Acusan a los Hermanos Musulmanes

Violencia sin fin en Egipto

  • Al menos cinco personas murieron hoy y otras 88 resultaron heridas, entre ellos tres policías, en tres explosiones registradas en diferentes zonas de El Cairo contra instalaciones policiales.
Violencia sin fin en Egipto

Un socavón abierto en el asfalto documenta el sitio donde estaba estacionado el coche bomba que explotó frente a la Dirección General de Seguridad en El Cairo. Foto: Agencia EFE

 

Redacción de El Litoral

Agencias EFE/DPA

Al menos cinco personas murieron hoy y otras 88 resultaron heridas, entre ellos tres policías, en tres explosiones registradas en diferentes zonas de El Cairo contra instalaciones policiales, según informó una fuente de seguridad.

El atentado más mortífero causó 4 muertos y 73 heridos, después de que un coche bomba explotara esta mañana frente a la Dirección General de Seguridad, en pleno centro de la capital.

Se produjo con un coche bomba conducido por un suicida que circulaba por la calle Port Said, dijo una fuente del Ministerio de Interior.

La explosión también causó cuantiosos daños materiales, como la destrucción de varias plantas del edificio del Tribunal del Sur de El Cairo y del Museo de Arte Islámico, que, según ha informado el Ministerio del Interior en un comunicado, quedó “completamente destruido”.

Algo más de dos horas después, otra explosión causó la muerte de un oficial de policía y heridas a otras 15 personas cerca de una estación de metro en el distrito de Doki.

En este atentado, tres artefactos explosivos fueron arrojados por desconocidos contra un vehículo policial, aunque la mayoría de los heridos fueron los pasajeros de un microbús que circulaba por la zona, explicó la fuente.

Finalmente, un tercer ataque contra una comisaría de policía en Talbiya, en la provincia de Guiza no causó muertos ni heridos, después de que otros desconocidos lanzaran un explosivo sobre las instalaciones policiales.

Según se pudo constatar en el lugar del primer ataque, el coche bomba que originó la explosión provocó un importante socavón en la carretera situada en frente de la Dirección General de Seguridad, cuya fachada y entrada resultaron también bastante dañadas.

“Escuché la explosión y enseguida me acerqué y vi a mucha gente corriendo y el coche bomba por medio”, dijo Sherif Gamel, un estudiante de Economía de 19 años. La policía acordonó la zona del atentado aunque permitió sin problemas la entrada de vendedores de banderas y fotos del jefe de las Fuerzas Armadas, Abdel Fatah al Sisi, y cientos de curiosos, muchos de los cuales entonaban cánticos a favor del general.

“Es un atentado que no debería haber ocurrido en Egipto, es obra de los Hermanos Musulmanes, pero que sepan que no nos rendiremos, cuanto más daño nos hagan, más lucharemos contra ellos”, manifestó Ahmed Abdelaziz, de 48 años, vecino de la zona. En medio de los curiosos, diversos miembros de la policía científica registraban la zona de la explosión y el Museo de Arte Islámico, del que varios operarios comenzaron a sacar las obras de arte, que metían en cajas para protegerlas.

Un acto de cobardía

El Ministerio del Interior, a través de un comunicado, calificó los tres ataques de “terroristas y cobardes” y de “intento de evitar que Egipto celebre mañana el tercer aniversario de la revolución del 25 de enero”.

Estos atentados se producen un día antes de que se cumplan tres años del inicio de las revueltas de 2011, tras las que fue derrocado el entonces presidente del país, Hosni Mubarak (1981-2011).

Los ataques contra la fuerzas de seguridad han aumentado en Egipto desde el derrocamiento militar del ex presidente islamista, Mohamed Mursi, en julio pasado y la posterior persecución contra sus seguidores.

Ayer, al menos cinco policías murieron, entre ellos tres sargentos, y dos resultaron heridos en un ataque armado perpetrado contra un puesto de control en la provincia de Beni Suef, en el sur de Egipto.

Destrucción “total” en el Museo de Arte Islámico

  • El Museo de Arte Islámico, una de las joyas culturales de la capital egipcia, quedó “completamente destruido” por la explosión y deberá ser reconstruido, según el ministro de Antigüedades, Mohamed Ibrahim.

Ibrahim valoró en 15,3 millones de dólares los daños provocados por el atentado contra la Dirección de Seguridad de El Cairo, situada frente al Museo de Arte Islámico, y alertó de que algunas piezas se han visto gravemente afectadas.

Entre los objetos de la colección que mayores daños han sufrido está el “mihrab” (hornacina en las mezquitas que indica la dirección de La Meca) de madera del santuario de Ruqía, que quedó totalmente destrozado, según el ministro.

“Se aprecia que diferentes piezas se vieron afectadas, se han derrumbado varias paredes, todos los cristales en el exterior del edificio están rotos y han caído las vitrinas que se utilizan para la exposición de las piezas arqueológicas”, explicó Ibrahim en un comunicado.

Según se pudo constatar desde fuera del edificio, rodeado por la policía, las ventanas del museo están rotas, al igual que las paredes, en las que se aprecian grandes daños.

Se ha impuesto un cordón de seguridad alrededor del museo para evitar que la gente acceda al interior hasta que las reliquias sean evacuadas.

Inaugurado en 1903, este importante museo fue cerrado un año antes de cumplir su centenario con el objetivo de reconstruir y modernizar sus deficientes instalaciones, y fue reabierto siete años, en 2010.

El centro -probablemente el museo cairota en mejores y más modernas condiciones- cuenta con una colección de 2.500 piezas de arte islámico de los mamelucos (1250-1517 d.C.) y los otomanos (1517-1805 d.C.), así como de las dinastías fatimí (969-1171) y ayubí (1171-1250 d.C.), entre otras.

La muestra incluye objetos de cerámica, murales, textiles, monedas, relojes de arena, globos terráqueos, fuentes y muros con grabados geométricos, ventanas de madera tallada, tumbas de mármol y varios de los coranes más antiguos que se conocen hasta ahora.

El equipo de evacuación ya ha llegado al lugar y está utilizando grandes cajas para recuperar todas las piezas y las obras de arte.

Por su parte, un equipo de la Fiscalía General está estudiando los daños en el interior del museo para preparar un informe sobre el volumen de los destrozos tras la explosión.