Por la función social de la propiedad

Sacerdotes cuestionan al proyecto y a los obispos

El Grupo de Curas en la Opción por los Pobres criticó que se haya sacado del proyecto de reforma del Código Civil la referencia a la función social de la propiedad y lamentaron que la cúpula eclesiástica no haya puesto “tanto énfasis” en reclamar la inclusión de este principio.

Los sacerdotes reclamaron a los legisladores la inclusión “explícita” de este punto en el futuro Código, al afirmar que está “directamente ligado al principio del destino universal de los bienes”.

Argumentaron que hacerlo permitirá “articular una herramienta que en manos del Estado sirva para garantizar el acceso de los pobres al derecho a la tierra, la vivienda y la dignidad”.

“Nos preocupa que un instrumento tan importante como el Código Civil no legisle sólo para los que tienen asegurado el derecho a la propiedad, sino prioritariamente para aquellos que “de no mediar una regulación del Estado, sufren la precariedad, la indefensión y la imposibilidad de vivir conforme a derecho”, subrayaron en un comunicado.

“Es una cuestión de derechos humanos”, agregaron. El grupo dijo que resulta “difícil de entender que los obispos hayan reclamado cambios, como la modificación del artículo 19, que establece ahora que la persona humana comienza desde la concepción, y no hayan reclamado con el mismo énfasis la inclusión del principio de la función social de la propiedad”.

Asimismo, recordaron que este tema está “claramente abordado por la reflexión bíblica, patrística y el magisterio contemporáneo de los papas en la Iglesia católica y de incidencia cotidiana en la vida de los pobres”.

El grupo de Curas en la Opción por los Pobres aseguró que formuló el pedido “desde nuestra sensibilidad y caminar junto a las necesidades urgentes de los pobres y sin ánimo de reclamar privilegios que no pretendemos tener”.

Asimismo, reiteró su mensaje con motivo de las elecciones legislativas, en el que expresó que “la propiedad privada no es un dogma intocable, debe tener un sano límite impuesto por la necesidad de todos”, y sostuvo que “la propiedad privada es un derecho secundario, el único derecho natural primario es el destino universal de los bienes”.