Los temas pasaron al Senado para buscar sanción

Diputados insiste con la regulación de dos actividades

La Cámara votó nuevamente el reconocimiento a fisioterapeutas, terapistas físicos, licenciados en kinesiología y kinesiólogos fisiatras. También el encuadre legal de los servicios de seguridad privados.

Mario Cáffaro

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Por unanimidad, la Cámara de Diputados votó en la última sesión dos proyectos que apuntan a regular actividades y que habían sido aprobados en noviembre del año pasado, casi sobre el final del período ordinario, y que no alcanzaron a ser discutidos por el Senado por lo que perdieron estado parlamentario. La diputada oficialista Alicia Gutiérrez (SI) se encargó de presentarlos nuevamente, solicitó el pase únicamente por la Comisión de Asuntos Constitucionales, los fundamentó en el recinto y pasaron al Senado para su estudio. Se trata de la regulación de las agencias de seguridad privada y de la actividad profesional de kinesiólogos, fisioterapeutas, terapistas físicos, licenciados en kinesiología y kinesiólogos fisiatras.

Hoy en la provincia, la actividad de los profesionales de la kinesiología se encuentra regulada por la Ley 3.830, dictada en 1950, y sus posteriores reglamentaciones por lo cual no se adecua a los nuevos paradigmas de la profesión. “En los últimos años han surgido con igual o muy similar entidad académica a la de kinesiólogo, carreras tales como fisioterapeutas, terapistas físicos, licenciados en kinesiología y kinesiólogos fisiatras. Ninguna de estas profesiones se encuentran actualmente contempladas por la ley vigente, lo que ocasiona una grave desigualdad para quienes forman parte de la colegiación correspondiente. No obstante la similitud de las profesiones ha puesto, en función de su analogía, sus preceptos a todas las otras profesiones” explicó Gutiérrez quien aseguró que el proyecto es avalado por los colegios de dichos profesionales. Acotó la legisladora que también “la tecnología y los procedimientos propios de la actividad han tenido un desarrollo importante en las últimas dos décadas, surgiendo nuevos conceptos y aparatología que mejoraron notoriamente el tratamiento de los pacientes”.

Se informó que otras provincias como Chaco, Buenos Aires, Entre Ríos y Córdoba ya reglamentaron las nuevas profesiones.

El proyecto define los alcances de las profesiones, las condiciones habilitantes del título; atribuciones, prácticas e incumbencias profesionales; las condiciones e infraestructura para el ejercicio profesional y la colegiatura.

Desde diciembre de 1983, está constituido en la provincia el Colegio de Kinesiólogos, Fisioterapeutas y Terapistas Físicos, dividido en dos circunscripciones con sedes en Santa Fe y Rosario que se encarga de las incumbencias determinadas por la Ley 3.830.

Agencias de seguridad

El otro proyecto, sobre regulación de agencias de seguridad privada, apunta a ejercer un control efectivo sobre el funcionamiento de las empresas y personas prestadoras de dichos servicios y su texto fue fruto de una amplia discusión hasta alcanzar el consenso entre los diferentes sectores políticos de la Cámara a fines de 2013.

Hoy, en la provincia el accionar de las fuerzas de seguridad del Estado convive con el de las agencias privadas. “Diariamente personas y empresas de seguridad resguardan bancos, clubes, edificios públicos y privados y cumplen funciones en espectáculos públicos masivos. Son alrededor de 9.000 hombres los que integran estas organizaciones o se desempeñan en estas actividades, lo cual conforma casi un ejército paralelo a la seguridad pública” explicó Gutiérrez.

Para la diputada del oficialismo “es urgente contar con una herramienta legal que regule la autorización, el funcionamiento y la implementación de eventuales sanciones, sobre todo teniendo en cuenta que estos trabajadores y empresas deben controlar a los santafesinos y colaborar en el mantenimiento del orden y la paz social. Las actuales perspectivas y dinámicas sociales, la aparición de complejas modalidades delictivas, sumadas a la proliferación de sociedades destinadas a intervenir en estos espacios, hacen necesario que se readapten las reglas que las regulan”.

El proyecto aprobado apunta a “garantizar la integridad, eficiencia, templanza y capacidad de acción de los trabajadores que se desempeñan en estas tareas a través de la instrucción, las prácticas y los controles necesarios, como así también prevenir que las empresas del sector sean integradas por exonerados, testaferros y/o delincuentes salidos de las distintas fuerzas de seguridad”.