Llegan Cartas

Dios y nuestro país

JOSÉ LUIS BERMÚDEZ

DNI. 14.305.823

Sin ser un fanático religioso, sin pretender que todos piensen igual que yo, solicito se me permita decir que nuestra sociedad está siendo indiferente a Dios, y por esa razón vivimos situaciones tan difíciles. Nuestros representantes del gobierno nacional, provincial y municipal no dan muestras de humildad. Vivir bajo los preceptos de Dios nos hace más humildes, nos enseña lo que es el servicio a los demás. Jesucristo vino a servir a la humanidad, aun siendo Dios mismo. Seguramente, Él está dispuesto a ayudar a un funcionario público a servir a su pueblo. Estoy convencido de que si hubiese humildad y sumisión al Creador, muchos de nuestros males serían inmediatamente desterrados y creceríamos en forma permanente, tal como lo dice en Crónicas 7:14: “Si se humillare mi pueblo, sobre el cual mi nombre es invocado, y oraren, y buscaren mi rostro, y se convirtieren de sus malos caminos, entonces yo oiré desde los cielos, y perdonaré sus pecados, y sanaré su tierra”. Gracias al diario por permitirme expresar.