “Nos preocupan los socavones en la zona de la toma de agua y la falta de mantenimiento en las zanjas de guarda, porque es muy probable que haya filtraciones”, planteó Jonas.

El dato

Emergencia hídrica

Ingresó al Concejo un proyecto de ordenanza enviado por el Ejecutivo con pedido de tratamiento exprés. Allí se pide al Concejo autorización —mientras se mantenga el estado de emergencia hídrica dispuesto días atrás por la creciente del Paraná— para “realizar compras y/o contrataciones necesarias para paliar las necesidades derivadas de dicha emergencia, prescindiendo del correspondiente llamado a licitación”. El proyecto se tratará el próximo lunes a las 14 en sesión extraordinaria. El intendente José Corral fundamentará el proyecto en el recinto.

A toda marcha. En el rulo de la 168, las máquinas trabajan para levantar la altura del terraplén y compactarlo. Es el sector que se rompió para construir un canal y una alcantarilla. Foto: Flavio Raina

la magnitud de la crecida

En una reunión que se realizó ayer, Carlos Paoli, director del Centro Regional Litoral del Instituto Nacional del Agua (INA), explicó que la magnitud de la crecida se podrá conocer con mayor precisión una vez que el pico pase por la ciudad de Corrientes.

“Los pronósticos, con la situación de lluvia que se ha producido hasta ayer, indican un pico estimado en Corrientes para el 1 ó 2 de julio del orden de los 7,40 metros. Ese pico sube rápido, pero también baja de manera muy rápida y esa crecida se puede aplanar antes de llegar a Santa Fe”, contextualizó Paoli, que ha investigado durante años el comportamiento de la cuenca del Paraná.

El director regional del INA también recordó que luego de que se produzca el pico de crecida en Corrientes hay un tiempo de desplazamiento hasta Santa Fe que tampoco es fijo y depende de muchos factores.