llegan cartas

Jubilados de pie

Juan José Sagardía.

DNI: 6.554.695. Ciudad.

Señores directores: Hace años que los gobiernos de turno hacen uso y abuso de los Fondos Disponibles del Anses para abastecer la Caja del Estado Nacional. Es permanente la discusión del uso indebido de dichas partidas, evidentemente sin retorno. Se analiza lo que debería ganar un jubilado y nos basamos en estadísticas, pero lo real es que las jubilaciones mínimas son precisamente eso: “mínimas” y también son reales las cifras voluminosas que el Anses aporta para acciones de Empresas y Aportes al Estado Nacional. En suma, tenemos un Anses supermillonario y jubilados, en su mayoría, en la indigencia.

La pregunta es ¿por qué los jubilados tenemos tan poco aprecio hacia nosotros mismos, tan poco respeto a nuestra dignidad y estamos en silencio y nos comportamos pasivamente?

Hoy está de moda golpear y robar a los adultos mayores, y no reaccionamos. ¿A quién vamos a recurrir, si desde el máximo poder político no se nos respeta en nuestra propiedad y usufructúan nuestros ahorros?

Al dinero del Anses lo aportan los asalariados, los empleadores, los jubilados y lo administra el Estado. ¿Por qué? El dinero no es del Estado. Lo mismo sucede con Pami y el sistema de salud.

Los jubilados somos personas mayores, no viejos inútiles; y si no, miremos a nuestro jubilado más importante: el Papa Francisco.

Los jubilados somos muchos y si nos unimos por nuestros intereses podemos gobernar el país en el 2015.

Podemos en esta oportunidad volver a ser los forjadores de nuestra patria, tal como lo hemos hecho en nuestra vida de trabajo. Hicimos patria; volvamos a hacer patria. La patria nos necesita.