Demencial

Locura y destrucción en la escuela Estrada

• Aulas y salones fueron arrasados por los violentos. Destrozaron mobiliarios, realizaron pintadas y hasta defecaron. Los vándalos intentaron incendiar el establecimiento, colocando cortinas encima de calefactores encendidos.

Ninguna de las aulas quedó a salvo de la ira de los violentos. Fotos:mauricio garín

Danilo Chiapello

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Autores ignorados concretaron una macabra obra en la escuela 1265 José Manuel Estrada, (barrio Los Hornos) donde provocaron daños y destrozos de magnitud.

El triste suceso fue descubierto esta mañana cuando las porteras arribaron al establecimiento educativo (que asiste a cerca de mil chicos de la zona) y se encontraron con un cuadro de terror.

Aulas y salones del colegio lucían como después de un terremoto con mobiliarios destrozados y elementos de trabajo desparramados por el suelo.

Pero además de los daños realizados los violentos fueron más allá. Realizaron pintadas obscenas y hasta defecaron en distintos lugares.

Rompieron todo

“No sabemos en qué momento entraron ni qué día. Lo único que podemos decir es que rompieron todo”, dijo hoy entre lágrimas Isabel García, la directora de la escuela.

“Nosotros el viernes a la tarde terminamos las actividades y cerramos la escuela. Esta mañana, a pesar del feriado, los asistentes escolares vinieron a dar comedor. Cuando abren la puerta se dan cuenta de que habían entrado a la escuela.

Tenemos destrozos al por mayor, en aulas y salones. Entraron en todos. Tenemos daños en las puertas, en otras aberturas. Rompieron los candados de las rejas. Creemos que entraron por los tapiales linderos.

Quisieron incendiar

Más adelante la directora explicó que los sujetos “prendieron las estufas y les pusieron encima las cortinas para incendiar. No comprendemos tamaño grado de maldad.

Por ejemplo en algunos salones tenemos placas de calefacción sobre las cuales derramaron alcohol en gel, para encenderlas. En un salón quemaron cortinas y en otros no.

Esta mañana, cuando abrieron las porteras, encontraron los artefactos enchufados. Es decir que tuvieron toda la intención de provocar un incendio de magnitud.

Rompieron los armarios y destrozaron todo lo que había en su interior.

En el comedor rompieron los vidrios. Pero luego advirtieron que había un sensor de la alarma, por eso no ingresaron.

En la planta alta, como no pudieron entrar por una puerta, forzaron una reja y se ganaron por la parte superior y destrozaron todos los armarios.

Todo a pulmón

“En materia de vandalismo terminamos mal el año y lo comenzamos peor. El año pasado, en noviembre, entraron a Tecnología a la parte de taller. Robaron todo... no dejaron nada.

“La pena es porque todo aquí se hace a pulmón. Entre maestros y padres han comprado cortinas, materiales, han pintado las aulas para recibir a los niños, y bueno, todo esto duele.

“Sin embargo ante todo esto que nos pasa la decisión es seguir trabajando.

“Sabemos que todo el barrio no es así, estas cosas terribles son obra de unos pocos. No sabemos quiénes son.

“Tenemos gran cantidad de padres que colaboran, también está el personal que apoya de manera incondicional, y eso es muy valorable. Todo eso nos da fuerza para continuar, porque los chicos lo necesitan.

“En realidad la sociedad está enferma, pero nosotros vamos a seguir”, culminó.

En todos los salones, los vándalos se dedicaron a romper y destruir. No robaron nada.

“Todo esto duele porque aquí hacemos todo a pulmón”, dijo hoy Isabel García, directora de la escuela.

Fotos: Mauricio Garín