Más sobre el proyecto de ley antipiquetes

El kirchnerismo dice que “no impulsa la represión social”

El proyecto del gobierno nacional es por ahora sólo una idea. Ya cuenta con el respaldo del PRO. La UCR da señales en su favor, pero prefiere ver primero el texto. La izquierda se opone.

4-A-DYN17.jpg

La jefa del bloque de diputados nacionales del FPV, Juliana Di Tullio, asumió la defensa de la iniciativa presidencial.

Foto: Archivo El Litoral

 

De la redacción de El Litoral

[email protected]

La jefa del bloque de diputados nacionales del kirchnerismo, Juliana Di Tullio, debió salir a aclarar que el gobierno nacional no propiciará la represión de las protesta sociales, en el marco de su impulso a la llamada ley antipiquetes y que no utilizará la Ley Antiterrorista -que agrava penas ya previstas por el Código Penal cuando se “siembre el terror en la población”.

Ante el anuncio presidencial del 1º de marzo en el Congreso, y las duras expresiones de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner sobre los cortes de calles, Juliana Di Tullio aclaró que los diputados del Frente para la Victoria buscarán encontrar “buenas ideas” con el objeto de lograr “una sana convivencia”.

El bloque del PRO aplaudió la iniciativa presidencial durante el discurso del 1º de marzo, mencionada por la jefa del Estado argentino luego de relatar que dialoga con el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Mauricio Macri.

En tanto, la UCR también se mostró en favor de encontrar algún modo de evitar la reiteración de los piquetes callejeros, pero advirtió que primero esperará a conocer el texto que proponga el gobierno.

“No lo verán”

Di Tullio negó enfáticamente que la presidenta de la Nación haya sugerido el sábado prohibir los bloqueos de calles y rutas. Lo que les pidió, señaló la legisladora, fue que “nos pongamos a trabajar todos los sectores políticos, que propongamos y tengamos buenas ideas para poder tener una sana convivencia”.

Entrevistada en C5N, la legisladora puntualizó que el oficialismo “no busca reprimir los cortes de la vía pública”.

“La protesta social no se reprime. Mientras estemos nosotros, no se reprimirán las protestas; no lo han visto ni lo van a ver”, dijo, a pesar del antecedente del desalojo de la Gendarmería, a bastonazos, balas de goma y gases de agrupaciones de izquierda en la avenida Panamericana.

En ese sentido señaló que “habrá que ser más creativos y ver cómo, en qué lugar, de qué forma” podrán realizarse las protestas sin molestar la vida de la gente.

Puntualizó al respecto que “cuando hay dos derechos que colisionan es difícil resolver esas cuestiones pero yo creo que hay que ponerse a pensar y trabajar en conjunto con el resto de los bloques”.

“Hace once años que gobierna el kirchnerismo y no se reprimió jamás una protesta. Y eso no va a suceder ahora”, detalló la diputada.

El ciudadano de “rehén”

En tanto, la diputada nacional Teresa García (Frente para la Victoria-Buenos Aires) consideró que la referencia de la presidente a la necesidad de fijar pautas para la “convivencia ciudadana” no tiene que ver con la represión de la protesta social sino con que los ciudadanos no pueden seguir siendo “rehenes” de los cortes de calles y piquetes.

“El derecho a reclamar salarios es un derecho intrínseco, y el peronismo y sobre todo este gobierno, que nunca estableció la represión para desalojar las calles, no lo va a hacer ahora. Pero no podemos seguir siendo rehenes y entorpeciendo a los propios trabajadores”, planteó la diputada en diálogo con Télam.

La UCR habla de hipocresía

“Comparto la necesidad de regular las protestas callejeras para que todos puedan manifestarse sin afectar los derechos de los demás. Esto también incluye las manifestaciones que organizan agrupaciones oficialistas”, afirmó el diputado Julio Cobos, ex vicepresidente de la Nación de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner.

Más duro, el senador nacional Gerardo Morales coincidió con Mario Negri, titular del bloque de diputados nacionales, y criticó la “gran hipocresía” presidencial, porque “el gobierno ha financiado a Luis D’Elía y a Milagro Sala hasta el hartazgo”.