Súper TC 2000

Un felino insaciable

Como un verdadero “rey”, Néstor Girolami con el Peugeot 408 se devoró todo lo que estaba en juego en el callejero santafesino. Largó primero en las dos carreras y triunfó en ambas competencias. Ahora y ante el abandono de Fontana, es el puntero del torneo. Por su fuese poco, su coequiper Agustín Canapino le dio ayer el 1-2 a la escuadra francesa. En tanto que Christian Ledesma completó el podio con un Fiat Línea, aunque su puesto quedó en suspenso por la Comisión Técnica.

Seis. Entre sábado y domingo, “Bebu” Girolami se adueñó del callejero con el Peugeot 408. Foto: Pablo Aguirre

Daniel Monticelli

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Sol a pleno, una muchedumbre expectante (estimada en 40 mil espectadores) y esa efervescencia propia que ya se transformó en un clásico: nuevamente una carrera del Súper TC 2000 se ponía en marcha. Esta vez con el renovado circuito Santa Fe Ciudad como eje central y el tan anhelado ingreso al puerto local. Y Néstor Girolami con el Peugeot 408 logró tanta empatía con este trazado urbano, que metió dos victorias al hilo. La nocturna del sábado y la de ayer, que terminó por tiempo máximo ante la entrada en tres oportunidades del Auto de Seguridad, bajándose la bandera a cuadros al de Isla Verde, con velocidad reducida por neutralización. Segundo finalizó su compañero en el Peugeot LoJack Team, Agustín Canapino, mientras que Christian Ledesma, con el Fiat Línea hizo también podio. En este caso, a la hora de la verificación técnica posterior, los comisarios intentaron revisar si las pastillas de frenos utilizadas eran las reglamentarias, hecho que no se pudo constatar porque las mismas estaban demasiado deterioradas por la exposición a temperatura extrema.

Mientras y como si fuese poco para el “Bebu” Girolami, el hasta ayer líder del torneo, Norberto Fontana penó con un amortiguador (era el vástago), del Chevrolet Cruze durante toda la jornada, abandonó la carrera y le dejó la punta del certamen al de Peugeot, quien ahora le lleva 12 puntos de diferencia.

La largada fue un calco de la nocturna. Girolami imprimiendo un ritmo demoledor sacó distancias sobre Rossi y el resto. Ortelli seguía de largo con el Fluence y Spataro y Werner peleaban por el cuarto lugar.

La preocupación de todos era la temperatura de frenos y la transmisión. En el giro 4, Milla abandonó, quedó mal ubicado su auto e ingresó el primer Pace Car, con “Bebu” adelante y detrás: Rossi, Canapino, Pernía, Ledesma y Werner.

La reanudación trajo aparejado que Fontana doblara muy abierto en el puerto y tuviera que seguir por boxes, y era evidente el problema en el amortiguador. A todo esto, también venían los problemas para el Toyota de Rossi, que era superado por Canapino y Pernía.

El piñazo

En el giro 8, Girolami estaba en otra cosa y en el cambio de manos de la Alem, Spataro se quedó sin frenos y le pegó de lleno (a 220 kph) en la parte de atrás al Línea de Werner. Se vivieron momentos de zozobra ante la espectacularidad del impacto. “Emi” Spataro se bajó rápidamente del Fluence para ver a su colega. A todo esto, tanto los doctores Bressi y Peralta atendían a Werner, quien no presentaba golpe alguno, pero por precaución fue derivado al Sanatorio Garay para un chequeo, como indica el protocolo.

Después del reinicio (pasaron 5 vueltas más), Girolami sacaba más ventajas aún y Yannantuoni se iba a boxes con la goma trasera rota y Guerrieri se pasaba de largo en la curva “Diario El Litoral”. Después abandonaba por amortiguador destruido. En tanto, Ledesma lo superaba a Pernía y quedaba tercero, después de una lucha fratricida. En tanto, el Línea de “Nacho” Julián se quedaba sin capot.

A poco del final, se tocaron el Corolla de Llaver y el Peugeot 408 de Damián Fineschi, motivo por el cual éste último era excluido e ingresaba el tercer auto de seguridad. Y ya no había tiempo para más. La carrera expiraba con el auto de seguridad en pista.

Como un “león hambriento”, Néstor Girolami fue, en la oportunidad, quien se llevó todos los aplausos, de un fin de semana inolvidable en el callejero de nuestra capital.

Abandonó. El sábado por la noche mantuvo el primer lugar del campeonato, por apenas 1 punto de diferencia con Girolami. Ayer un amortiguador lo obligó a desertar de la competencia. Foto: Pablo Aguirre

14

Cambios de marcha

Con el ingreso al Puerto local, donde se toman curvas a 90º (en todo el trazado en total son 11), se efectuaban 14 cambios en la caja de velocidades de los autos.

"Llevo tranquilidad a todos, estoy bien. Sentí un golpazo desde atrás, pero son cosas que pasan. ‘Emi’ se quedó sin frenos y no le quedó otra. No me duele nada; sólo que podía sumar buenos puntos y terminé con el auto roto”.

Mariano Werner

Piloto del Fiat Línea

Emociones en la monomarca Fiat

En una competencia que contó con diversas emociones, Federico Sciaccaluga logró su primera victoria del año en la Fiat Punto Abarth Competizione, al vencer de punta a punta en el trazado urbano Santa Fe Ciudad. Detrás se ubicaron el salteño Pablo Alé, que superó al santafesino Federico De Pauli sobre el final y tercero arribó Christian Romero. En la curva del “Palomar” se pegó muy fuerte Roberto Corvalán, aunque sin ninguna consecuencia física.

Con una tarea muy prolija, Richard Stuart Milne finalizó en el cuarto puesto, seguido por el propio “Fede” De Pauli, mientras que Lisandro Masía, en una gran labor, terminó séptimo. De esta forma quedaron clasificados los diez mejores para disputar el play-off, entre los que se encuentra De Pauli.

"No hay mucho para decir. Tuve un problema de frenos y justo en una zona comprometida como la chicana del cambio de manos. Venía en cuarta a fondo y el auto no paró. Le pegué a Mariano (Werner) y dañé mucho su auto. Le pido mil disculpas por lo sucedido”.

Emiliano Spataro

Piloto del Renault Fluence

Muy roto. Mientras “Emi” Spataro se bajó del auto y fue rápidamente a ver el estado de Werner. El Renault Fluence quedó casi destruido, al igual que el Fiat del entrerriano. Foto: Pablo Aguirre