Decreto de Cristina

$ 23 mil millones de un plumazo

 

Aumenta el gasto público en medio de la campaña electoral. El decreto de Necesidad y Urgencia firmado por la presidenta contabiliza gastos ya efectuados y por efectuar por más de $ 23 mil millones. El superávit fiscal que solía ser un “pilar del modelo”, pasa así a ser un déficit financiero que se proyecta hasta $ 11.160 millones.

A sola firma la jefa de Estado distribuye los recursos. El decreto 1.170/13 tiene 160 planillas anexas con el detalle del destino de los fondos: utilidades del Banco Central (que pierde reservas) y disminución de créditos presupuestarios originalmente destinados a la atención del pago del cupón PBI, recurso que no se usó porque el crecimiento estaba “sobrevaluado” en el presupuesto.

El Ministerio de Economía recibió $ 2.541 millones para el Programa de Estímulo a la Inyección de Excedente de Gas Natural. Otros $ 8.310,01 millones fueron para subsidios a la Compañía Administradora Mayorista del Mercado Eléctrico (Cammesa), encargada de importar fuel oil, en tanto que 457,03 millones más se destinarán a subsidiar hidrocarburos.

Enarsa, la petrolera estatal encargada de importar combustibles, recibió créditos adicionales por $ 8.985,3 millones según destaca hoy El Cronista. Otras sociedades anónimas estatales que recibieron refuerzos presupuestarios fueron Arsat ($ 1.763,55 millones), Nucleoeléctrica Argentina S.A. (NASA) ($ 925,8 millones), Yacimientos Carboníferos Río Turbio ($ 584,5 millones) y Yacyretá (1.171 millones).

Se destinaron además, a través del Ministerio de Interior de Florencio Randazzo, $ 1.579,76 millones para colectivos y otros $ 564,18 millones para trenes. Julio De Vido expandió su presupuesto para “Techo digno” en $ 1.273,5 millones, a lo que sumó $ 810,9 millones para el Programa Acciones para el Mejoramiento Habitacional e Infraestructura Básica y otros $ 277,43 millones para el Fortalecimiento Comunitario del Hábitat. La DNV recibió $ 1.927 millones y el Programa de Crédito Argentino (Procrear) recibió $ 2.000 millones adicionales.

Hubo también $ 400 millones para repartir entre universidades; Salud captó $ 1.532,5 millones y Seguridad, $ 1.171,87 millones.