Luego de la decapitación de tres reos

Denuncian brutalidad en prisiones brasileñas

Agencia EFE

Amnistía Internacional denunció la “violencia” y “hacinamiento” generalizado en las cárceles brasileñas, una realidad que tomó fuerza después de las revueltas generadas en las cárceles del estado de MaranhÆo, especialmente en el complejo penitenciario de Pedrinhas, de la capital Sao Luis.

“Las prisiones son una mazmorra, con condiciones de animales. Son un depósito de seres humanos en pésimas condiciones. Hay una situación generalizada de hacinamiento, de pésimas condiciones de salud, de higiene”, afirmó el asesor de Derechos Humanos de Amnistía Internacional Brasil, Alexandre Ciconello.

Para Ciconello, las cárceles de Maranhao, donde sólo el año pasado murieron sesenta personas, la mayoría de ellas en Pedrinhas, llegaron al límite de “violencia” y “brutalidad”.

Imágenes del horror

En este sentido, la gota que colmó el vaso fue un video difundido este martes por el diario brasileño Folha de Sao Paulo que mostró imágenes supuestamente tomadas por los presos de Pedrinhas, en las que se podía ver la decapitación de tres reos.

“La brutalidad y las pésimas condiciones de los presidios en todos los estados brasileños son recurrentes. No se trata de un caso aislado, el nivel de brutalidad de las cárceles brasileñas es muy alto”, afirmó al respecto del vídeo.

Ciconello también hizo referencia al pedido realizado hoy por la ONU para que las autoridades brasileñas lleven a cabo una investigación “inmediata, imparcial y efectiva” y señaló que la presión internacional puede incentivar al Gobierno a cambiar esta situación.

“Es algo que viene pasando desde hace años. Desde 2007 hasta hoy 169 personas fueron asesinadas en presidios de Maranhao. El Gobierno ha hecho poco para cambiar la situación”, añadió.

A su juicio, para cambiar dicha situación es preciso aumentar el número de unidades penitenciarias, agilizar los procesos de los presos que se encuentran encarcelados de manera provisional y combatir las acciones criminal, entre otras medidas.

‘Para ello, es necesario profundizar en la investigación y la inteligencia, no solo represión‘, valoró.

Ante la ola de violencia registrada en los últimos meses, el pasado 27 de diciembre, sesenta policías militarizados intervinieron “por tiempo indeterminado” las diversas cárceles del estado.

Como represalia a la presencia policial en los presididos, los cabecillas recluidos en Pedrinhas supuestamente ordenaron la semana pasada un ataque a cuatro autobuses urbanos de Sao Luis, que se saldó con la muerte de una niña de seis años y con heridas graves a otras cinco personas.

Una de las medidas optadas por el Gobierno federal frente a la situación fue ofrecer el trasladado de al menos 25 presos del centro penitenciario de Pedrinhas a presidios de máxima seguridad de otras regiones del país.

investigación “inmediata”

  • Desde la ONU solicitaron que Brasil adopte las medidas oportunas para poner en marcha “urgentemente” el Sistema Nacional para Prevenir y Combatir la Tortura, aprobado el año pasado en el país

La ONU ha instado a las autoridades brasileñas a abrir una investigación “inmediata, imparcial y efectiva” sobre la violencia en los centros penitenciarios, a raíz de la publicación del video en el que se mostraba el asesinato de varios presos en el penal de Pedrinhas.

El portavoz de la Oficina del Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Rupert Colville, expresó su ‘inquietud‘ sobre las conclusiones del último informe del Consejo Nacional de Justicia, que revela que 59 internos murieron en 2013 en el complejo penitenciario de Pedrinhas, así como las últimas fotos de la violencia entre los reclusos.

Colville pidió a las autoridades que tomen “medidas inmediatas para restablecer el orden en los centros penitenciarios de todo el país”.

Colville se refirió a la necesidad de “reducir el hacinamiento” de los internos y ofrecer a éstos unas “condiciones dignas” en su privación de libertad.

También solicitaron que Brasil adopte las medidas oportunas para poner en marcha “urgentemente” el Sistema Nacional para Prevenir y Combatir la Tortura.