En Rufino

INTENTÓ RENOVAR SU DNI Y TERMINÓ EN LA CÁRCEL

 

De la Redacción de El Litoral

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El buen trabajo investigativo y el entrecruzamiento de datos permitió a efectivos de la Unidad Regional VIII detener a un ladrón, miembro de una banda que el mes pasado asaltó una casa de familia de la localidad de Rufino.

El atraco había sido perpetrado en horas de la madrugada del 20 de agosto, en una vivienda de calle Centenario al 45. Ese día, eran aproximadamente las 3.30 cuando tres malvivientes violentaron una de las aberturas del inmueble y sorprendieron durmiendo a un matrimonio y sus dos hijos.

Con mucho “oficio”, los asaltantes redujeron a las víctimas y las ataron con sábanas para que no puedan obstaculizar su “trabajo”.

Los tres delincuentes se tomaron su tiempo y revolvieron la casa con tranquilidad -mientras dos cómplices más los esperaban afuera-, en busca de cada objeto de valor. Así, hallaron dinero en efectivo, joyas y otras pertenencias. Luego, cargaron todo en bolsas y finalmente se dieron a la fuga.

Afortunadamente, ninguno de los integrantes de la familia sufrió agresiones.

Apenas conocido el hecho, la policía comenzó una investigación y las víctimas reconocieron a uno de los ladrones entre las fotos de sospechosos que los uniformados les mostraron.

La Justicia libró inmediatamente una orden de captura. El cruce de información permitió conocer que este sujeto, de 31 años y oriundo de provincia de Buenos Aires, había sacado turno para renovar su DNI.

En la trampa

Estaba citado para ayer, en el Registro Civil de Rufino, en avenida San Martín al 40. En consecuencia, a primeras horas de la mañana, personal de la Comisaría 3a -con el apoyo de otras reparticiones de la Unidad Regional- implementó un discreto, pero importante, operativo en las inmediaciones del edificio del organismo.

Sin sospechar la trampa que había sido dispuesta, el imputado acudió al lugar y realizó tranquilamente todos los trámites previstos, pero cuando intentó retirarse estaba rodeado y fue detenido por los uniformados. En su poder tenía dos celulares, varias llaves, casi dos mil pesos en efectivo, un costoso reloj y una moto Yamaha sin patente.

Las actuaciones continúan y los responsables trabajan sobre pistas firmes para tratar de ubicar al resto de la gavilla.