Un programa de la Uatre

Capacitan a voluntarios para enseñar a leer y escribir a la población rural

Carlos Claá

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Especial para El Litoral

“Educar debería ser una política de Estado. En un país normal, con 40 millones de habitantes no deberíamos tener analfabetos”, aseguró Gerónimo Momo Venegas, el líder sindical de la Uatre, durante la presentación de la XIII Jornada de Capacitación del Programa de Alfabetización Rural. Desde el martes, durante tres días, se desarrolló el evento en donde mostraron a 200 facilitadores voluntarios, que se acercaron desde diferentes provincias, un método novedoso para enseñar a leer y escribir a la gente de campo que no pudo acceder a la educación formal.

En la presentación, realizada en la flamante Escuela Político Sindical de la Uatre, en Capital Federal, participaron junto a Venegas, el titular de la Federación Agraria, Eduardo Buzzi, y miembros de otros gremios.

Cada año, desde hace más de una década, el sindicato de trabajadores rurales realiza esta capacitación para reducir el índice de analfabetismo existente en la población rural. Llegan a Capital voluntarios de todas las provincias que aprenden el método y reciben los materiales para llevar a sus pueblos. De esa manera se convierten en los maestros de sus vecinos y pueden enseñarles las nociones básicas para sacarlos del analfabetismo.

“A veces la gente firma cosas que no sabe qué dicen. Muchas personas los engañan”, explicó Ana Delgado, una coordinadora de Chaco que hizo la capacitación años atrás. Ramón Sayago, uno de sus alumnos, agregó: “A los 37 años es la primera vez que puedo leer y firmar. Antes sólo ponía el dedo”.

Rápido y efectivo

El método con el que instruyen a los analfabetos fue traído desde México y patentado por el sindicato en el país. Se trata de un sistema fonético-silábico-visual en el que a través del sonido y la repetición se logra el objetivo. “En 2002 hicimos una jornada de salud y nos dimos cuenta de que mucha gente no sabía leer. Entonces nos decidimos a comenzar con este proyecto. Conseguimos un método rápido y efectivo”, indicaron los organizadores.

Desde aquel año, la Uatre consiguió instruir a más de 68 mil hombres y mujeres de campo que tenían poca o nula educación escolar. Y, según sus registros, para este año inscribieron a seis mil nuevos alumnos. A las clases se anotan mayores de 15 años que, con la dedicación necesaria, en un lapso de tres meses pueden estar leyendo, escribiendo y realizando operaciones matemáticas básicas. La semana pasada, el Programa de Alfabetización Rural fue declarado de Interés Parlamentario por la Cámara de Diputados de la Nación.

Con críticas

En el discurso de presentación de esta nueva jornada de capacitación, Venegas aprovechó para hacer una crítica al gobierno nacional: “No sólo hay que enseñarle a leer y escribir a nuestra gente, sino también a ver la realidad. Para que el próximo gobierno no sea más de lo mismo”, sentenció.

En referencia al trabajo en negro en el ámbito rural indicó: “Tenemos que lograr que el trabajador del campo que tiene un plan social no lo pierda cuando sea registrado. Porque si no los trabajadores no quieren que el productor los inscriba, para no perder los planes”. Por último, acusó al Estado de ser socio del trabajo esclavo por sentar en su mesa de negociaciones a Jorge Castillo, coordinador de La Salada. “La gente decente tiene que llegar a gobernar este país. No podemos ser dirigidos por personas que vienen a improvisar”, concluyó.