El señor beach volley

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Ángel Verzalli

Es sanjustino, jugó en distintos equipos de la Liga Santafesina, fue campeón con Colón, finalista en la Liga Nacional de Ascenso. Hoy, junto con Alejandro Ronconi forma una de las mejores y exitosas duplas del volley playero argentino. Sueña con jugar el Circuito Internacional.

TEXTOS. LUIS GUDIÑO.

 

SUS COMIENZOS. “Al vólley lo conocí a través de mi hermano Javier, que me hizo fanático de este deporte. Jugaba en la escuela y en Tiro Federal (Club de San Justo). Pero empecé a vivir el vólley federado con el polideportivo Llambi Campbell. Un día fuí a visitar a mi abuela que vive ahí, y como estaba aburrido salí a pasear un rato por el pueblo. Vi las puertas del club y una cancha de vólley color naranja. Me llamó la atención y pasé. Estaba el cuidador y me dijo que a la noche vaya a jugar. Desde esa tarde no paré más”.

PRIMEROS TÍTULOS. “El primer título fue en la Liga no federada de mi ciudad, San Justo. Participamos cuatro equipos de la ciudad y ganamos con Tiro Federal el primer campeonato. Y mi primer viaje, que me marcó y que hizo que quiera seguir jugando al vólley, fue a Paraná. Tenía dos semanas jugando en Llambi Campbell y nos fuimos a entrenar en conjunto con el club Estudiantes; ¡trabajos de triple turno! Para mi era algo increíble en ese momento. El viaje al Torneo Internacional de Villa Ocampo S18 también me encantó; llevaba dos meses jugando y éramos muy reconocidos en esa competencia. Jugar las semifinales con un público de 2.500 personas, a esa edad y sin experiencia era fascinante”.

SUS CLUBES. “En Tiro Federal ganamos cuatro campeonatos locales consecutivos. Después, en Llambi ganamos la clasificación para jugar TNA, lo que también logré con Gimnasia y Esgrima (Santa Fe) y con ese club competimos en esa Liga Nacional de Ascenso. Con el ‘Poli’ de Llambi ganamos la copa Colonia Valdense de Uruguay y la copa Ubajay en Entre Ríos. Jugando para Colón de Santa Fe gané mi primera Liga Santafesina, y llegamos a cuatro finales consecutivas. También tuvimos la oportunidad de jugar TNA. Además, jugar una final de la Liga Argentina de Ascenso con el equipo de Olímpico La Banda, de Santiago del Estero, fue una experiencia muy enriquecedora. Al igual que jugar la Liga Nacional Chilena con el club Los Cóndores de Los Andes”.

SU PASO AL BEACH. “El vóleibol de playa es especial, diferente al indoor, difícil de explicar. Son dos deportes que parecen iguales, pero son totalmente diferentes, mas allá del cambio de la pelota y de las condiciones de juego. El beach me permitió conocer muchísimos lugares de la Argentina. Además, se parece mucho a una familia con hermanos; gracias al beach tengo amigos por todo el país y eso es impagable. Sobre todo mis hermanos de Mendoza, de Tucumán, Córdoba, y así puedo nombrar un montón de provincias”.

PODEROSA DUPLA. “Junto a Alejandro Ronconi ganamos muchos campeonatos del circuito entrerriano, del circuito cordobés, en Villa Maria, Rosario y Córdoba. Pero uno de los últimos fue el más importante para mi: ganar una etapa del Circuito Argentino de Beach Volley es algo que tenía pendiente desde hace mucho, jugué finales en San Luis, Buenos Aires junto a Martin Conde, finales muy parejas, pero nunca pude llevarme el campeonato. Por suerte, esta temporada junto a Alejandro nos alzamos con el podio en Santa Fe. Otra competencia que fue como ganar un campeonato, fue participar en los Juegos Sudamericanos en Perú representando a la Argentina junto con Miguel León. Y también el año pasado, como integrante de la selección nacional, participar en el Grand Slam de Corrientes, en una fecha del Word Tour, máxima competencia mundial, codeándonos con leyendas del vóley como son Emanuel, Allison, Ricardo, Roger, Gibbs, Dalhausser y todos los monstruos del beach”.

PARA NO OLVIDAR. “En el circuito te terminas haciendo amigos de todos, prácticamente somos una familia. Eso es lo más hermoso que tiene el beach: la solidaridad, el compañerismo, la amistad. Tanto es asÍ que cuando jugué el Grand Slam de Corrientes, estaba esperando el colectivo para que nos trasladen del hotel al campo de juego, y justo estaba en el hall central con la dupla olímpica de Estados Unidos, Gibbs y Paterson, y nos pusimos a hablar como si fuésemos conocidos de hace rato. Lo loco era que quería hablarles en inglés, y bueno, no es muy bueno; por eso es que mucho no me daba a entender, y era más por señas que por palabras. En una frase ‘inventé’ dos o tres palabras en inglés y en eso me miraron con cara de ‘¿qué me estás diciendo?’ y con mucha tranquilidad, Gibbs me dice: ‘no hace falta que me hables en un inglés raro, yo hablo español...’ Y a partir de ahí le enseñé un poco de ‘lunfardo’ argentino”.

SU GRAN SUEÑO. “Estamos trabajando con mi compañero Ronconi para ser número uno del ranking nacional. Es un objetivo ambicioso pero gracias a algunos sponsors como UPCN Santa Fe, Expreso Lola, y a nuestras familias que confían en nuestro proyecto de a poco estamos alcanzándolo. Luego de salir campeones y subcampeones del circuito argentino, y ganar una etapa del circuito uruguayo, queremos sumar la mayor competencia posible, alcanzar nuestro máximo nivel y poder competir en el Calendario de World Tour del Beach Volley internacional por todo el mundo. Esa es nuestra mayor meta”.

PERSONAL

Familia: mamá Mónica Guadalupe Ghigo; papá Omar “Pucho” Angel Verzzali; hermana Alejandra y hermano Javier.

Mascota: “mi perro ‘Tachy’, adiestrado para que nos alcance el frisbee”.

Comida preferida: el asado obviamente, “pero el ‘guiso’ casero, como buen estudiante, no puede faltar”.

Otros hobbies: “últimamente estoy con el malabarismo, e incursionando en telas (aunque es un poco difícil)”.

Música predilecta: “variado, aunque me gusta mucho el reggae y blues”.

Un lugar en el mundo: “en cualquier lugar donde haya una isla con agua trasparente, arenas claras y una cabaña en la costa, viendo el atardecer”.

así soy yo

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