Colón no se presentó a jugar y renunció Lerche

Crónica de un final anunciado

Lo que debía ser un partido de fútbol terminó en un caos institucional que originó varias batallas en distintos puntos de la ciudad. La gente dijo basta y el presidente también.

Crónica de un final anunciado

Caos, violencia y un futuro incierto.

Los hinchas explotaron tras conocer la suspensión del partido y pérdida de puntos. La policía debió replegar a los más exaltados, quienes intentaron ingresar a la sede primero, y al estadio después. Foto: Mauricio Garín

 

De la Redacción de El Litoral

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Lo sucedido ayer en el mundo Colón fue increíble. Pero a la vez, no era descabellado pensar que algún día podía llegar a pasar. El título de la novela del escritor colombiano Gabriel García Márquez, “Crónica de una muerte anunciada” viene “como anillo al dedo” para expresar la actualidad sabalera. Ojalá no le pase a Colón lo que en 1981 (no hace falta decir más), año en que fue publicada por primera vez la exitosa obra de “Gabo”. Tampoco es necesario ahora recordar todas y cada una de las cosas que generaron este presente, por lo pronto, haremos una “crónica” de lo vivido en la víspera.

Se sabe que el elenco de Mario Sciacqua recibía a Atlético Rafaela desde las 18 en el Brigadier López con el arbitraje de Darío Herrera. Pero eran las 16.30 (casi siempre el plantel llega una hora y media antes) y el micro ni siquiera había partido desde el Hotel de Campo Colón, adonde concentra. Era lógico pensar en que algún problema se había originado. Inmediatamente se supo que la delegación había resuelto no subir a la unidad porque la dirigencia no había cumplido con el arreglo al que habían llegado la semana pasada: cobrar un porcentaje de la abultada deuda que el club mantiene con los futbolistas.

Pasaban los minutos y no había novedades positivas. A todo esto, la plantilla rafaelina ya estaba preparándose para la competencia en el gimnasio Roque Otrino. Por supuesto, la planilla también se encontraba lista. Como el plantel rojinegro, aún en el hotel, no había arreglado la situación (se dijo que Germán Lerche quiso interceder y fue echado por los jugadores), el árbitro decidió, con buen tino, no salir al campo de juego, como así tampoco que lo haga Rafaela, por lo que en su vestuario se labró un acta en el cual describió que “Colón no se presentó a jugar el partido ante Atlético Rafaela”.

De todas maneras, un rato antes de que esto sucediera, Rubén Moncagatta había dicho que “los jugadores, tras una reunión mantenida con representantes de Futbolistas Argentinos Agremiados, revieron su decisión y que finalmente el cotejo se jugará a las 20.30. Hasta lo anunció la “Voz del estadio”, algo que los cerca de 2.000 hinchas presentes pudieron escuchar. Nada más lejos de la realidad, sobre todo pensando en que por razones de seguridad, el encuentro había sufrido un cambio de horario, ya que originalmente se iba a disputar a las 20.

Lógicamente, el conjunto visitante se cambió de ropa y aproximadamente a las 19 se subieron al colectivo para regresar a Rafaela. El único que hizo declaraciones fue Matías Fissore, quien se reunió con Darío Herrera antes de que éste cierre la planilla. El mediocampista de la Crema expresó que “la resolución la tiene que dar la Afa, lo único que me dijo el árbitro fue que el partido está suspendido. Tampoco se habló de que se jugaría a las 20.30, lo que dice el reglamento es que podemos esperar 15 minutos de la hora fijada, o sea hasta las 18.15. No salimos a la cancha porque no era necesario y por razones de seguridad”.

El plantel de Atlético se quedó en el estadio hasta las 19, aproximadamente. O quizás algunos minutos más. El dirigente Gabriel Carlucci señaló que “a Herrera le llegó una información del Colegio de Arbitros diciendo que podía reprogramarse el partido para las 20.30 en el caso que Atlético de Rafaela estuviese de acuerdo para tal circunstancia. Yo consulté con los jugadores y con el cuerpo técnico y en ese momento, en forma unánime entre jugadores, cuerpo técnico y dirigentes entre los cuales me incluyo, se tomó la decisión de no aceptar esa propuesta. El fundamento principal que tiene eso es que nosotros ya teníamos finalizada la entrada en calor, que duró aproximadamente 50 minutos, por lo cual los jugadores se iban a enfriar y luego otra vez dispuestos a jugar el partido. En ese caso esto hubiera sido una verdadera ventaja deportiva. Entonces resolvimos no aceptar esta propuesta de disputarlo a las 20.30”.

Respecto de la decisión que se puede llegar a tomar, señaló que “eso lo tendrá que determinar el Tribunal de Disciplina de la Asociación del Fútbol Argentino. Yo no puedo vaticinar una cuestión que escapa a mi conocimiento”.

"Hace seis meses yo estaba en Colón. Todavía tienen deudas conmigo. Entiendo el reclamo de los jugadores, a algunos les deben un año. Yo tengo cheques rebotados de hace medio año”.

Adrián Bastía

Ex jugador de Colón